Etimología de ZARAGOZA

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COMUNICADO De Enrique Cabrejas

Etimología de ZARAGOZA Theory the Iberian acronyms RPI: B-3851-14

Apreciados Srs.: Me es grato poner en su conocimiento y a través de este comunicado que el nombre de ZARAGOZA es un acrónimo ibérico que en español quiere decir: LOS GOZOS PARA LA SANTA. Me hago cargo de que esta afirmación les deje atónitos, no puede ser de otro modo; pues voy a transmitirles una epistemología que ha estado inédita durante miles de años. Esta novedosa teoría del conocimiento tiene un razonamiento sustentado empíricamente. Y es que la denominación de ZARAGOZA tiene su razón de ser en un Teónimo dado por sus antiguos pobladores tanos. Es el resultado de un antiquísimo acrónimo ibérico: LOS GOZOS PARA LA SANTA y dirigido a la que fue su diosa ibérica primordial. Luego, en la cristiandad “los gozos” los veremos en forma de composiciones poéticas en honor de la Virgen o de los santos. Son cánticos que se dividen en coplas que terminan en el mismo estribillo. Los zaragozanos desde tiempos inmemoriales han compuesto letanías a la patrona de su ciudad, de su pueblo o de su aldea y en especial a LA VIRGEN DEL PILAR. Y se podría pensar que nombres tan profundos para nosotros como son los de Εκκλησία (Iglesia) o Άγιος (Santo) son conceptos que se originaron en el seno del cristianismo pero sorprendentemente son pre romanos y nuestros ibéricos los usaban con frecuencia en sus ceremoniales, porque si bien la doctrina cristiana tiene un claro origen semítico, su liturgia por el contrario es el resultado de la readaptación de una mística que surge de la más pura semiótica helénica para luego romanizarse. Y en cuanto al topónimo “Zaragoza” no fue la consecuencia de una “Caesar Augusta” que según se dice fue el nombre de la ciudad romana sino causa de los “Santos Gozos”. Miren, he de apuntar que la implementación del nombre romano propuesto fracasó, prueba de ello es que nadie la llama como se dice que se hizo, incluso en su etimología romance no se observan rasgos latinos y es más, ¿no les parece revelador que hasta hace poco fuese Çaragoça? con zeta griega. Y todavía sigue con tan singular denominación y tal como en origen la pensaron los autóctonos “tanos”, en una idea religiosa basada en fervorosos ruegos; las oraciones, las plegarias y las -súplicas-, dicho en otras palabras: LOS GOZOS PARA LA SANTA. Lo cual me complace anunciarles aquí para que conste y surta los efectos a que hubiere lugar, convenga y proceda. Afectuosos saludos; Enrique Cabrejas Iñesta Investigador de la Historia del Lenguaje En Barcelona, 21 de Julio de 2016

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ETIMOLOGÍA DE ZARAGOZA Verán, la denominación de ZARAGOZA tiene su razón de ser en un Teónimo dado por sus antiguos pobladores tanos. Es el resultado de un antiquísimo acrónimo ibérico: LOS GOZOS PARA LA SANTA y dirigido a la que fue su diosa primordial. ¿Pero de quién se trataba? Bien, en realidad tendremos la oportunidad de conocerla a través de este estudio. Luego, ya en la cristiandad veremos esos gozos en forma de composiciones poéticas en honor de la Virgen o de los santos. Son cánticos que se dividen en coplas que terminan en el mismo estribillo. Los zaragozanos desde tiempos inmemoriales han compuesto letanías a la patrona de su pueblo, de su aldea o en la ciudad de Zaragoza a LA VIRGEN DEL PILAR. Y se podría pensar que nombres tan profundos para nosotros como son los de Εκκλησία (Iglesia) o Άγιος (Santo) son conceptos que se originaron en el seno del cristianismo pero sorprendentemente son pre romanos y nuestros ibéricos los usaban con frecuencia en sus ceremoniales, porque si bien la doctrina cristiana tiene un origen semítico, su liturgia por el contrario es el resultado de la readaptación de una mística que surge de la más pura semiótica helénica para luego romanizarse. Y en cuanto al topónimo “Zaragoza” no fue la consecuencia de una “Caesar Augusta” que según se dice fue el nombre de la ciudad romana sino causa de los “Santos Gozos”. Miren, he de apuntar que la implementación del nombre romano propuesto fracasó, prueba de ello es que nadie la llama como se dice que se hizo, incluso en su etimología romance no se observan rasgos latinos y es más, ¿no les parece revelador que hasta hace poco fuese Çaragoça? con zeta griega. Y todavía sigue con tan singular denominación y tal como en origen la pensaron los autóctonos “tanos”, en una idea religiosa basada en fervorosos ruegos; las oraciones, las plegarias y las -súplicas-, dicho en otras palabras: LOS GOZOS PARA LA SANTA. ZARA · GOZA 1 2

