Diversidad biológica

July 24, 2017 | Autor: Luis Herrera Mesa | Categoria: Environmental Studies
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Universidad de Navarra

Diversidad biológica. Causas de la pérdida de diversidad y propuestas para conservar la biodiversidad

Lección inaugural del curso académico 2014/2015

Por el Prof. Dr. D. Luis Herrera Mesa Catedrático de Zoología de la Facultad de Ciencias

El sosiego, el lugar apacible, la amenidad de los campos, la serenidad de los cielos, el murmurar de las fuentes, la quietud del espíritu son grande parte para que las musas más estériles se muestren fecundas y ofrezcan partos al mundo que le colmen de maravilla y de contento. (Don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes 1547-1616)

A mi familia, a mis profesores y alumnos, a mis compañeros y amigos del Claustro Académico de la Universidad de Navarra

Procedencia de las ilustraciones

Fig. 1. Láminas 32 y 33 de Pieter Cramer & Caspar Stoll: “De uitlandsche kapellen, voorkomende in de drie waereld-deelen Asia, Africa en America”. /A Amsteldam: Chez Barthelmy Wild,1779-1782. Depositado en la Biblioteca Smithsoniana y digitalizado en abril de 2010. Imágenes disponibles en BHL: http://dx.doi.org/10.5962/bhl.title.43777. Fig. 2. Rafael (1483-1520): La Escuela de Atenas. 1509-1510. Fresco en el Palacio Apostólico Vaticano. Imagen en el dominio público en http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/9/94/Sanzio_01.jpg Fig. 3. Tommaso da Modena (1326-1379): San Alberto Magno. 1352. Fresco en la Sala Capitular del convento de San Niccolò, Treviso. Imagen en el dominio público en http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/0/08/Tommaso_da_modena%2C_ritratti_di_somenicani_%28 vescovo%29_1352_150cm%2C_treviso%2C_ex_convento_di_san_niccol%C3%B2%2C_sala_del_capitolo.jpg Fig. 4. Hendrik Hollander (1823-1884): Karl Linnaeus en traje lapón. 1853. Réplica del original en Hartenkamp. Imagen en el dominio público en http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/5/56/Carolus_Linnaeus_by_Hendrik_Hollander_1853.jp g/640px-Carolus_Linnaeus_by_Hendrik_Hollander_1853.jpg Fig. 5. Eduard Ender (1822-1883): Humboldt y Bonpland en la selva amazónica. c. 1850. BerlinBrandenburgische Akademie der Wissenschaften. Imagen en el dominio público en http://www.avhumboldt.de/wp-content/gallery/portraits/02.jpg Fig. 6: Ortóptero. Foto: Enrique Baquero (UNAV). Fig. 7. Salamandra (Salamandra salamandra) en Vizcaya, abril de 2010. Foto: Enrique Baquero (UNAV). Fig. 8. Producción acumulada de Historia Natural -publicaciones- en la Universidad de Navarra entre 1969 y 2013, por tipología. Elaboración: A.H. Ariño (UNAV). Fig. 9. Medidas para reducir el efecto de barrera. Adaptado de Iuell et al., 2005. Fig. 10. Pescas mundiales de peces marinos entre 1950 y 2012, por continente de declaración. Elaboración: A.H. Ariño (UNAV) a partir de datos descargados el 16/5/2014 de la base de datos Global Capture Production Fishery Statistical Collections de la FAO: http://www.fao.org/fishery/statistics/global-capture-production/en Fig. 11. Cangrejo rojo (Procambarus clarkii) en el río Alegría (Álava) en julio de 2010. Foto: Javier Oscoz (UNAV). Fig. 12. La Red Natura 2000 en 2013. Mapa obtenido del visor de la Agencia Europea del Medio Ambiente, Natura 2000 Network Viewer: http://natura2000.eea.europa.eu/. Fig. 13. Esquema de las figuras legales aplicadas a las áreas protegidas de España. Adaptado de EUROPARCEspaña, 2012 (http://www.redeuroparc.org/) Fig. 14. Categorías de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, 2013), versión 3.1. Adaptado de http://www.iucn.org/about/union/secretariat/offices/iucnmed/iucn_med_programme/species/red_list/ Fig. 15. Missouri Botanical Garden (BMG), St. Louis, Missouri, USA. Octubre de 2008. Foto: A.H. Ariño (UNAV). Fig. 16. Oso pardo sirio (Ursus arctos syriacus) en el parque temático Sendaviva (Arguedas, Navarra), junio de 2011. Foto: A.H. Ariño (UNAV).

