Capítulo 1.1 Teoría Queer

May 30, 2017 | Autor: Daphne Susana Paulin | Categoria: Queer Theory
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Capítulo 1.
Análisis del Modelo Hegemónico con relación a la sexualidad humana.

Aquí un análisis del modelo hegemónico con relación a la sexualidad, abordando conceptos como heteronormatividad, reproducción biológica, falocracia, determinación genética; haciendo mención a los acontecimientos históricos importantes como los trabajos de Darwin sobre la teoría sexual y todo un montón de estudios acerca de determinismo genético/hormonal/ambiental sobre la sexualidad y orientación sexual. Se abordarán los siguientes temas:

Teoría de selección sexual (relacionarlo con el origen del patriarcado).
Análisis del concepto de 'clase natural' (relacionarlo con el problema filosófico de la esencia / reificaciones / 'cosificación')
Niveles de clasificación (clasificación hombre-mujer desde distintas propiedades)

En el siglo XVII las prácticas de la sexualidad no se hacían en secreto, pero con la llegada de la revolución industrial se hizo más notoria la separación en el ámbito de la sexualidad a hombres y mujeres. El concepto del sexo como fuente de placer recíproco se desvaneció en la medida en que las exigencias sociales separaban la vida de hombres y mujeres. Las doctrinas religiosas contribuyeron a la falta de comprensión que exhibe nuestra cultura occidental frente a la sexualidad como un proceso fisiológico natural. Esta institución pone penitencia a todas las insinuaciones de la carne: pensamientos, deseos, imaginaciones, sueños, actos y convierte la carne en la raíz de todos los pecados, pues se dice que es un mal que afecta al hombre entero. La burguesía victoriana, la llama Foucault, en donde la sexualidad es encerrada y silenciada.Fue durante los siglos XVIII, XIX y buena parte del XX que el sexo tenía un concepto de pecado y algo destinado únicamente a la reproducción. Esta idea se impuso sobre lo que realmente es el sexo: una expresión de ternura humana y fuente de placer recíproco. Se impone como modelo la pareja procreadora y se confina la sexualidad a la recámara de los padres. También se hace un sesgo entre la sexualidad femenina y la masculina, y se establecen tanto prácticas como roles sexuales individuales, y por consecuencia se establece una separación entre el funcionamiento sexual y otros procesos naturales. Por ejemplo, a los hombres se les permitía y estimulaba que hicieran honor a su sexualidad, es decir, se les daba permiso para tener relaciones sexuales; mientras que a las mujeres se les reducía a ser un receptáculo seminal. La represión del sexo está protegida por el desarrollo del capitalismo: el orden burgués. El sexo es reprimido con tanto rigor porque es incompatible con una dedicación general e intensiva al trabajo; en la época en que se explotaba sistemáticamente la fuerza de trabajo, ¿se podía tolerar que fuera a dispersarse en los placeres, salvo aquellos, reducidos a un mínimo, que le permitiesen reproducirse?.......¿?

Es entonces cuando se impone la contaminación de decirse a sí mismo y de decir a algún otro todo lo que tiene relación con el juego de los placeres, sensaciones y pensamientos innumerables son… deben ser reducidos al discurso (a las confesiones); un mecanismo de poder para cuyo funcionamiento el discurso sobre el sexo ha llegado a ser esencial.

Para el siglo XVIII el discurso del sexo se convierte en formas de análisis, contabilidad, clasificación y especificación, investigaciones cuantitativas o causales, un discurso tanto moral como racional. Se debe hablar de sexo públicamente y de un modo que no se atenga a la división de lo lícito y lo ilícito, como algo que no se tiene que condenar o tolerar sino de dirigir y administrar. Para este siglo el sexo llega a ser asunto de reglamentar el sexo mediante discursos útiles y públicos. Por ejemplo como un problema económico: la población-mano de obra o capacidad de trabajo; el equilibrio entre la población y los recursos de los que dispone. Entonces así, se cuantifican conceptos como natalidad, morbilidad, duración de vida, fecundidad, frecuencia de enfermedades, formas de alimentación, entre otras. Dentro de este 'problema' político-económico se encuentra el sexo: edad del matrimonio, nacimientos legítimos e ilegítimos, precocidad, frecuencia de las relaciones sexuales, el celibato, incidencia de las prácticas anticonceptivas, entre otras cosas que se deben analizar en torno al sexo y sus repercusiones en los números que se deben analizar para medir la población y sus implicaciones socioeconómicas. Nace el análisis de las conductas sexuales, sus determinaciones y efectos, EL LÍMITE ENTRE LO BIOLÓGICO Y LO ECONÓMICO, por consecuencia el comportamiento sexual de las parejas es convertido en una conducta económica y política. El discurso pasó a ser muchos discursos producidos por una serie de artefactos que funcionan en instituciones diferentes y hay una multiplicidad de discursos que tomaron forma en la demografía, biología, medicina, psiquiatría, psicología, pedagogía, política, economía, etc.
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……FALTA ESCRIBIR MÁS
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Teoría de Selección Sexual
En 1859, Charles Darwin postuló la teoría de la selección natural, la cual definió, en un sentido amplio, como el proceso por el que cualquier pequeña variación fenotípica, siendo útil en la 'lucha por la existencia' se preservaría. El término 'lucha por la existencia' fue usado en forma general, incluyendo específicamente no sólo la vida del individuo sino también el éxito de dejar progenie, así mismo explica cómo ciertos atributos favorecen la eficiencia biológica de los individuos en términos de supervivencia y fertilidad en concordancia con las presiones de la selección ambiental.