Faqa koFa

Ζά ἄρα Άγοςά

ZARA GOZA

La plegaria sagrada Para la Santa

En lingüística un acrónimo, del griego ἄκρος, transliterado como akros “extremo”, y ὄνομα transliterado “onoma” significa “nombre”. Pueden ser siglas que se pronuncian como una palabra, pero también son vocablos formados al unir parte de dos o más palabras. Este tipo de acrónimos es el tipo de nombre que es ZARAGOZA y es el modo común de uso de la sintaxis de los íberos y los celtíberos, que aquí se complementa de dos elementos claramente identificables. Son frases, sintagmas, oraciones y nombres compuestos. Y el significado de un acrónimo, es la suma de los significados de las palabras o frases que lo generan: Faqa “Zara-” que en griego se verá como Ζά ἄρα, es decir “la plegaria sagrada” pues ἄρα es singular femenino en modo vocativo dorio pero que incluso lo hallaremos en jonio, eolio o ático, más el vocablo koFa “-goza” que en griego se ve como Άγοςά y que viene de Άγιος, es decir “para la Santa”. Hay que señalar que al declinar su lengua empleaba concordancias y por ello es “-goza” y no “gozos”. Es necesario observar que en un acrónimo no se repiten las letras que sean coincidentes; se lleva a cabo una contracción: Ζά (ἄ)ρα (Ά)γοςά. (Za-ra-goza) En otro orden de cosas, a pesar que la escritura ibérica es extremadamente rara, véase que sus nominativos y nuestros sustantivos se construyen de semejante manera. Si son de género femenino finalizan en (-a) Es mucha, demasiada coincidencia, ¿no les parece?

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LA PRESUNTA SALDUIE Miren, y se ha dado por cierto que Salduie fue una antigua población situada en el área que hoy ocuparía la ciudad de Zaragoza y esto lo han basado en las monedas ibéricas y el nombre de Salduvia en un texto de Plinio el Viejo. Pero verán, reparé en cuanto al nombre que se lee en las monedas que algo no funcionaba como debiera, pues he de decirles algo sorprendente. En primer lugar, es una de las cuestiones más interesantes y a la vez controvertidas de todos estos asuntos, porque lo que los celtíberos escribieron en sus monedas no fueron los nombres de sus ciudades. Al desencriptar la numismática ibérica me di cuenta de lo que en realidad revelaban esas enigmáticas inscripciones. Y la cosa es la que sigue: Miren, para los romanos y resumiendo, a fin de crear una fuente fiable de ingresos denominar aquellas poblaciones innominadas fue esencial. Que los enclaves donde establecieron un campamento tomasen presurosos algún nombre, vital. Así, que si una moneda llevaba una inscripción, pues ya está. ¿Por qué no aprovecharlo? ¿Hay escrito algo? Sí. Pues ese lugar se llamará como reza la moneda. Que haya sido acuñada por los sumos sacerdotes íberos o lleve impreso IKESANKOM es decir “La asamblea para las oraciones” eso les dio exactamente igual. Lo que hay escrito en la numismática ibérica no son las poblaciones, son organismos íberos y los más influyentes. También referencias a lo que era más urgente para ellos. Es decir, alabar o tener en un contento a sus dioses primordiales. Nosotros sabemos que “no se puede amar a Dios y al dinero” pero los iberos tenían otras creencias o tal vez no fuesen tan distintas a las nuestras; pues nosotros tampoco grabamos los nombres de nuestras poblaciones en las monedas sino que damos en ellas reconocimiento a nuestras instituciones más representativas. En cualquier caso, por lo que respecta a Roma, sí lo tenían claro: “al Cesar lo que es del Cesar” y buscaron una solución urgente para poner a punto los necesarios instrumentos estadísticos de su administración. Eran pragmáticos y eso hay que reconocérselo. Pero hay algo más, miren, para que el nombre “Salduie” se transcriba como es preciso debe caligrafiarse como SahÜíé “Salduie”, sin embargo no es lo que está escrito en sus monedas, la discrepancia recae en el cuarto carácter Ü (DU) y que como se ve forma un triangulo isósceles que está cerrado en la parte inferior con un punto en su interior, sin embargo lo que leemos en sus ases es algo muy distinto, ya que ellos grabaron otro nombre: Sahïíé, “Salije”. El nombre contiene 6 letras y si lo observan detenidamente verán que el cuarto signo ï (i), tiene un punto en su interior pero la parte inferior no está cerrada sino que ha quedado abierta. Y es que no es un triangulo porque no se trata del signo Ü (DU), tal como se tiene por más cierto, sino de una letra ï (i). Eso tiene una importancia capital porque se trata de otro nombre distinto: SALIJE y que nada tiene que ver con “Salduie”. Verán, lo explicaré, ellos tenían cuatro signos para significar la letra “U” que a la vez era la “Y” griega y que son: u, U, û, ï. Ellos usaron el cuarto: ï (i) y nótese que cuando se da el diptongo “YI” se ha de vocalizar “ij” y que es justo como pronunciamos nosotros “hijo”. Pongamos por caso υἱ·ός (hyiˈjos). Cuando se da la secuencia “YI” el primer carácter se pronuncia /i/ y el segundo se pronuncia /j/. Se llama Iotacism, en griego ἰωτακισμός “iotakismos”. Y es el proceso por el cual un número de vocales y diptongos en griego convergió en la pronunciación para que suene la iota ([i]). Resulta que así es como lo pronunciamos nosotros en castellano, aunque desde la romanización lo escribimos con letras latinas. “Before a following vowel the j or w element is geminated, e.g. υἱός hyiˈjos or hyjˈjos.” [UCL. Division of Psychology & Language Sciences].

