Conceptos urbanos e históricos de Antofagasta, la ciudad adversa

June 1, 2017 | Autor: C. Galeno-Ibaceta | Categoria: Urban History, Architectural History, Citizenship
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CONCEPTOS URBANOS E HISTÓRICOS DE A. ~TO FAC.A STA , LA C IUDAD AD\ ERSA Claud1o Galeno-lbaceta Arquuecro UCN, Mastery Doctor en Teorla e H!Stona ele la Arqu lectura UPC, Académ co

ele la Escue a ele Arqu recruray Maglster en Arqu lectura -Un vers d.Jd Cató! ca del Norte, mren bro ele Docomomo y de la Asoctacrón /beroamertcana ele Hrsrona Urbana.

GENÉRICO Y SINGULAR En la última década del siglo XX, el arqurtecto Rem Koolhaas publicó un escrito crítico titulado "La ciudad genénca" (Koolhaas, 1995), donde analizaba, con crerta res•gnacrón, caractedstrcas de las grandes urbes contemporáneas, entre las cuales podríamos mencionar: crisis de rdent1dad, atraccrones en la penferia, pérdrda de la hrstona, hegemonfa caprtalista, desaparición de la vida pública, jerarquización del vehículo y carretera, ausencia de reglas, conformaciÓn multirrac1al, migracrones permanentes, domrnio y drstnbu· crón azarosa del rascacielos, permrsrvrdad poUtica, laboratorio sociológrco de comunrdades. Srn embargo, a pesar de que Antofagasta sea más bren una c1udad intermedia y en desarrollo, vanas de estas caracterfsticas co1nciden con su realidad, An·

tofagasta no es genénca, de hecho es extremadamente srngular. Los patrones corncrden porque son generalrdades Inherentes a toda aglomeración urbana

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MAS

que ha tenido un desarrollo acelerado, lo que ha desencadenado crisis propias

"(...) la superñcie se halla cubierta en parte de arena i en parte de

de lo urbano. El antropólogo urbano Ariel Gravano ha subrayado que en la

una tierra rojiza que cubre grandes manchones de conchas recien-

conformación de lo urbano está implícito el "sentido de conflicto permanen-

tes i en parte de un sinnúmero de fragmentos pequeños, angulosos,

te" de la realidad de lo existente en consonancia con la necesidad del orden,

productos de la descomposición de las rocas plutónicas o porfídicas

de la formación social del cosmos. Dice:

por los cambios atmosféricos." (Darwin, 1906: 218)

"Por eso, la principal contradicción inherente a lo urbano consiste

El historiador, Adolfo Contador, entregó una descripción que sintetiza clara-

en esa existencia (el caos) y esa tendencia (el cosmos). Y el principal

mente los aspectos geográñcos del espacio donde se formó la urbe: "(...) una

desafío de todo gobierno de lo urbano se establece en esa tensión

planicie rocosa de abrasión marina de 40 metros de espesor y un ancho cer-

entre el dejar hacer a la correlación de fuerzas dominantes (merca-

cano a los 3.000 metros, entre el borde costero y los cerros de la Cordillera

do de bienes, de transacciones políticas, de flujos de poder local-

de la Costa y que se comunicaba estratégicamente en el extenso desrerto o

institucional) o el planeamiento y la acción preventiva integral."

Pampa Central y los pequeños valles de la precordillera a través de la quebra-

(Gravano, 2013: 11-12)

da de La Negra o Carrizo por el Sur y la quebrada del Salar del Carmen por el

Si bien, podríamos decir que la ciudad genérica no existe, y más bien que cada

Norte" (Contador, 1982: 3-4).

ciudad es única, hay ciertos temas evidentes que cruzan gran parte de las cru-

Antofagasta fue levantada en el desierto costero de Atacama a partir de 1866,

dades, ciertas nociones de sobrevivencia del asentamiento, en el caso latino-

su emplazamiento fue elegido por su proximidad a los minerales y porque hab(a

americano heredados de la Leyes de India, y recomendados desde Vitruvio,

una pequeña ensenada que permitió construir algunos muelles para el embar-

como son la adecuada elección del sitro donde emplazar la ciudad y la arqui-

que y desembarque de materiales y personas. La elección no fue por su cer-

tectura, que surge desde la cercanía a las fuentes de agua. En ese princrpío

canía a fuentes de agua o a terrenos agrícolas, como recomendaban las Leyes

fundacional, no genérico, y que plpntea desde un inicio un conflicto perma-

de India, que aún eran influyentes a mediados del srglo XIX. Sin embargo, eso

nente, es que podemos detectar una de las principales particularidades de la

pudo haber influido en la forma urbana del da mero, pero no en las sugerencias

ciudad: asentarse en la adversidad.

generales de las virtudes que deberían tener el sitio elegido para fundar, por ejemplo la fundamental cercanía con fuentes de agua, de campos fértiles y de

ADVERSIDAD Y ARTIFICIO Antes que hubiesen ciudades, y en el inicio de ellas, por la costa pasaron los barcos de exploradores, piratas y naturalistas. Darwin en 1835 fue uno de los primeros en describir geológicamente los agrestes parajes donde fue levanta-

fuentes de materia prima para levantar la ciudad (España, 1841, 105-106). Esa decisión fundacional la pone inmediatamente en una situación paradójica, que fue posible solo por la confluencia de todo el artiñcio tecnológico de la Revolución Industrial. Antofagasta es deñnitivamente un artiñcio.

da Antofagasta: Una eV1denc1a de su v gene a, es el hecho que la qu nta ed eón de la "Recop1lac ón de las leyes de los Remos de las lnd ils" hilya s1do publ cada cas1 a med~ados del s glo XIX, en 1841.

Trerra Nueva ro1s

Trerra Nueva 2015

El filósofo G1llo Dorfles en 1968 abordó la 1dea de art1ficio a part1r de una

lerado crecimiento, y umbral de mrgrac1ones desde d1versas partes del mundo

frase de Hegel: "el hombre se duplica'', en cuanto que el ser humano produce

(Galeno et al., 2014). En el caso del desierto de Atacama, formar asentamien-

nuevas realidades:

tos en ambientes adversos que no sean oasis, es un art1ficio donde todo habi-

"(...) el hombre se duplica, en cuanto existe de por s( como ob¡eto

tante es, en alguna d1mens1ón, un mm1grante.

natural, pero ex1ste también en cuanto logra crear a su vez otros ob¡etos, que no son necesariamente objetos artísticos, pero que son

RURALIDAD E HINTERLAND

transformaciones de la naturaleza: "entidades", pues que no existen en estado natural, s1no que son "objetualizaciones" de algo." (Dor-