Posteriormente, en 1871, en su libro "El origen del hombre y la selección en relación al sexo", detalla y ejemplifica el término de 'selección sexual'. Con esta definición más restringida deja fuera muchos caracteres que difieren entre los sexos en una misma especie y es evidente que comprometen la supervivencia de los individuos, como por ejemplo algunos ornamentos llamativos que hacen a los machos más vulnerables a la depredación. Explica las ventajas que poseen unos individuos sobre otros del mismo sexo y especie desde un enfoque propiamente reproductivo y que, a diferencia de la selección natural, se establecen ya sea por competencia directa entre los rivales o por ser características que son de selección para el sexo opuesto.

La selección sexual está dada de acuerdo a las características físicas observables en los individuos, básicamente los caracteres sexuales secundarios. Sobre la manera en que la selección sexual actúa en la humanidad, Darwin concluye que el mayor tamaño, la fuerza, el coraje, agresividad, y energía en el hombre en comparación con las mismas cualidades en la mujer fueron adquiridos en tiempos primitivos y posteriormente aumentados a través de las rivalidades entre los machos para la posesión de las hembras.

Darwin, claramente, hace una separación entre el hombre y la mujer de acuerdo a las características que presentan cada uno de ellos. El hombre es en promedio más alto, pesado y fuerte, tiene los hombros más cuadrados y músculos más pronunciados, su cuerpo y su cara son más velludos y la voz tiene un tono más grave, así mismo el hombre es más inventivo e ingenioso que la mujer. Darwin hace mención a la 'ley de lucha' a través ejemplos de tribus en donde los hombres luchan por una mujer. Las mujeres parecen diferir de los hombres en disposición mental, sobretodo en que son más tiernas y menos egoístas, Darwin señala que esto se puede observar incluso en las tribus salvajes. La mujer, debido a sus instintos maternos muestra estas cualidades a su progenie y sus poderes de intuición, rápida percepción y de imitación son más evidentes que en los hombres, algunas de estas facultades son características de razas inferiores y por lo tanto de los estados más bajos de civilización. Por otra parte, el hombre es el rival de otros hombres, se deleita al competir y por lo tanto es fácilmente caer en el egoísmo; todas estas cualidades parecen ser su derecho de nacimiento natural.

Con las descripciones sobre las diferencias entre el hombre y la mujer se puede entrever el papel pasivo de la mujer; el hombre, en cambio, tiene un rol activo al poder seleccionar a su pareja. También deja entrever que el hombre es superior en cuestiones físicas, mentales e intelectuales. Cabe mencionar que Darwin conjeturó que las diferencias entre las distintas razas humanas se debían a la variación regional y arbitraria de los criterios de belleza. Lo más difícil de digerir para los darwinistas de la época, era el carácter arbitrario de la elección femenina. Darwin menciona algunos ejemplos donde en algunas tribus, las mujeres tienen cierto poder de elección de pareja.

No debemos olvidar que la selección sexual no es más que un aspecto particular de la selección natural. Es obvio que para reproducirse uno tiene que sobrevivir hasta la madurez sexual, pero más importante aún que la es la . Así pues, se reafirma que el proceso de relacionarse sexualmente queda reducido a un solo objetivo: la reproducción. El progenitor que menos invierte en el negocio de la reproducción es también el que menos tiene que perder, lo cual explicaría que sean los machos los que se ofrecen a las hembras y no al revés. Pero, ¿por qué no pensar que las hembras se juegan mucho más en cada apareamiento, por lo que están más a evaluar de alguna manera la idoneidad de su eventual socio reproductor? La respuesta que Darwin tiene para esta pregunta es que la elección femenina no necesariamente tiene algún valor adaptativo, sino que puede responder a criterios estéticos arbitrarios. Cualquier pretendiente que haya sido capaz de imponerse a todos sus rivales ha acreditado de sobras su aptitud, por lo que las hembras no necesitan ejercer una selección activa.





Paulín Delgado Daphne Susana
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