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LA JOTA Y dicen de “la Jota” que: “es un baile popular de origen aragonés aunque extendido a otras regiones españolas.” Es muchísimo más que eso. Lo cierto es que es un baile extendido a toda la península ibérica, y también a las islas e incluso más lejos. En cualquier caso la canción y la música que acompaña a este baile de compás ternario, formada por varias coplas y estribillo, con acompañamientos según el lugar donde se celebre: guitarras, bandurrias, castañuelas, etc lo hemos heredado de nuestra ancestral cultura celtíbera. Pero verán, les dirán que la “jota” viene del latín “saltare”, y no diré que los mañicos no salten, pero es que en realidad viene del celtibero, y que tiene su origen en la antigua y helénica ἰῶτα “iota”. Es francamente curioso que se emplee como locución para decir que se es muy ignorante en algo... ¡Ay! Y las “jotas”, son unos bailes populares en toda España y que en celtíbero significa “algo pequeño, aun lo mejor”. Verán, las Jotas, tienen su origen en los bailes sacros celtíberos que ellos y nosotros llamamos al igual que nuestros antepasados frigios, dorios, jonios, eolios... llamaban a estos bailes ἰῶτα “jota”, y que son las “novenas”. Los bailes inspirados en ancestrales costumbres griegas minoicas que tenían por objeto apaciguar a los Dioses. Luego los romanos las adaptaron para celebrar nueve días de duelo por los difuntos, y los primeros cristianos siguieron la costumbre en cuanto al número de días, pero el contenido de las novenas, de ser antiguas danzas con imploraciones pasaron a ser más tarde oraciones de carácter cristiano. A diferencia de las “octavas”, que son danzas de carácter festivo, las novenas tenían carácter de suplicas a los dioses y de oración para los difuntos. Con el tiempo, abandonaron su primigenio significado y evolucionaron pero conservando en su tradición elementos significativos que aún hoy les son reconocibles. Uno de los principales, son esos saltos sobre sí mismos, y los giros, que continuaron en el acervo tradicional a modo de bailes populares. Al igual, nuestros ancestrales hermanos de Asia Menor también usaban castañuelas y baquetas similares a las que emplean hoy nuestros baturros pero estas eran conchas o cuencas redondas anudadas a los dedos y distintos pequeños palos de madera en las manos y que hacían sonar junto con minúsculos platillos. Hoy podemos verlas, tanto en las recuperadas danzas arcaicas de la escuela de música de Korfú, como en sus homólogas españolas dedicadas a la Virgen en la escuela municipal de Tarazona. Y si uno las observa con una distante perspectiva comparada, verá los mismos pateados y giros, a la vez que los brazos son alzados haciendo sonar instrumentos, rituales danzas, fervorosos cánticos a los dioses. El geógrafo Estrabón nos transmitió: “mientras beben, danzan los hombres al son de flautas y trompetas, saltando en alto y cayendo en genuflexión…”. Pues claro. Permitan que les confiese que a mí me las enseñó a bailar mi madre y hoy mucho se lo agradezco. Y dicho lo cual ahora nos cabría una pregunta: ¿A santo de qué “la Jota” española lleva el nombre de la que es la “novena” letra del alfabeto griego?

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EBRO

Hay algo importante que deben conocer previamente, y es que en la mitología griega, Θεία “Tía”, y que significa “Ella” también fue llamada Euryphaessa. Fue la Titán más grande de nuestros llamados celtíberos. Muchas ciudades llevaron en el sufijo el nombre de esa “diosa”, tales como Numantía, Termantía, Balentía, Palentía, Lutía, etc. Pues bien, Θεία Εὐρυφάεσσα que significa “Ella, grande y brillante” trae las connotaciones de grado de εὐρύς “eurys” que quiere decir “ancho”, entre otros apelativos de la raíz εὐρυ-/εὐρε-, y unida también a φάος “brillante” que viene de la raíz φαεσ “luz”. Sin embargo, nótese que la llaman “Ella” por respeto y no nos dan su verdadero nombre. Y dicho esto, paso a explicar porque en la península ibérica tenemos un río llamado Ebro. El 9 de Septiembre de 2012 comprendí y averigüé que quiere decir “Ebro”. Les daré la etimología de nuestro río Ebro y que en realidad es muy sencilla. El río Έβρου “Ebro” quiere decir “caudaloso”. Parece un nombre más que apropiado para nuestro río. Así lo consideraron nuestros iberos y celtíberos al llamarle Έυροος “Evros”, con un adjetivo que significa “de curso fácil” o que “corre con facilidad”. Lo más gracioso es que es la misma etimología para nuestra moneda “euro” miles de años después. Tal vez pensaron que debería ser una divisa fuerte y con un concepto “caudaloso” para las monedas en los bolsillos de los europeos, también. La historia es redundante, y siempre llamamos a las cosas que se parecen a las mismas cosas del mismo modo. El problema es que en general los españoles; los niños, los jóvenes, los adultos de este país, ni ellos ni sus generaciones anteriores conocen nada de la mitología griega. Si la hubieran estudiado, habrían comprendido y desde un buen principio porque nuestro río Ebro se llama de este modo. Y les dije “nuestro” porque también hay otro. El Ebro no es el único río que recibió este nombre, No. Porque todo está duplicado, aquí en España y a su vez en Grecia, y el río Ebro está donde debería estar, en Tracia. Les doy las coordenadas: Έβρου “Ebro”. Coordenadas: 41 ° 40'1 "N 26 ° 28'7 "E. En este continente, todo aquello que es grande, se lo debemos a la diosa hija de Fénix, llamada Εὐρώπη “Europa”. Pero en cualquier caso, esto forma parte de nuestra historia también, puesto que si no fuera así no tendríamos un río Ebro, y nuestro río Ebro no hubiera tomado la raíz del nombre Euro-pa. Pero en efecto, ustedes deberían saber cómo se representa la diosa Europa en la mitología: Siempre grande, siempre abundante, y llevando en una mano el cetro de una reina por un lado y en la otra el cuerno de la abundancia. Eso es Europa o, al menos, esa fue la primera idea que se tuvo de ella. Y lo escribamos como queramos que nos estaremos refiriendo siempre a lo mismo (euro / evro / ebro). Miren, la letra “Y” griega, anteriormente era como una “U” para luego ser como una “I”. La letra “B” no fue siempre “B” sino que era “V” y la letra se confundía a veces con la “U”. Un gran lío que no sé ni cómo explicarlo. Pero lo que sí sé, es de un gran río Ebro que cruza la península Ibérica y desemboca en el Mar Mediterráneo y de otro gran río Ebro que cruza Tracia por Καστανιές Έβρου “Castanyes Ebro”. Este río desemboca en el norte del mar Egeo y hoy recibe el nombre de Maritza.