En la actualidad, las ideas sobre la ciudad están más vigentes que nunca. Los estudios sobre poblaciones hechos por Nac1ones Unidas detectaron que el

fles, 1972: 13)

año 2007 fue un importante punto de articulación, ese año por primera vez la Para Dorfles el artificio tamb1én es naturaleza, ya que aclara que significa "he-

poblaCIÓn de las ciudades sobrepasó a la población de áreas rurales. En base a

cho ficticiamente con arte", "a costa de deformar la naturaleza y realidad"

esas investigaciones han elaborado proyecciones:

(Dorfles, 1972: 16): "El proceso de urbanizaciÓn global ha avanzado rápidamente du"Todo nuestro habitat usual, nuestro enwonment (al menos en los

rante las últimas seis décadas. En 1950, más de dos tercios (70 por

pa(ses de mayor mdustrialización, pero antes de lo que se piensa

c1ento) de las personas en todo el mundo v1vlan en asentamientos

tamb1én en aquellos todav(a "salvajes"), está transformado ya por el

rurales y menos de un terc1o (30 por ciento) en los asentamientos

adven1m1ento de la máqu1na y por su entrometím1ento en la ed1lic1a,

urbanos. En 2014, 54 por c1ento de la población mundial era urba-

en la señalética, en la producción de objetos índustnales, de med1os

na. Se espera que la urban1zac1ón mund1al continuará, por lo que en

de transporte, etc. Esta transformación -aparte de los inmensos be-

2050, el mundo será un terc10 rural (34 por ciento) y dos terc1os

neficios materiales que ha aportado a la humanidad- constituye una

urbana (66 por c1ento), más o menos a la inversa de la distribuc1ón

total d1vers1ficaCJÓn en las condiciones de equ1l1brio entre hombre y

de la población rural-urbana global de la mitad del siglo ve1nte."

naturaleza. Del restablecimiento de ese eqUJlibno depende, en mi

(United Nations, 2015: 7)

opmión, buena parte de la posibilidad de recuperar muchas condiciones existenciales y creativas, hoy en d(a modificadas, coartadas o exaltadas, y de las cuales el ambiente arquitectónico y urbaníst1co constituye un ind.cio sensible." (Dorfles, 1972, 16-17)

El Centro Latinoamericano y Canbeño de Demografía (CELADE) de la CEPAL, entrega otras c1fras especificas sobre la poblac1Ón urbana para Latinoamérica: 1950: 42,2 ~; 1960: 49,2 %; 1970: 56,6 %; 1980: 65,3 "..,; 1990: 70,8

%; 2000: 75,6 °o; 2010: 78,7 %. (CELADE, 2013). La ciudad de Antofagasta, reúne una serie de características que la singularizan, por un lado la artificialidad de su formación, en el sentido de una ciudad que surge donde no están dadas las cond1ciones para la v1da, y por otro su ace-

T.erra Nueva 2015

Los números alarmantes de las Naciones Unidas y de la CEPAL, paradójicamente no coinciden con la s1ngulandad de Antofagasta, que, como indican los cen-

T1erra N eva 2015

sos, toda su v1da ha sido más urbana que ruraL En 1907, el censo md1caba que

tantes costeros, los camanchacos (Cruz y Llagostera, 2011). Son sectores que

hab(an 38.829 habrtantes urbanos, frente a 9.065 de población rural; en 1930,

la Ciudad debe preservar y establecer un mayor v(nculo, ya que representan

la poblac1ón urbana era de 53.591, mientras que la población rural descendió

justamente lo contrario a la c1udad adversa. En el pasado las familias antofa·

a 979 hab1tantes. Por otro lado en el Departamento de Antofagasta (que m·

gastinas, los fines de semana hacía paseos a La Ch1mba, en la actual1dad el

clu(a vanos asentamientos hasta la precord llera), en 1895, la población urbana

monumental vertedero urbano tienen acorralado el acceso al área.

era de 17.720, mientras que rural eran 3.958; en 1907, 42.993 eran urbanos, y 26.976 eran rurales; en 1920, 63.408 eran urbanos y 57.599 eran rurales.

La dramática presencia de la naturaleza, sea esta agreste, es una cond1ción melud1ble de esta Ciudad adversa. Por otro lado tamb1én está esta naturale·

En la advers1dad de Antofagasta no hay una ruralidad tradicional, si pensamos

za artlficializada en los jard1nes, en los parques, en las quintas. La ciudad ha

en una extensión agrkola. En la costa del desierto de Atacama, lo rural seria

necesitado lo agrkola, por un lado como producción de subsistencia, pero

los a1slados y tecnológ1cos campamentos m1neros, o los espacios donde se

tamb1én por una voluntad de configuración de una c1erta ruralldad. Ev1denc1a

relacronaban ensenadas con las escasas vertientes de agua lo que permitió

de ello, fueron las iniciales qu~ntas, situadas en un pnncipio en el entorno de

in1c1almente el asentamiento mdígena de los camanchacos y luego la caleta de

la v(a del Ferrocarril, luego extend1das hacia el Parque Bras1l, más tarde re·

pescadores. Algunos de esos espacios eran ecos1stemas úmcos en el des1erto

constru1das como un plan de CORFO en el área norte cercana a la quebrada

como las reservas naturales de Cerro Moreno, La Ch1mba y Paposo.

de La Chimba, y luego en la plataforma de la Cov1efi. En todas sus vers1ones,

El biólogo y urbamsta Patnck Geddes en "C.ties m Evolution" de 1915, suger(a, a propós1to de los profundos cambios que se hab(an producido por la Revolu· ción Industrial, que frente a la miserable vida de la ciudad industrial, recuperar la relación entre campo y c1udad. Si b1en, Antofagasta co1nc1de con la idea de

han sido s1tio de producción, pero tamb1én del deseo de estar en lo verde, las áreas de cult1vo hicieron más amable y contnbuyeron al imagmano nostálgiCo del espac1o natal, del imagmano precedente, de la nostalg1a del ongen y de configuración del imaginario colectivo.

c1udad mdustnal, la reiv1nd1cac1Ón de la ruralidad no tiene cab1da en Antofa· gasta, donde el entorno d1recto es por un lado la magnificencia de un des1erto

EDIFICIOS TERRITORIALES

montañoso y por otro la vastedad del Océano Padfico, y su hmterland es más b1en de asentam1entos mmeros en amb1entes adversos, escasas caletas pes·

La h1stona de Ciertas ciudades en amb entes adversos se ha v1sto orgamzada a partir de la configuración de sus bordes, como med1adores entre lo que está

queras y algunos balnearios.