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Contenido

1. Diversidad y biodiversidad……………………………………………………………………XX 2. Conocimiento de la naturaleza…………………………………………………………….. 2.1. La Edad Antigua……………………………………………………………………… 2.2. La Edad Media……………………………………………………………………… 2.3. El Renacimiento…………………………………………………………………… 2.4. La Edad Moderna………………………………………………………………… 2.5. Los siglos XIX y XX……………………………………………………………… 2.6. Fuentes para el estudio de la biodiversidad en España……………. 2.7. Fuentes para el conocimiento de la biodiversidad faunística de Navarra……………………………………………………………………………………… 3. La pérdida de biodiversidad……………………………………………………………… 3.1. Causas de la pérdida de biodiversidad…………………………………… 3.1.1. El cambio climático…………………………………………………………… 3.1.2. La contaminación ambiental……………………………………………… 3.1.3. Los cambios de uso del suelo……………………………………………… 3.1.4. La fragmentación de los ecosistemas…………………………………… 3.1.5.

Las

catástrofes

naturales

como

causa

de

extinción

de

especies…………………………………………………………………………………… 3.1.6. La extinción de especies inducida por la actividad humana: la caza furtiva y la sobreexplotación…………………………………………………….... 3.1.7. La introducción de especies exóticas……………………………………… 4. Conservación de la biodiversidad………………………………………………………… 4.1. Medidas para conservar la biodiversidad ………………………………….. 4.1.1. La declaración de áreas y espacios protegidos………………………. 4.1.2. Restauración de corredores ecológicos………………………………….. 4.1.3. Bancos de conservación de la naturaleza…………………………….. 4.1.4. Bancos de semillas y jardines botánicos……………………………… 4.1.5. Protección de especies animales en peligro de extinción 5. Reflexión final………………………………………………………………………………… Agradecimientos 6. Referencias……………………………………………………………………………………

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Excelentísimo Señor Rector Magnífico Excelentísimas autoridades Claustro Académico y Alumnos Señoras y Señores

Deseo agradecer a las autoridades académicas que me hayan designado para pronunciar esta lección de apertura de curso en un año significativo para la Universidad de Navarra, en el que comienzan sus estudios los alumnos del nuevo grado en Ciencias ambientales. Mi agradecimiento es aún mayor considerando que tengo la oportunidad de dirigirme a ustedes en este marco solemne del Aula Magna, para impartir mi última clase después de cuarenta y dos años de dedicación a nuestra alma mater. La biodiversidad y las características del medio ambiente en el que habitamos son un motivo constante de información en los medios de comunicación. Basta echar una ojeada a la hemeroteca: “La OMS ha confirmado que la contaminación del aire causa cáncer”a, “Unos 2.000 niños mueren cada día por la falta de agua”b, “Ocho de cada diez especies de animales en España son insectos. Las abejas, los animales más valiosos para la biodiversidad”c, “España atesora más del 50% de plantas silvestres europeas”d, “La catástrofe del 'Exxon Valdez' tiñó de negro más de 2.000 Km de las costas de Alaska”e, “WWF elabora cada año una lista de especies amenazadas. La degradación de su hábitat, la caza y el cambio climático son los principales peligros”f, etc. La protección de la biodiversidad es causa de preocupación de la Doctrina social de la Iglesia, «…en el contexto de los estrechos vínculos que unen entre sí los diversos ecosistemas, el valor ambiental de la biodiversidad, se ha de tratar con sentido de responsabilidad y proteger adecuadamente, porque constituye una riqueza extraordinaria para toda la humanidad. Al a