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SAN JORGE El 23 de Abril se celebra el día de Aragón y es una jornada muy especial en Zaragoza. En la actualidad ese día se ha convertido internacionalmente en el Día del Libro y coincide con la fecha de fallecimiento de Cervantes y Shakespeare. Es el día de San Jorge y el nombre proviene del griego Γεώργιος “Georgios” que significa “agricultor”. Pero verán, los reyes de Tracia son los Κότυς “Kotys” –Gotys- y de los cuales encontré que eran un antiguo pueblo en el río Ebro, pero ese río para mi sorpresa no se encontraba en Aragón que también sino que se encontraba en Tracia. Y es lo que me llevó directamente al increíble hallazgo. En Serdica, área de Daskalo (Bulgaria) había una dedicatoria al “Jinete Tracio”, y por aquí empecé a tirar del hilo hasta que logré dilucidarlo todo: Los reyes de Tracia, los “Kotys”, casualmente coinciden con la denominación para quienes conocemos como “Gothys” (visigodos). Y sabemos de la metódica modificación de la “k” ibérica por la “g” en latín, por lo cual con toda seguridad estamos hablando de un origen tracio y de quienes fueron también reyes dentro de la tradición ilirio-tracia primero y la aragonesa después. Y pudieron llamarle de cualquier otro modo pero admito que si lo presentan con la filiación correcta, mejor para todos. Se hace más fácil: “El Jinete Tracio” y dicho el nombre, cierro las comillas y no hay mucho más que discutir. Este “jinete” fue una deidad para las tribus tracias, dacias e ilirias. Era un dios portador de relámpagos y rayos como el dios griego Zeus. Los pueblos eslavos lo conocían por ZBelsurdos, y que casualmente es exactamente el mismo dios tanto para los tracios del este como para los celtíberos del oeste, éstos le llamaron simplemente Bel o ZBel. “El Jinete tracio” es término convencional para un motivo recurrente en la iconografía mitológica paleo-balcánica. La tradición llena de ejemplos está atestiguada desde Tracia a Mesia y Escitia Menor. Conocido también como el Héroe Tracio y llamado Heros Karabazmos en Odessos (Varna). Un dios del mundo subterráneo y que suele representarse en las estatuas funerarias con un jinete matando con una lanza a una bestia: grifo-dragón, toro, o serpiente. A partir del cristianismo continuó como las representaciones de un San Jorge matando al dragón. ¿Pero, cómo se explica esta permuta? Es lógica, cuando el cristianismo era una religión incipiente necesitó de personajes heroicos que facilitasen el lozano proceso evangelizador. La tradición católica lo sitúa como un soldado romano, que por su condición de cristiano fue miserablemente martirizado. Y es posible que sucediera tal como se dijo, ¿por qué no? Muchos sufrieron por sus abnegadas causas, por lo cual, asimilarlo a un héroe anterior sustituyéndolo sería de lo más plausible. Sin embargo, lo que no es tan ductivo es situar a ese mártir cristiano a caballo y dando muerte a un ser mitológico como un grifo o un dragón. En cualquiera de los casos, el culto y devoción a San Jorge fue en aumento, y los cruzados lo tomaron de enseña y desde entonces muchos territorios y países lo han asimilado también como su insigne patrón. Y es natural, porque aun los aragoneses lo desconozcan, este héroe a caballo siempre estuvo con ellos y desde el inicio dándoles protección. A ellos, tanto como a sus antepasados desde los remotos tiempos de los celtíberos hasta incluso para los indómitos caballeros de la Corona de Aragón. Y es que nada se crea ni nada se destruye, únicamente se transforma. En este caso, cambiaron el nombre para adaptarlo a los nuevos tiempos y al culto de la nueva fe emergente. Unos tiempos que ya no admitían adoraciones a coléricos dioses guerreros y que por el contrario juraban por los santos de la cristiandad. San Jorge es la adaptación cristiana de “El Jinete Tracio”.