afuera y la vida urbana que está dentro. En la modernidad antofagastina, en Por otro lado, la c1udad posee un hinterland de ecos1stemas: Reserva Nac1onal

d1versos momentos se construyeron grandes ed1fic1os que med aban entre la

La Chtmba y el Parque Nac1onal Morro Moreno, que s1endo zonas proteg1das

c1udad y su entorno. Hay que tomar en cuenta que el afuera de esta c1udad

en la actualidad están poco conservadas. Son áreas donde debido a la presen·

costera, era por un lado la ánda Cordillera de la Costa y por otro la Inmensidad

c1a de aguas, por vertientes y por la meblas, se ha desarrollado vegetaciÓn y

del Océano Padfico. Estas grandes construcciones, configuraron bordes que

fauna, y en su entorno hay muchos s1t1os arqueológ1cos de los pnm1bvos hab1·

operaban art1culando el espac1o urbano con mar o desrerto. El pnmer e1emplo

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fue el establec1m1ento de Playa Blanca (actual Ruinas de Huanchaca), que dra·

la ciudad y separó vías tipos de c1rculac1ón. Sm embargo, los emplazamien·

máticamente conectó los estratos geográficos del sur de la c1udad; en época

tos y operatorias urbanas de estos ed1fic1os, pueden ser comprendidos desde

moderna, s1gu1eron los Colectivos de la Caja de Seguro Obrero, que med1a ·

las ideas de Kevin Lynch, principalmente con la idea de borde, como "límite

ban entre el centro h1stórico y la nueva poza det puerto art1nc1al; el ed1fie1o

entre dos fases", construcc1ones "que separan una región de otra o bien pue·

de la Escuela de Salitres (actual Universidad Antofagasta, sede Angamos) que

den ser suturas, líneas según las cuales se relac1onan y unen dos reg1ones",

contenfa la extensión del espacio del antiguo Sporting Club; el Hotel Antofa·

definiendo arquitectura que son "elementos fronterizos''. (Lynch, 2008: 62;

gasta que reunió y elevó la vida urbana del centro con la extens1ón de la bahfa;

Galeno, 2014: 64)

el ed1ficio Huanchaca (Curvo) y luego en Caliche, que contuvieron el nuevo conjunto hab1tacional Gran Vía y los cobijaron del desierto; y contemporánea· mente la operación retornó sobre Huanchaca, con el ed1ncio que alberga el

HORROR VACUI Y SISTEMA DE ESPACIOS PÚBLICOS

Casino Enjoy y el Hotel del Desierto que se sitúa en un borde de los terrenos

El horror vacui es un concepto que trata de intranquilidad que producen los

de las ruinas y contiene el espacio patrimonial, articulando la relación urbana

espacios vados en nuestras ciudades, y la 1mperiosa necesidad de llenarlos.

de ese lugar con la vastedad del océano.

No se trata de terrenos baldíos, s1no de los espac1os libres que se han dejado

Los colect1vos fueron edificios destacados en su tiempo por el programa de viv1enda que había por detrás. El investigador Francis Violich, en su libro "C.· ties oflatin America", sobre la Caja de Seguro Obrero dijo:

en la urbe, con el fin de que se produzcan act1vidades esporádicas de los ciu· dadanos. Muchos de esos espacios son espacios públicos, como un parque, una plaza mayor, una plaza de barrio, un paseo, un jardfn, s1tios diseñados para que se produzca la vida pública, un paseo fam1liar, n1ños jugando con una pe·

"(...) Cerca de 1900 unidades de habitación han sido constru1das

lota, personas reposando en el prado, otras mirando la vida pasar desde un

desde 1935 por la Caja. Los proyectos son usualmente casas alinea·

escaño, etc. El horror vacui provoca que c1ertas personas vean esos espacios

das o colectivos, y, por lo general, están bien plantncadas. Cuatro

vacíos como una oportunidad de llenarlos, y con eso acabar con la continuidad

colectivos d1señados para las calurosas reg1ones del norte, fueron

democrática de lo público. El vado se ve como algo mútil, sm uso, no como

construidos en Antofagasta, Arica,lquique y Tocop1lla. Eran un poco

algo que está hecho para su uso espontáneo, y transitono. El horror vacui pro·

gruesos en diseño; de hecho, el que pude visitar en Antofagasta era

duce un terror del vado y afecta en gran medida a la administración pública e

lejos el grupo de ed ficios más moderno en el pueblo, la marav1lla

mstituciones, quienes ven en esos s1tios la oportunidad de ocuparlos con algo,

para todos los que venían a verlos. ( ...)" (Viollch, 1944: 139-140)

acabando con la vida pública . No se trata de que no puedan haber monumen·

Edificios como el Huanchaca y Caliche, diseñados por Ricardo Pulgar San Mar·

tos en lo público, lo que produce el horror vacui no es una necesidad de orde·

tín, son herederos del pensamiento de Le Corbusier y Ludwig Hilberseimer. El

nar y jerarquizar las ciudad, s1no que necesita imperiosamente llenar el centro

primero fue muy influyente con las ciudades ¡ardín verticales que propuso para

de todo y convertir lo que queda del espacio públ1co en su periferia. El horror

ciudades como R1o de ¡aneiro (1929) y Argel (1930), el segundo estrat1ficó

vacui centraliza y oprime, se aleja de toda modestia y respeto al ciudadano.

Tierra N ueva 201 s

TierTa N ueva

1s

El espac1o público debe ser plural y v1tal, debe ser un sistema. Su energfa viene de su ocupac1ón, de sus usos. Su pluralidad viene de la oportunidad de superponer capas, de abrirse a lo espontáneo y efímero. De ofrecer alternat1vas que devienen y son estimuladas por su multiplicidad y vinculaciones. Las c1udades deben tener s1stemas de espacios públicos, plazas que suceden a plazas, que

Los sistemas necesitan articulaciones. La arquitectura y el espacio urbano cobra mayor potencia en los espac1os que articulan. Allf se producen los cambios de escala, de usos, y son potentes ámb1tos de v1da urbana. Como ha mantfestado el arquitecto Rolando Meneses en una entrev1sta, una articulación del espacio es una convergencia de aberturas del espacio.

dan paso a parques, que continúan en paseos, que se abren en plazuelas o en

Esas articulac•ones son parte de la continuidad y reunión de la ciu-

atrios, que se conectan a ¡ard1nes, que se conectan a canchas, que se elevan

dad. lan Gehl, ha man1festado que la ciudad es un lugar de encuen-

en miradores, que s1guen en playas. Los espacios públicos son s1stemas di-

tro. Los espacios entre ed•ñcios perm1ten un smfín de actividades:

námicos cuyo uso y movilidad se puede dar de variadas formas. En una v1s1ta

"caminatas de un lugar a otro, paseos, paradas cortas, otras más

a Antofagasta el año 1997, el arqu•tecto Paulo Mendes da Rocha, d•jo que

largas, mirar vidneras, conversaciones y encuentros, ejercicios, bai-

el espado público era un ámb1to que permitfa una multiplicidad de opciones

les, actividades recreativas, mtercambio y comercio, se ven juegos,

de desplazamiento y ocupación. Una libertad de ocupación, que perm1te al

espectáculos callejeros y hasta mend1gos." (Gehl, 2014: 19)

c•udadano real• zar lo mismo de vanas formas. Y podrfamos agregar que en el uso Asf como en la arquitectura, en el urbanismo es el cuerpo, el ser humano la

permitida el anonimato en lo público.

