Una industria que no se ve

October 6, 2017 | Autor: M. Tenti | Categoria: Historiografia
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ultura La falta de hábitos de lectura posibilitó que la industria del libro en Santiago del Estero no esté bien posicionada.

La industria del libro en Santiago del Estero es realizada principalmente de manera privada, ya que son los propíos autores quienes solventan todos lo costos de producción, edición e impresión de cada obra que realizan. EFECTO CINCO, dialogó con una autora santiagueña, María Mercedes Tenti, quien se dedica a la realización de investigaciones históricas, las que son reproducidas luego en sus obras. La escritora santiagueña Nuestra provincia comenta que, desde sus orígenes en la cuenta con una creación discursiva hasta hoy, nuestra gran riqueza provincia posee un problema cultural. Ese fundamental cuando se realizan obras patrimonio mágico de temas específicos de Santiago del se ve reflejado, en Estero, ya que por lo general, dichas producciones no son de interés para las parte, en páginas editoriales de nivel nacional. "A las de libros de autores editoriales nacionales no les interesa santiagueños, mayormente un libro de la de historia de quienes de alguna Santiago del Estero, porque donde no tiene una repercusión directa en el manera resumen mercado editorial no les interesa. sus propias cuesta insertarse en el vivencias, formas Entonces mercado", expresó. de vida, y cultura. La falta de editores e instituciones que se dediquen a esta tarea, ha hecho que la producción cultural de la provincia, como así también las investigaciones pedagógicas e históricas, se encuentren truncadas y no reciban el v a l o r y r e c o n o c i m i e n t o que generalmente tienen estos trabajos en otros lugares del país.

Unas pocas editoriales En Santiago, quienes realizan las ediciones de libros son por ejemplo, Marcos Vizoso, pero sólo edita algunos libros específicos; después Santiago Libros que lo hizo en algún momento, pero no continúa, y por otro lado hubo algunos intentos de editorial de Julio carreras. Esta tarea no tiene rédito debido a que no existe, demasiado mercado que le permita a los autores y a las editoriales continuar produciendo. Finalmente se termina recurriendo a la "fotocopia", "en gran medida, la fotocopia mató el libro", comentó Tenti. Una situación diferente es la que se genera desde la Universidad Católica de Santiago del Estero, que al editar libros, otorga ese respaldo que avala las obras y las distribuye, llegando a distintos lugares que sobrepasan el reducido ámbito de la provincia.

El recorrido dellibro Realizar un libro no es una tarea que se hace en unos pocos días. Este tipo de producción puede tardar años en dar resultados óptimos y finales. Una vez r e a l i z a d a la investigación, interpretado los datos, y concretada la escritura del mismo; el autor debe asegurarse de que su obra no sea pagliada en un futuro. Para ello

recurre a inscribirlo en la Cámara Argentina del libro. Allí lo registra como propiedad intelectual y también queda registrado en la base de datos a nivel internacional. Además ellos incorporan el número ISBN, registrado según el rubro de la obra. Para realizar los trámites de derechos de autor, se debe viajar a Buenos Aires para realizar el tramite de sellado (que es mínimo), completar planillas, y luego, cuando el libro está editado hay que dejar cuatro ejemplares, de los cuales uno va a la Biblioteca Nacional, el otro al Archivo General de la Nación, a la Cámara Argentina del Libro y el último a la Biblioteca del Congreso de la Cámara de Diputados y Senadores de la Nación.

¿Y quién los vende? Dentro de la industria del libro, se pueden suscitar diferentes problemas. No solamente la edición es grave, sino que también la venta. En Santiago del Estero, no hay quien se encargue de recibir y comercializar los libros de autores locales. "Los autores santiagueños tenemos que peregrinar a las librerías, les entregamos los ejemplares y ellos se quedan con el 30%, y luego hay que andar cobrando", expresó la autora santiagueña María Mercedes Tenti. Sin embargo, la autora rescata el caso particular de una librería santiagueña. "Hiperión es la única librería que me recibe los libros y me paga, es decir tiene un respeto por el autor muy importante que me parece fundamental destacarlo".

Vida finita El libro es un producto que tiene un p e r i o d o de v i d a determinado, y en algún momento pierde parte de las potencialidades que lo caracterizan como "nuevo". Luego de un tiempo considerable de estar a la venta, el libro comienza a perder color, en c u a n t o a su i m p r e s i ó n y encuademación; comienzan a deteriorarse, las hojas se tornan amarillas, y se debe rematar el ejemplar. "Llega un momento en que hay que poner el libro en oferta porque se avejenta; entonces se liquida el ejemplar, y en ultima instancia se lo termina regalando", comentó la autora María Mercedes Tenti. Hoy en día, debido no sólo a la situación económica, sino a una aparente falta de compromiso con la propia cultura, el libro se ha convertido en un bien poco requerido y consumido por los santiagueños. Quienes no tienen el hábito de adquirirlos, "están acostumbrados a que les regalen los ejemplares, no hay cultura de comprar los libros", concluyó Mercedes Tenti. Sin lugar a dudas, la industria del libro en Santiago del Estero va perdiendo camino, ya que ni sus pobladores toman conciencia de lo que vale y significa, finalmente, para su cultura el consumir una obra de producción local.

Lo que en Santiago falta: «Generar espacios de presentación de ftbros, no a un grupo selecto sino tratar de Hegaraotros lugares. •Que las Universidades puedan distribuir ios ejemplares por diferentes partes del país. •La ausencia de personas que se ocupen de la comercialización, porque el autor no puede hacerlo todo •En la Feria del libro en Bs. As., que Santiago logre tener un stand propio para presentar sus producciones.{no un stand colectivo, stand de las provincias) •Utilizar la Casa de Santiago para difundir las producciones de Santiago.

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