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LOS BRONCES DE BOTORRITA Verán, Botorrita es un municipio de la provincia de Zaragoza que tiene un importante yacimiento arqueológico. Se encuentran los restos de una ciudad íbera a la que llaman Contrebia Belaisca. Allí hallaron unas placas y una de ellas contiene el texto ibérico más extenso que se ha encontrado jamás. En la actualidad se conservan en el Museo Provincial de Zaragoza. Justo ahora me encontraba delante de esa enigmática escritura que recibía el nombre de Botorrita I. ¿Podría desvelarla? Tenía la plena confianza de que la podría transcribir. Sabía que lo iba a lograr. Meses antes había descifrado la escritura ibérica y transcrito otro bronce: “El bronce de Luzaga”. Así que tenía la experiencia necesaria que ni en el mejor de los sueños pensé alcanzar. Ahora me consideraban un especialista. Descifrando la escritura ibérica tuve la oportunidad de tener un nuevo asomo hacia ellos y hallar sus auténticos orígenes. ¿Pero este otro enigmático bronce? ¿Qué misterios ocultaba? Todo aquello era tan interesante, tan emocionante y tan inédito que asustaba, pero me mostraba confiado de que lo podría realizar y peritar. Sabía, que como ocurrió con el anterior tendría que hacerlo público, pero mientras me fuera posible, lo disfrutaría como una gran experiencia personal. Y cuantas ganas tenía por empezar. Ponerme de nuevo a trabajar en esa sobrecogedora epigrafía. Ahora conocía su idioma. Sus alfabetos epichorikos los tenía interiorizados como cualquiera de las otras nueve lenguas que por aquel entonces hablaba. Soy políglota. Su lengua era fascinante, y mostraba un pensamiento más complejo del que jamás se pudo pensar. Veríamos. Porque sabía que quienes se establecieron en nuestras regiones no eran propiamente griegos sino profusamente Ilirios, Macedonios, Tracios, Getas, Lidios, Licios, Cario, etc., y que hablaban lenguas que tuvieron su origen en el este, en Anatolia, la gran cuna de las lenguas. Para entender aquello tenía una pista importante en la Ilíada, abiertamente para mí fue primordial. Si hacemos caso a lo que nos reveló Homero, claro. Miren, ahora resultaba fundamental conocer ese detalle y, es que resulta que nos informó de que los dioses Zeus, Ares y Apolo estaban del lado de los Troyanos mientras que Hera, Atenea y Poseidón apoyaban a los griegos en la Guerra de Troya. Según esto, es obvio que los griegos no solo ganaron la guerra sino que también los dioses de sus oponentes. En origen no fueron dioses suyos, pero luego constituyeron parte, en grado máximo, del Panteón griego. Y hasta el punto de que siempre los consideramos dioses griegos cuando todo indica de su adopción. Ese determinante indicio fue decisivo, porque si daba con los dioses que dieron culto quienes escribieron nuestros textos en la península, podría conocer mejor quienes eran ellos, y también cuál era su idioma. Porque voy a adelantarles algo importante, el Botorrita I no se trata de un mero apunte en una placa, de un vulgar rudimento. ¡No! Bien al contrario, se trata de una magna obra en su periodo. Hoy todos sus descendientes somos sus legítimos depositarios. Por lo tanto... Veamos que nos dice el primer párrafo con nueve de esas enigmáticas frases. Pensé que el primer vocablo era esencial para determinar adecuadamente el contenido del texto. Tal vez si lo comprendía a la primera, pudiera situarme rápidamente en el asunto: Se trataba de Yüíc, y traducido podía leerlo así: ΤΙΚΥΙΚΑ “tikuika”. Ese era el primero de los enigmáticos acrónimos, es decir transcrito a la lengua griega de la época frigia tenía una primera frase. Entonces, se trataba de un acrónimo que tenía que identificar en sus distintas partículas de significado y lo hice de este modo: ΤΙ · ΚΥ · ΙΚΑ. Créanme que supe inmediatamente que significaba solo leerlo: ELLA, ALTÍSIMA. Y entonces me llamó mucho la atención que esa TI·KU·IKA y la PIL·AR·ICA tuvieran tanto en común, pues no sólo mostraban una igual desinencia sino que ambas además estuvieran en las ALTURAS.