mónada, la unidad básica que exige al d1seño. Acertadamente Gehl, revindica

El arquitecto losep Marfa Montaner, en su libro "Sistemas arqu1tectómcos

la d1mensión humana en el d1seño de la c1udad, que hayan oportunidades para

contemporáneos", se refiere a la relación de la vida urbana con los Sistemas

caminar, cuando se promueve una v1da a pie, y dice:

de redes y nodos:

"Caminar es el punto de part1da de todo. El hombre fue creado para

"(...) La oudad, como creación humana, es un cúmulo de redes en-

cammar, y todos los sucesos de la vida nos ocurren m1entras Circu-

fraestructurales superpuestas: abastec1m1ento de agua y energfa, sa-

lamos entre nuestros seme1antes. La v1da, en toda su diversidad y

neamiento, telecomunicaciones y circulación. Todo terntono metro-

esplendor, se muestra ante nosotros, cuando estamos a pie." (Gehl,

politano está configurado por diversas redes artificiales cada vez más

2014: 19)

poderosas que han ido destrozando, d1vidiendo e 1nsularizando los pnmigen1os s1stemas y redes ecológicas. Hablar de redes, s1gn1ñca hablar de nodos; sin redes no hay nodos, y v1ceversa, el nodo no puede ex1stir sin la red. El territorio se conv1erte en una red s1n centro 01 penferia; un s1stema de objetos interconectados de m•les de maneras

Finalmente, el urbanista entrega ciertos principios. Las distancias entre serviCIOS debieran ser cam•nables; debe haber versatilidad urbana y seguridad; diseño para el peatón y el ciclista; reunir edificios y dudad para ampliar ámbitos; incentivar la permanencia en lo público (Gehl, 2014: 232). Además agrega:

d1stmtas. Las redes existen en abstracto y pueden generar realidades

"La seguridad, la confianza, el fortalec1m1ento de los lazos sociales,

matenales e mmatenates. Y los nodos consisten en núcleos de alta

la democracia y la l1bre expresión son conceptos clave a la hora de

dens1dad como los intercambiadores. (.•.)" (Montaner, 2014: 201)

T1erTS Nueva

s

TierTB Nueva 201

.....

tratar de descnbtr qué tipo de ideales están atados a esta idea de la

Por otro lado, respecto de la salubndad de la forma urbana, el área industrial

ctudad como lugar de encuentro. 1 La vida en el espacio urbano lo

de la Compañ(a Melbourne Clark (luego Compañ(a de Salitres) se ubic6 co·

abarca todo: desde un intercambio de miradas a pasar hasta las gran·

rrectamente a sotavento respecto del casco urbano (por lo menos para el

des manifestaciones. Caminar a través del espacio público puede

viento dtumo). Más tarde, el Establectmtento Industrial de Playa Blanca (ac·

ser un objettvo en si mismo, pero es también el com1enzo de algo

tuales Ruinas de Huanchaca) fue mal emplazado al sur·suroeste de la ciudad

nuevo." (Gehl, 2014: 29)

y cuando empezó a producir en 1883 su chtmenea contaminaba afectando la salud de trabajadores y de los espacios en sus tnmed1ac1ones, como el Cuartel

SALUBRIDAD Y FORMA URBANA Salubridad e h1g1ene son los grandes temas que introdujeron las reformas ur· banas a partir del siglo XIX, la más influyente fue la de París, dtngída por el Barón Haussmann entre 1852 y 1870, que, entre varias operaciones, higienizó el espacio urbano medtante la construcción del alcantarillado y abriendo un sistema de grandes avenidas conocidas como bulevares que permitieron ven· titar y asolear la ciudad.

de 7° de Infantería y la Escuela Mtxta, por lo que la Mun1c1paltdad encargó estudios médicos y de ingeniería para que se solucionase el conflicto (Ahumada, 1999: 60·61). El emplazamiento del puerto de Antofagasta, después de varias propuestas realizadas desde 1905, se definió en base a un proyecto de 1913, posiblemen· te realizado por el ingen1ero ftalo·árabe Abd·El·Kader (Archivo Biblioteca UCN). El puerto era fundamental para mejorar el tráfico de carga, pero además se utilizaba para el flujo de pasa1eros y el abrigo de naves. Con el tiempo

Coincidentemente, Antofagasta se funda (1868) en el contexto de esas dtfun·

el transporte mar(timo de pasajeros fue decayendo con respecto al ferrocarril

didas e mfluyentes operac1ones urbanas. Ycomo declara Arce en sus Narracto·

y al transporte aéreo, con lo que el área portuana se volcó princ1palmente a

nes, en el com1té que deltneó la estructura urbana de la ciudad estaba elmge·

lo industrial. Poca preocupacrón hubo en la época por la contam1nactón que

n1ero bntámco George Htcks, que sugiri6 el ancho de 20 varas (16,71 metros)

se podr(a producir por el puerto junto al centro. El embarque de salitre en

para las calles (Arce, 1997: 86). Fue una buena medida para la circulación pero

sacos o briquetas decayó y d10 paso a los cátodos de cobre. Pero más tarde el

tambtén mclufa otros beneficios como la seguridad, ya que la mayor dtstancta

recinto se us6 para el transporte de mmerates a granel, por ejemplo plomo,

entre manzanas colaboró a la prevención de incendios, así como la santdad, ya

sin haber construido silos, los que se sumó a la contaminación de los motores

que las v(as d1agonales suroeste-noreste coincidían con el viento predominan·

de las naves, y en la actualidad con el embarque de distintos otros minerales

te que durante el dfa ingresaba desde el mar por el suroeste, de modo que las

en polvo entre ellos concentrado de cobre. La c1udad se densificó y el área

calles vent1laban el espacio urbano. Además la manzana rotada es la me1or dts·

portuaria quedó junto a viviendas, establecimientos educacionales y de salud,

posición de forma que todas las fachadas estén expuestas en algún momento

y a barlovento de todo el casco central urbano.

a la radtación. Más tarde la arquitectura racionalista indagó sobre esos temas, pnncipalmente de la mano del arquitecto Walter Gropius, y de su conocido escnto de 1930: ''¿ConstrucciÓn baja, media y alta?". (Gropius, 1994)

Tierra Nueva 2015

Curiosamente, una vez más, los criterios más básicos de organizactón de la vida urbana moderna siguen váltdos, por un lado no s1tuar las áreas industriales a barlovento de la estructura urbana, por otro que la forma urbana esté diseña·

Tterra Nueva

da de forma a venblar y asolear calles y manzanas de la ciudad. ¿Cuantas nue-

adaptados a los nuevos tiempos, frente a la obsolescencia de los usos, replan-

vas urbanrzaciones de la especulaci6n mmob1liaria contemporánea reflexionan

tar nuevas acbvrdades. Respecto de eso, Argan rnd1ca:

sobre la onentaci6n y anchos de calles y manzanas? ¿Cuantos nuevos con-

"Para revitalizar los centros hist6ncos, por lo tanto, no se puede con-

juntos o edilicios se han diseñado pensando en el impacto de su altura en el

tar s6lo con las posib1lidades técnrcas de restauraci6n; si la reanima-

ambiente urbano? (Palme y Guerra, 2013)

ci6n debe traducirse en una refuncional•zao6n orgánica, es claro que la intervenci6n de los técnicos del patrimonro cultural es necesana

IMAGEN URBANA, MEMORIA Y ADMINISTRACIÓN

desde la primera fase de estudio del proyecto y que es intervenc16n no deberá limitarse a los centros hist6ncos propiamente dichos sino

Antofagasta el año 2016 cumple ISO años de su pnmer poblamiento. Sus pri-

que tendrá que extenderse a toda la c1udad, en cuanto influye sobre

meros años fueron en el auge de la globalizante Revoluci6n Industrial con

el centro hist6rico y lo condiciona.(...)" (Arfan, 1984: 79-80)

una creccente intensidad edecticista, luego vinieron los años expenmentales del art dec6 y de una s6l1da arquitectura del Movim1ento Moderno, la pos-

La protecci6n de patrimonio cultural, pasa por la acci6n de variados espe-

modernrdad fue un proyecto que culmin6 en un regionalismo almeado con

Cialistas, entre ellas el rol de la historia es clave en la d1fus16n de las piezas,

la búsqueda de una arqu1tectura latmoamericana que ha perdurado hasta la

la crudadanía no puede querer aquello que no conoce. Los datos técnicos,

contemporaneidad. A pesar de su corta v1da, su v1talidad econ6m1ca ha legado

sociol6gicos y empíncos de las obras son fundamentales para reconocerse en

obras de mucho interés y ha concentrado un gran número de ejemplares de ar-

la ciudad, para que la urbe se haga propia, que sus secretos sean revelados,

quitectura significatiVa que deben ser conservados porque son la memona de

compartidos hasta convertirlos en m1tos de la historia urbana. La construcc16n

la c1udad y reflejan el gran empuje de sus ciudadanos y del Estado en constituir

del pensamiento VISIVO reúne los aspectos h1st6ncos con las IConografías. Los

imagen urbana en una s1tuaci6n adversa.

Inventarios del patnmonio operan sobre la memoria colectiva en cuanto se

Giulio Carlo Argan en su libro "Histona del arte como h1stona de la ciudad", reivmd1ca la preservac16n, y reflexiona respecto de la criticada c1udad-museo. La planlficaci6n de la urbe sería "un proyecto de orden y adaptac•6n de lo

comparte, se exponen, se dan a conocer, la investigac16n no tiene sent1do SI

no se expone, solo de esa forma la conservaci6n adqu•ere una perspectiva

orgánica donde la colectividad hace suya la memoria del espac1o urbano.

ya existente y de una prev1si6n de futuros desarrollos". El museo no seda un

Respecto de la catalogaci6n del patrimonio, Argan es contrario a la idea de

dep6sito o as1lo de obras, smo "un mstrumento c1entffico o d1dáct1co para la

definrr drculos cerrados de obras que debieran ser de interés:

formac16n de una cultura figurativa o de los que Rudolph Arnheim llama 'pen· samiento visivo'", "el museo como centro vivo de la cultura vis1va, es un com· ponente actrvo del estudio y del desarrollo de la ciudad". (Argan, 1984: 80)

"He ofdo repetir muchas veces y, s1n duda es cierto, que es mdispensable disponer de una catalogaci6n de los bienes, realizada a partir de una idea, defin•da ¡uríd1camente, de bien culturaL Considero m-

Sobre la VJtalrdad del patnmonio en la c1udad es fundamental que esa arqur-

dtspensable una catalogao6n etentíñca y su contmuada puesta al

tectura tenga uso, nunca congelarla y museificarla. Los edific1os deben ser

día, pero cons1dero extremadamente peligroso la defmici6n a prion

Tierra Nueva 2015

Terra Nueva

de listas de cosas que hay que proteger, con la

1mpHe~ta

adm1s1ón

métodos, de antiguas disposiciones que ya no son legales, de viejas

de que todo lo que no está en esas listas, no merece ser protegido.

modalidades financ1eras y vie1as act1tudes soc1ales, como si fueran

( ...)" (Argan, 1984: 82)

los únicos elementos que pueden acond1cionar un desarrollo futuro, e ignorando que el incalculable elemento que debe prevalecer

PLANIFICACIÓN Y PARTICIPACIÓN En noviembre de 1939, el cultís1mo losé Papíc Radnic, escrib1ó un artkulo para El Mercurio de Antofagasta titulado "¿Y el urbanismo... ?. Allí declaraba que su reflex•ón estaba motivada por la lectura de la primera ed1ción (1938) del libro "The culture of c1t1es" (La cultura de las ciudades) del urbanista ysociólogo Lewis Mumford (cuyas ideas fueron muy influenciadas por Geddes). Papic identifica una serie de puntos que una planificación contemporánea debiera abordar: "(...) se nos ha puesto de manifiesto lo precario de nuestros sentimientos, de nuestra preparación para interpretar las medidas cientincas ya adoptadas en varios países, incluido el nuestro, destinadas a asegurar la h1g1ene, la estética de la edificación, las fac1lidades de comunicaciÓn y de tráns1to y la habilitación de espacios libres y de áreas verdes, tan necesarios en el ritmo de la v1da actual, para el crec1m1ento y el desarrollo fís1co, moral e intelectual de todos los habitantes." (Pap1c, 1939: 3) Es importante que, frente a la anarqu(a urbana, él destaca: la h1giene, la Imagen urbana, la mov1lidad, espacios públicos (ocio y vegetación). A pesar de

en todo esquema urbano o reg•onal no es solo lo que el hombre tiene o esta acostumbrado a tener sino que lo que el hombre necesita y esta destinado a neces1tar." Por otro lado, expone y estimula la creación de planificaciones, que bogan por la imagen y la racionalidad urbana, planes que además han sido adoptados por el mismo Estado: "Afortunadamente en Chile el Gobierno se ha preocupado de la necesidad imperiosa de crear planes reguladores, considerando que es un axioma de la c1encia urbanística el que las ciudades no deben desarrollarse al azar, obedeciendo sólo a estímulos que provienen de circunstancias o conveniencias del momento, ya que el desarrollo de la vida urbana debe obedecer a normas pre-fi1adas y a un plan de conjunto evitando as( alarmantes improvisaciones que cuentan dolorosos sacrific1os pecumanos, sin conseguir muchas veces, el anhelado efecto estético y utilitario." Papic, informa sobre el desarrollo de normas urbanas que se han dictado desde 1929, y de la necesidad de Antofagasta de contar con una regulación:

que Antofagasta ha tenido d1versas planificaciones, mediadas por ingenieros

"Y el Gobierno de Chile, con fecha 14 de enero de "930, diCtó una

y arquitectos, hasta su pnmer plan regulador efectuado a partir de 1956 y ter-

Ley n° 4563 que aprueba una Ordenanza General de Construccio-

minado en 1965, él, en 1939, indicaba que los planes urbanos de la c1udad

nes y Urbanización; ordenanza que en sus disposiciones relativas a

estaban estancados conservando antiguos principios obsoletos:

la urbanización establece que todas las municipalidades, de toda

"La mayor(a de nuestros planes urbanos permanecen estac1onados conservando la rutina de otras épocas, la rutma técnica de antiguos