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LA SANTA Miren, los antiguos helenos realizaron algo extraordinario con el lenguaje. De la unión de las palabras construían frases, y estas daban a su vez como resultado otras nuevas palabras con significados. Por ejemplo y ahora translitero: Demos (pueblo) y Cratos (poder) significa “el poder del pueblo”, pero con ello obtenían así un nuevo vocablo: “La Democracia”. Nuestros iberos lo hacían igual y en Noviembre de 2013 con suficiente fluidez ya podía leer, hablar, escribir y comprender la escritura ibera. Y lo que esas palabras significaban era tan fascinante y extraordinario que apenas podía dar crédito a lo que leía. Así comenzaba el texto del Botorrita I: Literalmente era un “Ella Altísima”. ¡Sensacional! Estaba que no cabía de gozo, me quedé casi sin respiración. Al descifrar la lengua ibérica, me di cuenta de que las palabras no son como las piensan quienes estudiaron estos asuntos. No eran palabras sino que eran frases. Al principio, las palabras no eran tal y como las conocemos. No me refiero a que con el tiempo derivasen en otras palabras, sino que fueron pensadas de otro y distinto modo. Por supuesto, los lingüistas intuyen que las palabras debieron ser interjecciones y onomatopeyas, en sus inicios. El hombre se separó del mundo animal (salvaje) y comenzó a crear imágenes mentales en complejos conceptos, gracias también a estímulos auditivos y vocales, que recibían para elaborar desde simples sonidos los fonemas y eso está claro pero a lo que me refiero es a otra cosa distinta. No repararon que cuando comenzaron a construirse las primeras frases con palabras, esas no lo eran ya, se habían enlazado previamente con otras y eran, propiamente, frases en sí y no palabras. Los sintagmas no se construyeron con palabras sino con frases. ¡Impensable! y tiene lógica porque las palabras eran y son la representación de una lengua que es hablada pero que luego se transmitirá también escrita. Sin embargo, todo inicio nace de una mínima expresión para luego crecer y con el tiempo seguir evolucionando. En ese sentido, me di cuenta, que aquello que vemos como simples sufijos también fueron raíces de antiguas palabras. El razonamiento es aplastante, y los lingüistas nunca lo han entendido como yo, al menos aquellos que siguen pensando que no es posible que pudiera hacer el “milagro” y en eso tienen razón, sólo Dios los hace. Es el inicio de la vida de las palabras. Nuestra lengua se creó formada de diminutas partículas de sonido y que unidas a otras creaban nuevas palabras. Y así camino hacia la eternidad... Y no es hasta el ACRÓNIMO NUEVE que finalmente llegaba el vocablo medular, esencial, el último del primer párrafo y que lo aclararía todo. Lo estoy viendo, lo estoy leyendo, y apenas puedo dar crédito a lo que veo. Ahora estaba claro, diáfano, cristalino. Es más, lo declamaban tan claro que todos podrían entenderlo perfectamente, y solo con estas palabras que nos dejaron atestiguado nuestros iberos: HélíÓJ, (ΝΕ · ΛΙΤ · ΟΜ) ¡SI! NUESTRA -SEÑORA- LETO. La madre de los Λητοί; Los gemelos hijos de Leto y Zeus: APOLO y su hermana. Lo que escribieron y pronunciaron los iberos no deja lugar a dudas. Es una ofrenda invocada a su diosa primordial. Nada menos que a la madre de Apolo y esposa de Zeus. Una auténtica Letanía original, como nunca la vimos antes. Ahora se comprende por qué el texto de la placa ibérica fuera tan extenso. Porque se trata de una retahíla para salmodiar. Glosaban imploraciones a ELLA, ALTÍSIMA la diosa LETO madre del dios Sol en las alturas. La primera de la historia en la península ibérica y de la que tenemos constancia y que revela la razón por la cual, tiempo después y con la llegada a la península de un nuevo culto y doctrina, los elogios y las suplicas a Nuestra Señora la Virgen María recibirían no otro sino el mismo nombre: LETANIAS.

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ELAZ · ΕΛΛΑΣ Verán, el 21 de Abril de 2012 descifré la lengua ibérica, concretamente a partir de la escritura ibérica septentrional. Averigüé que el texto de El Bronce de Luzaga estaba compuesto por 124 signos que formaban 24 vocablos, y estos se componían a su vez de sintagmas con 45 palabras significadas, más 16 signos de puntuación escritos en ocho párrafos. Cabe señalar que los antiguos epigrafistas cometieron un error crítico, creyeron que la escritura íbera y celtíbera se escribía con palabras cuando una gran parte de la misma son acrónimos o sintagmas de dos, tres o más vocablos de significación. Algo nada celta y por otro lado completamente heleno. Descubrí que el texto se podía leer y comprender perfectamente en una coherencia que resultaba tan excelente como extraordinaria. Además se podía contrastar científicamente a través de la lengua griega antigua al cruzarla a la vez con la helena frigia, en sus modos jonio-eolio-lidio-dorio, ya que la escritura ibérica septentrional o celtibérica no tiene origen en una supuesta lengua celta sino en las raíces de la proto lengua helena de la época frigia. Pero lo más sorprendente es lo que anuncio ahora: Nuestras palabras, las que usamos nosotros, pude comprobar que son las mismas que usaban ellos. Naturalmente no están completas tal y como las conocemos, ni tampoco escritas con nuestros caracteres actuales. Otras muchas se extraviaron en el tiempo y no son de uso corriente; no obstante, todavía podemos encontrar esas mismas raíces en el griego antiguo, incluso algunas en el griego actual, lo cual no digan que no es portentoso; ahora bien, nosotros las conocemos escritas con ortografía de patrón latino. ¡Sorprendente! Nuestros celtíberos grabaron el texto usando un alfabeto epichorikos, quiere decirse en este caso uno ibérico propio, y los vocablos guardan perfecto significado con el griego frigio. Son ellos, quienes nos confirman a Heródoto, asombrado tan sólo doy testimonio de ello. Me resulta sumamente emocionante, como es natural. Son ellos y no otros quienes dicen ser: ΕΛΑΣ... ΚΑΡΥΟ : ΤΕΚΕΣ. Es decir “Helenos, Cario de Anatolia”, ¡Impensable! Y lo hacen de este modo tan singular, vean: ëlaF… Cquo : &wF. Pero éramos analfabetos de la escritura ibérica y no lo pudimos siquiera sospechar. Fue un debate abierto durante siglos y que los historiadores no pudieron resolver. Lo denominaron el problema insoluble de LAS DOS IBERIAS pero la cuestión quedó resuelta en el instante que pude leer una menuda lámina ibérica: “El bronce de Luzaga”. Entonces pude constatar que sencillamente era cierto, que las dos “Iberia” estaban relacionadas entre sí y entre esas dos “Iberia” finalmente se fundó Europa. Pues nosotros, somos la selección natural, mestiza y superviviente de aquellos jóvenes que emprendieron su periplo desde la otrora lejana península de Teke: iberos, eolios, jonios, dorios, troyanos, misios, ilios, ilirios, carios, caricos, lidios, licios, cilicios, licaones, pamfilios, pisidios, bitinios, gálatas, medeos, paflagones, colquidios, aerios, armenios, albaneses, y más. La lista es muy numerosa y eso sin incluir las islas y el continente griego. Y es que esta tierra fue la de TODOS, por eso recibió su nombre: HISPANIA. Fraccionaremos el nombre para entender mejor esta denominación: HIS (esta) PAN (todo) IA (hijos) - “ESTA (TIERRA) DE HIJOS DEL DIOS PAN”. ¿No les parece apasionante?