T~erTa

Nueva 2015

ciudad superior a 20.000 habitantes, deben presentar un anteproyecto de transformaciÓn de sus respect1vas ciudades, anteproyecto que servirá de base para las Hneas de edificación y las rasantes co-

TlerTa Nueva

rrespondientes. 1 En Antofagasta no se ha elaborado d1cho antepro-

Las reivind1cacrones de Pap1c eran legftimas en cuanto la modernidad del ins-

yecto ni munic"pabdad alguna se ha preocupado de realizar un plan

trumento de plamficac16n, s1n embargo no reconoce que la ciudad se hab(a

regulador

desarrollado gracias a una serie de mstrumentos cartográficos, por lo general

S6lo ex1sten trazados de calles y manzanas que bien

podrlan cons1derdrse oficiales de la comuna y que ba¡o nmgún punto de v1sta debían de ser alterados ya que han consultado en princ1p10 las necesidades y el desarrollo primordial de la ciudad."

realizadas por mgenieros. Entre ellos, podríamos destacar, inicialmente el plan fundac1onal de ¡osé Santos Prada, de 1869, en el cual incid16 el británico George Hicks. Luego el

Hace referencia a la existenc1a de un grupo de asesores urbanos, entre los

plano de 1873 de Adolfo PalaCios, que revela el ensamblaje de ciudad y las

cuales estaba el arquitecto Campusano, y de las obras que promovi6 este

v(as férreas. El capitán de fragata Franc1sco Vida! Gormaz, luego del inicio de

grupo:

la Guerra del Pacifico, levant6 en 1880 el asentamiento, su fondo marino en "Un ef(mero Com1té de Urbanismo al cual pertenec1eron Don Alfonso Campusano, Don Ricardo Sotomayor, Don Luis Erazo, Don Mart(n Cerda, etc., Tenfa la tutela moral sobre su realrzaci6n y uno de sus proyectos de trazado fue la avenida Costanera que unirfa el nacimiento de la calle Balmaceda, junto al mar con el Balneario Mu· nic1pal. Y las observaciones y las d1recc1ones del Comrté de Urbanis· mo eran respetadas por la autondad municipal. 1 Hoy d1cho Com1té no ex1ste y se construye arb1trariamente, pasando por encima de todo principio fundamental de Urbamsmo."

torno a la poza y reg1str6 los pequeños ensanches de esos años. En 1892, el proyecto del agua potable de Roberto

1· Mannmg. En 1898 el plano del de-

sarrollo del ferrocarril y la ciudad hasta el krlometro 28, proyectado por el Departamento de lngemeros del FCAB. Los planos realizados por el mgeniero Luigi Verga Abd-El-Kader, el de hijuelaciones de 1899 y el de 1901. El proyecto para un nuevo puerto en 1905 realizado por el ingeniero holandés H. L. van Hooff. El plano de alcantanllado de 1908 que us6 el sistema umtario en zig-zag del francés Paul Wery. En 1913 dos d1seños para puertos en dos Sitios distintos, uno realizado por el ingeniero A. D Swan de Montreal sobre

La Poza, el cual se contrapone a otro d1seño más rac•onal, probablemente de

En tono de manifiesto, reivindica el valor y actualidad de la planrficaci6n ur-

Abd-El-Kader, en el borde poniente del centro, que fue el proyecto que se

bana:

ejecut6. Además en 1914, Abd-El-Kader public6 parcialmente el diseño en su "Y en la ciudad que un tie1"1po se llam6 modelo, ¿Podemos llamar

Gufa Comercial de 1914.

a esto urbanismo.. .? ¿Se han considerado las sugestiones del ur-

Siguen muchas otras planificaciones y registros cartográficos, para sintetizar,

bamsta arquitecto lt!ft de la l. Municipalidad?... ¿Se ha mteresado

podrramos destacar el plan de 1934 que muestra ensanches hacia el sector de

la autondad comunal en el desarrollo futuro de la poblaci6n ... ? 1

las actuales un1dades vecinales Salar del Carmen, Pablo Krugger, Favorece-

¡No! ... La autondad no se ocupa aún del urbanismo.- No ha tomado

dora y Gran Vía. Sin embargo, un plan de 1925, ya revelaba las intenciones de

aún contacto con el urbanismo, que según Le Corbus1er, Munford,

crecer hacia el norte luego de los patios de ferrocarril y hacia el sur luego del

Wallace, Wagner, y otros msrgnes urbamstas, es prever y preparar."

antrguo Club Hfp1co (actual Estad1o Reg1onal).

Tierra N eva

15

Tierra N eva 201

Un periodo de madurez, fueron los años cincuenta y sesenta, marcados por

ciones, la cantidad de sus exrgencias hagan necesaria la figura del

dos hrtos: el pnmer plan regulador realizado por ¡orge Poblete Grez, lulio

especialrsta, del adminrstrador de los valores culturales de la ciu-

Mardones, Sergro González y Gonzalo Mardones a partir de 1956 y oficia-

dad, pero él actúa srempre por procuración, en nombre y según la

lrzado el 30 de novrembre de 1965 (Decreto Ministerio de Obras Públicas

profunda aunque no srempre consciente y declarada rntención de

n°1614), drseñado en base a la concepción del zoning. Y el estudro pre-inver-

la ciudadanfa. Su verdadera tarea es de educador, más bien que de

sional para el "desarrollo urbano regional" de 1967-1968, que realizó un equi-

técnico, su verdadera finalidad no es crear una ciudad sino formar un

po multidrscrplrnario liderado por Emilio Duhart, luan Casanova, Helio Suarez

conjunto de personas que tengan el senbmrento de ciudad. Y dar a

y Walter Witt, un documento en dos volúmenes que determinó las directrices

este sentimiento confuso y fragmentado en miles o millones de in-

de muchas de las acciones que se fueron concretando hasta la actualidad. El

dividuos una forma, en la que cada uno pueda reconocerse a sí mis-

contexto de la ciudad moderna en la década del 60 se puede ampliar, en las

mo y a su experiencia de la vida asocrada." (Argan, 1984: 229-230)

ideas de la relacrón entre habitantes y la vitalidad de la ciudad expuestas por Lewis Mumford:

DESARROLLO ORGÁNICO "La misión ñnal de la ciudad consiste en promover la participacrón consciente del hombre en el proceso cósmico e histórico. A través

El estudio pre inversional de 1968 que el equrpo de Duhart elaboró al Minis-

de su estructura compleja y duradera, la ciudad acrecrenta enorme-

terro de Vivienda y Urbanrsmo a partir de 1967, fue el primer documento que

mente la capacrdad del hombre para interpretar estos procesos y

operó críticamente sobre la crudad y la región. A propósrto de su contem-

toma en ellos una parte actrva, formativa, de modo que cada fase

poraneidad con el plan regulador recrentemente aprobado en 1965, uno de

del drama que en ella se representa tenga, hasta el máxrmo gra-

Los antecedentes que tomaban en cuenta era el plan del equrpo de Poblete,

do posrble, la rlumrnación de la conciencia, el sello del propósrto,

sobre el cual establedan crertas cr(trcas:

el color del amor. Esa exaltación de todas las dimensiones de la

''Algunos de los proyecto considerados en el Plano Regulador son

vida, a través de la comunión emotiva, la comunrcacrón racronal, el

de indrscutible valor, como las avenrdas de Circunvalación y Cos-

domrnro tecnológrco y, por sobre todo, la representacrón dramá-

tanera, actualmente en ejecucrón, y los centros equipadores re-

tica, ha sido la funcrón suprema de la ciudad en la historia, y sigue

gionales y de barrio. Por otra parte, sin embargo, no se advierte

siendo el principal motrvo para que la ciudad continúe existrendo."

una poHtica definida de estructuración urbana ni de densidades de

(Mumford, 1966: 753)

población. El emplazamrento del área industrial es discutible, por

Respecto del rol de la planiñcación urbana frente al ciudadano, Argan dice:

cuanto ya aparece rodeada de vivrendas y con muy pocas posibilidades de expansión futura. Las viviendas situadas al norte y oriente del

"Es perfectamente comprensible que la complejidad de las situa-

sector industrial quedarán expuestas a molestias por este hecho. En

ciones urbanas actuales, la extensión y densidad de las aglomera-

todo caso los planos seccronales propuestos en el Plan Regulador

Trerra Nueva 2015

Trerra N eva

..

pueden contnbuir a la artiCulación urbana y constituyen un recurso

Se evidenciÓ en el estudto que la CORFO desarrollaría un área industrial al

eficaz en la plamficac1ón de la ciudad." (Chile, 1968 (Tomo 1): 71)

norte de La Chimba, para lo cual tenía 680 ha. Para ocupar esos sitios, entre

Duhart propuso un plan general de desarrollo urbano para formar un "hecho urbano orgánico y armón1co" que s1rva a la región. El plan fue planteado como una herram1enta dmám1ca susceptible de ser corregida en el tiempo. Podemos mencionar algunas de las operaciones planteadas, entre ellas la lineal1dad de la ciudad:

diversas operaciones, se debería trasladar a un sector extra urbano el aeródro· mo y el club de golf de La Chimba. Desde el centro hasta ese sector industrial, se propone el desarrollo de v1viendas. Por otro lado se indica la necesidad de trasladar los patios de ferrocarnl en el centro por el estrangulamiento que producen. Se sug1rió que fuesen utilizados para dens1ficar el área céntrica como lo reauzaba en ese momento la CORMU con el plan SOQUIM en los

"(...) El mar está presente a todo lo largo de la ciudad y representa

terrenos de la Anglo Lautaro, actualmente conoc1do como Villa Codelco. So-

un valor y un bien que no ha sido debidamente valonzado. Se afirma,

bre el crecimiento, ind1caban:

pues, como un criterio general de orientación, que la ciudad será mejor en la med1da que el mar tenga fácil acceso y desarrollo como área de recreo y esparc1m1ento. Igualmente, la c1udad obtendrá ven· taja y agrado al d1sfrutar de su situación sobre un plano indinado semejante a un balcón sobre el mar.(...)" (Chile (Tomo 2), 1968: 53-54)

"El crecimiento en extens1ón se concibe como proceso orgánico y ordenado a contar de las áreas más próximas al centro actual, a base de núcleos integrados de vivienda y trabajo. La extensión lineal ex1stente entre el centro antiguo y La Ch1mba obliga a dotar a los nuevos sectores de vrviendas de centros equipadores semiautónomos que los haga mdependtentes del centro urbano actual." (Chile

Por otro lado respecto de las áreas verdes y de esparcimiento, deb1do a la escasez de agua, la sugerenc1a fue que fuesen sobrias y económ1cas de agua y que se complementasen con las de la orilla del mar. Agrega: "Esta misma cons1derac1ón demuestra las ventajas de la densificac1ón urbana, en orden a racionalizar el uso del agua." (Chile (Tomo 2),1968: 54) Fue identificada la neces1dad de un puerto aux1liar que podría estar en la ca· leta de La Ch1mba, junto a una fundamental planta desalinizadora. De hecho el tema de una nueva fuente de agua, sin arsénico, es una preocupaciÓn que cruza prácticamente todo el estud1o. Habría que mencionar que desde el año

2003, en Antofagasta, está en funcionamiento una planta desalinizadora en base a la tecnología de osmosis inversa, que abastece un 60 %del consumo de la c1udad y está ub1cada junto a la caleta de La Chimba.

r~eiT8

Nueva 2015

(Tomo 2), 1968: 60) Asimismo, a pesar de que se planteaba como alternativa otro puerto en Me· jillones, que podría tener c1ertas ventajas, el informe no considera era opción como las más ind1cada, tanto por los aspectos económicos como que el destino de Mejillones era emmentemente turístico. Se plantea erradicar las vrviendas autoconstrUJdas al borde oriental del centro, al sur del cementerio hasta quebrada El Toro, y remodelar y densificar con nuevas habitaciones. Respecto de las circulaciones, se plantea el traslado de la estación de ferrocarnles hacia un sector marginal en La Ch1mba denominado población Punta Brava. Sintetizan: "(...) Es evidente, pues, que las v1viendas de mejor cal1dad y el eqUJpamtento de esparCimiento y turismo continuarán demostrando ann1dad por el Sur; el Centro deberá racionallzarse

TieiT8 Nueva 2015

y dens1ficarse; y el Norte afrontará los principales problemas de crec1m1ento y

más extensiva de toda la costa urbana, hecha acces1ble a través de

expansión." (Ch1le (Tomo 2), 1968: 56)

la avenida Costanera." (Ch1le (Tomo 2), 1968: 67)