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LA ESCRITURA IBÉRICA Verán, muchos de quienes siguen mis investigaciones se preguntan por qué razón no hago mención a otros especialistas, ni siquiera para rechazar sus hipótesis o argumentar en contra. Pero ¿por qué debería hacerlo? En primer lugar, no soy quien para ponderar lo que no propongo. Y en segundo lugar, desarrollé una fecunda metodología científica a la cual denominé: La Teoría de los Acrónimos Ibéricos. Es clave para entender nuestro idioma, y su aplicación me permite explicar todo aquello que nadie hizo jamás; como se debiera, entiéndase. Dispongo de la mejor herramienta y lo he explicado, reiteradamente, y claro, lo seguiré haciendo, tanto como sea necesario; porque percibo que se sigue sin entender cómo se denominaron las palabras, los lugares y las cosas en nuestro país y no solo, antes de que nosotros lo poblásemos, únicamente es método para hallar su verdadero origen y así demostrarlo. Nuestra lengua ibérica es anterior a la griega, pero hoy la conocemos y desde tiempos escrita con otra ortografía, con letras romanas. Que la lengua española viene del latín es una ilusión óptica. Ya que lo que el ojo ve la mente lo cree. A todas luces parece latín, pero... créanme, no lo es. Es puro ilusionismo. La vemos escrita con letras latinas y entonces suponemos que fue razonada igualmente en latín, pero miren, fue pensada de otro modo. Fue construida en un idioma ibérico de origen anterior y muy heleno. Su lengua, la de nuestros antepasados, es concreta, coherente y lógica. Ellos, pronunciaban todo lo que escribían, igual que nosotros decimos que lo hacemos en la actualidad, y es que se trata de nuestra misma lengua. Y es que nosotros, que teníamos una escritura antigua y anterior a la lengua griega helenística, con la llegada del latín ganamos una nueva ortografía, pero en cambio perdimos nuestras pretéritas funciones del lenguaje. Sí, perdimos la función emotiva por otra. Perdimos la función conativa por otra. Perdimos la función poética por otra. Perdimos la función fática por otra. También la función metalingüística se vio afectada y, lo que es peor, perdimos toda la función referencial y para siempre por otro idioma que desde entonces se pretendió ab initio. ¿No les parece de interés recuperar nuestro idioma primigenio? Los ACRÓNIMOS IBÉRICOS son las primarias frases de uso por los autóctonos (de facto) en la península ibérica y por asombroso que parezca hoy constituyen los morfemas, fonemas y lexemas del léxico del actual castellano, por ende idioma español. Pues, derivando del latín lo indeclinable de forma, es decir términos no variables que son genuinos y puramente ibéricos, no se acredita más el origen de la lengua española sino, bien al contrario, se justifica la conjetura de un latín superior que da como consecuencia un subordinado origen del idioma castellano. Cuando en realidad son a la par, ambos, un futuro latín y un futurible idioma castellano bebieron de fuentes “pre griegas”, incluso en numerosas ocasiones de raíces distintas ¡Inimaginable!

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Referencias Cabrejas Iñesta, Enrique (Marzo 2015) HIJOS DE TITANES - EL SECRETO ÍBERO - ISBN: 978-849095-585-7. Colección: Investigación. Editorial Círculo Rojo. Almería. DEPÓSITO LEGAL: AL 1992015. Bibliografía: Herodotus, The Histories. Hesiod, Theogony. Homer, Iliad. Homeric Hymns. English translation in the Online Medieval and Classical Library. Pindar, Pythian Odes. Homer: Iliad, 2 vols., revised by William F. Wyatt, Loeb Classical Library, Harvard University Press (1999) Homer: Odyssey, 2 vols., revised by George E. Dimock, Loeb Classical Library, Harvard University Press (1995) The Iliad, Farrar, Straus and Giroux (2004) ISBN 0-374-52905-1 The Iliad, Penguin Classics (1998) ISBN 0-14-027536-3 The Odyssey, Penguin Classics (1999) ISBN 0-14-026886-3 The Odyssey, Red and Black Publishers (2008) ISBN 978-1-934941-05-8 Strabo. Geographica III. Diodorus Siculus. Bibliotheca historica. Φιλολογική Ομάδα Κάκτου, εκδόσεις Κάκτος, 1992. Σπ. Ιακωβίδης, Αι μυκηναϊκαί ακροπόλεις, Εκδόσεις Πανεπιστημίου Αθηνών: Αθήνα 1973. Κ. Δημακοπούλου (επιμ.), Ο Μυκηναϊκός Κόσμος. Πέντε αιώνες πρώιμου ελληνικού πολιτισμού. Εξωτερικοί σύνδεσμοι Απολλοδώρου, Επιτομή της Βιβλιοθήκης Ηροδότου, Ιστορίαι. Παυσανίου, Ελλάδος περιήγησις. Πρόκλου, Χρηστομάθεια. Στράβωνος, Γεωγραφικά Dictys Cretensis, Ephemeridos belli Trojani libri (μετάφραση Γιώργη Γιατρομανωλάκη ως Δίκτυς ο Κρητικός, Εφημερίδα του Τρωικού Πολέμου, Άγρα, 1996) Dares Phrygius, De excidio Trojae historia (μετάφραση Γιώργη Γιατρομανωλάκη ως Δάρης ο Φρύγας, Ιστορία για την άλωση της Τροίας, Άγρα, 1996) Greek Mythology. Encyclopædia Britannica. 2002. Greek Religion. Encyclopædia Britannica. 2002. Griffin, Jasper (1986). Greek Myth and Hesiod. The Oxford Illustrated History of Greece and the Hellenistic World edited by John Boardman, Jasper Griffin and Oswyn Murray. Oxford University Press. ISBN 0-19-285438-0. Grimal, Pierre (1986) Argonauts. The Dictionary of Classical Mythology. Blackwell Publishing. ISBN 0 -631-20102-5 Hard, Robin (2003). Sources of Greek Myth. The Routledge Handbook of Greek Mythology: based on H. J. Rose's A Handbook of Greek mythology. Routledge (UK). ISBN 0-415-18636-6. Kirk, Geoffrey Stephen (1974). The Nature of Greek Myths. Harmondsworth: Penguin. ISBN 0 -14-021783-5. Lexicon Iconographicum Mythologiae Classicae. Artemis-Verlag. 1981–1999. Nagy, Gregory (1992). The Hellenization of the Indo-European Poetics. Greek Mythology and Poetics. Cornell University Press. ISBN 0-8014-8048-5. Nilsson, Martin P. (1940). The Religion of Eleusis. Greek Popular Religion. Columbia University Press. North John A., Beard Mary, Price Simon R.F. (1998). The Religions of Imperial Rome. Classical Mythology in English Literature: A Critical Anthology. Cambridge University Press. ISBN 0-521-31682-0. Papadopoulou, Thalia (2005). Introduction. Heracles and Euripidean Tragedy. Cambridge University Press. ISBN 0-521-85126-2. Stoll, Heinrich Wilhelm (translated by R. B. Paul) (1852). Handbook of the religion and mythology of the Greeks. Francis and John Rivington. Trobe, Kala (2001). Dionysus. Invoke the Gods. Llewellyn Worldwide. ISBN 0-7387-0096-7. Trojan War. Encyclopaedia The Helios. 1952. Troy. Encyclopædia Britannica. 2002. Volume: Hellas, Article: Greek Mythology. Encyclopaedia The Helios. 1952. Dan Dana. Zalmoxis de la Herodot la Mircea Eliade. Istorii despre un zeu al pretextului, Polirom, Iași, 2008 Cabrejas Enric, 2014 Karuo – the Iberian Secret (Book review). ISSN 2311-8822. Scientific Journal. Kiev. Future Human Image 1(4) 19. International Society of Philosophy and Cosmology. Bazaluk O. A. (Ch. Editor), 2014 Matusevych T. V. (Ch. Editor), 2014. Cabrejas Iñesta, Enrique (Enero 2013) KARUO - EL SECRETO ÍBERO - ISBN 978-84-9030-665-9. Colección: Investigación. Editorial Círculo Rojo. Almería. DEPÓSITO LEGAL: A 1185-2012. Cabrejas Iñesta, Enrique (Noviembre 2012) Henares, 25,33. Libro de Actas. XIII Encuentro de Historiadores del Valle del Henares. ISBN 978-84-92502-28-9. (c) 2012 Diputación Provincial de Guadalajara. Institución de Estudios Complutenses. Centro de Estudios Seguntinos. Depósito Legal GU 210 – 2012.

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Etimología de ZARAGOZA Por Enrique Cabrejas Iñesta DOI: 10.13140/RG.2.1.2022.8085 ORCID: 0000-0002-5002-5850 CIDEIN: 00.00240/ECI.21.07.2016 THE ORIGINS OF THE SPANISH LANGUAGE - THEORY THE IBERIAN ACRONYMS by ENRIQUE CABREJAS DOI: 10.13140/RG.2.1.3150.5364 Theory the Iberian acronyms RPI: B-3851-14 © 2012 by Enrique Cabrejas Iñesta © 2012 logo enstitut ideal nol © 2012 Fuentes gráficas de Ibero Juan-José Marcos © 2012 by Enrique Cabrejas Iñesta https://enriquecabrejas.blogspot.com.es https://plus.google.com/+EnriqueCabrejas www.facebook.com/EnriqueCabrejasIniesta

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