Uno de los temas más relevantes planteado por Duhart y equipo, fue la forma· c1ón de áreas de esparc1m1ento vmculadas al turismo. La propuesta se sosten(a en el estud10 encargado a la empresa británica Transport & Tourism Techni· cians Ltd. para analizar la fact1b1lidad turística de la ciudad y su hinterland y de la región. Dedan:

Además agregaban: "Espedficamente en el rubro esparc1m1ento, la c1udad carece de facilidades adecuadas inmed1atas para satisfacer a su propia pobla· ción. Al analizar el equ1pam1ento se vio la falta de facilidades de esparcimiento, especialmente de playas adecuadas, zonas de cam·

"El modesto desarrollo actual no refleia sin embargo el potenc1al

ping, clubes de yates o pesca deportiva, etc. en general aquellas

tudstico de Antofagasta y su región. Según el informe de 'Trans·

relacionadas con la vocación marítima de la ciudad." (Ch le (Tomo

port & Tourism Technicians Ltd.' de Londres sobre Turismo en Chile

2), 1968: 68)

1967: 'La zona de Calama · Antofagasta (Zona 2) cubre una de las áreas más mteresantes desde el punto de vista arqueológico y de

SISTEMAS ORGÁNICOS

pa1sajes de des1erto e mcluye una de las mejores playas de Ch1le en Mej1llones'" (Chile (Tomo 1), 1968: SS).

El arquitecto Richard Neutra es reconocido por su arqUitectura pensada para la salud del cuerpo y por el concepto de "realismo biológico", que reivindica

Se planteó tunsmo a tres escalas: internacional, nacional y regional. Mien· tras que una de las mayores d1ficultades se identifica una vez más en el agua. Por otro lado se sug1ere un plan que debiese comprender las SigUientes

un diseño soportado en el estud1o del ser humano, desde lo fisiológico a lo psicológico. Su base del planeam1ento, desarrollada a mediados del siglo XX, está cada vez mas vigente:

etapas: l. Recolecc1ón de datos de la costa; 2. Acciones para soluc1onar deficiencias; 3. Decisiones preliminares sobre cuales ubicaciones ofrecen

"Nosotros, como mnguna otra generación anterior, poseemos los

perspect1vas estables; 4. Estud1o del estado actual de esos Sitios y de sus

conocimientos cientrficos que nos capac1tan para estudiar los equi·

capacidad de albergar centros de esparcimiento; S. Acción mmed1ata para

pos orgánicos, sensoriales y nerv1osos de los seres humanos y su

detener cualquier desfiguración de esos lugares. Además sobre la ciudad se

grado de capac1dad para absorber cualquier cosa que la maqUinaria

1ndicaban lo siguiente:

pueda imponerles. S1 la ciudad no ha de transformarse en una devoradora humana alimentada exclus1vamente desde el exterior, de-

"Propend1endo al aprovechamiento de un bien al alcance de la ciu· dad, se propone el desarrollo de playas y áreas libres en un sector de la costa comprend1do entre los baños municipales y el regimiento, as( como de una playa frente a la población Trocadero. Estas propo·

bemos concentrarnos honesta y sinceramente en el d1seño, no por razones de eficiencia técnica, producción o ganancias comerciales, sino contra las mil irritaciones y daños que ahora amenazan con ser detrimentos acumulativos superiores a todo lo soportable. La ciu-

sic1ones se consideran como provechos pilotos para la hab1htactón

líerra N eva

15

T1erra Nueva 201 5

\

dad del futuro tendrá, tal vez, que levantarse gracias a los esfuerzos

memoria y entorno, en la cual los crudadanos nos respetamos, nos recono-

de una 1unta de planeamiento dirigida por un br6logo con amplrtud

cemos e identificamos.

de crrterro. Esa ciudad será entonces un feliz y compuesto drseño para la supervrvencia." (Neutra, 1958: 39-40) Las ideas de Neutra, están presentes en las necesidades y reivindicacrones cru·

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

dadanas. Por otro lado esto nos recuerda que el alcalde modelo Maximillano Poblete era médrco. En la actualidad en Antofagasta se están abordando vanos

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. Burdett d1ce que las crudades deben ser versátiles. Saskia Sassen defiende la urbanidad (cityness) de los espacios, una suerte de carácter de la c1udad, de

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Singularidades de la vida en la urbe. Por otro lado, lan Gehl plantea una crudad

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y Patnmonio.

¿Qué Antofagasta nos merecemos? En sfntesis, podríamos decir que una

Darwin, Charles (1906). ¡eolog1a de la Aménca Mendronal (Geological Ob-

ciudad sana, caminable, única, que se acepta a si misma, que reconoce su

servations on South Ame rica Voyage of H. M. S, "Beagle "). Versi6n castellana

Tien-e Nueva

15

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T1erra Nueva 2015

Tterra Nueva 201 s

SUMARIO - - · - -·

Esta edición número 12 de Tierra Nueva contó con la colaboración especial de la Escuela de Periodismo de la Uni~ersidad Católica del

5

EDITORIAL: D1lemas éticos para los nuevos profes1onales

Norte. Antofagasta, ~eptiembrc 2015.

13

GRA:"(DES DILEMAS HICOS Y DEOI'\TOLÓGICOS DEL SIGLO

15 Ética y futuros profesionales, a raíz del informe del consejo asesor contra los conflictos de interés, el tráfico de influencias y la corrupción. Por padre /bar Astud1llo Godoy.

29 Cuando la soc1edad democrática está en crisis: El desafío planteado a las universidades católicas. Por Ignacio Sepúlveda del R(o.

47 Ética y universidades. Por Franc1sco Correa Schnake y Marcelo Correa

Schnake 67 Desafros étrcos en el penodismo de nuestros días. Por Rubén G6mez

Quezada e ls1dro Morales Casullo.

Tierra Nueva UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL NORTE ANTOFAGASTA

93 Conceptos urbanos e h1stóncos de Antofagasta, la ciudad adversa. Por Claud1o Galeno-fbaceta.

ISSN: 07 8-0845 Reprcsenunte leg•l: Rector lorge 1i b

Alva ez

Do rector: P d e ba Astud lo Godoy Subdirectora: E

~a

Te o B a h

Equopo Edotor Rubén Cómez Qu zada ls dro Moral s Cast !lo Carlos Ru z Tagle Vial

del hombre a la v1da estudiantil. Por Carlos RutZ-Tagle V1al.

147 Análisis sobre tres casos particulares: Umversidad, ética y vida social.

Por Osear Marcelo Sepúlueda.

Domo el loo leg•l: Av Angamos 0610, Antofagasta, Ch le. Doseño y Doagramacoón: M ced s l.iocol\ H , Ed eones Mensa e Impresión Ed ones e

125 Ética del estudiante: Algunas aplicaciones de los princ1pios funcionales

p

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