ABC, 18/10/2013. El País, 13/12/2013. c El País, 23/12/2013. d Diario de Navarra, 3/3/2014. e El Mundo, 24/3/2014. f La Vanguardia, 27/3/2014. b

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respecto, cada uno puede advertir con facilidad,

por ejemplo, la

importancia de la región amazónica, uno de los espacios naturales más apreciados en el mundo por su diversidad biológica, siendo vital para el equilibrio ambiental de todo el planeta. Los bosques contribuyen a mantener los esenciales equilibrios naturales, indispensables para la vida. Su destrucción, incluida la causada por los irrazonables incendios dolosos, acelera los procesos de desertificación con peligrosas consecuencias para las reservas de agua, y pone en peligro la vida de muchos pueblos indígenas y el bienestar de las futuras generaciones. Todos, personas e instituciones, patrimonio

deben

forestal

sentirse y,

donde

comprometidos sea

necesario,

en

la

protección

promover

del

programas

1

adecuados de reforestación» . He elegido para esta disertación el tema de la “Diversidad biológica. Causas de la pérdida de diversidad y propuestas para conservar la biodiversidad” que ocupa en gran medida la tarea investigadora del personal del Departamento de Biología ambiental de la Universidad de Navarra. La lección comprende tres partes: en una primera parte se hace una breve revisión del conocimiento de las especies a lo largo de las diferentes épocas, en una segunda parte se analizan las diferentes causas que originan la pérdida de la biodiversidad en el medio natural, y en la tercera parte se proponen un conjunto de medidas para proteger y conservar la diversidad biológica.

1. Diversidad y biodiversidad Una primera cuestión es distinguir entre diversidad y biodiversidad. Diversidad es un concepto que se utiliza en Ecología para referirse a la explicación causal de la composición en especies de cualquier muestra extraída de la naturaleza. La diversidad se puede considerar como el resultado de un conjunto de procesos de selección, adaptación mutua y una cierta persistencia dentro de un marco arbitrariamente limitado pero representativo

de

un

ecosistema2.

La

diversidad

es

una

medida

instantánea que se aplica a un conjunto limitado. Cuando se trata de

5

ecosistemas reales se observa que la diversidad depende del tamaño de la muestra, pero además existen otros factores como el método de recolección o muestreo, y especialmente la destreza y capacidad de identificación del taxónomo. A este respecto conviene señalar que no siempre se dispone de especialistas para determinados grupos de la biota de un ecosistema. Se puede considerar que la diversidad se genera como resultado de la interacción entre especies y grupos de especies. Si se pudiera establecer esta red de relaciones y cuantificarla, se tendría una representación de la organización más apropiada, y por supuesto, mucho más informativa que un simple índice de diversidad3. La diversidad es una función que tiene un valor mínimo si todos los individuos pertenecen a la misma especie y un valor máximo si cada uno de ellos pertenece a una especie diferente. Evidentemente en cualquier ecosistema terrestre, marino o dulceacuícola ambas situaciones son inverosímiles. En la comunidad científica hay consenso generalizado que en ciertos ecosistemas como los lagos oligotróficos la diversidad es mayor que en los lagos eutróficos, con fluctuaciones anuales y valores máximos en primavera y verano4, dicho de otra manera la eutrofización generalmente reduce la diversidad de los lagos. La diversidad de un ecosistema puede verse alterada por la contaminación urbana o industrial, los procesos de fertilización de los campos con la subsiguiente eutrofización de los ríos y embalses5, las prácticas de explotación agrícola y ganadera, etc., aunque estos aspectos serán considerados más tarde en el análisis de las causas de la pérdida de biodiversidad. Existen diferentes formas de cuantificar la diversidad de una muestra, quizá la forma más sencilla es indicar el número de especies distintas que se encuentran por cien individuos de la población, sin embargo lo más común en Ecología es utilizar índices para cuantificar la diversidad de los ecosistemas: el índice de Shannon y Weaver (1963), Brillouin (1962)6, etc. que no se estima conveniente desarrollar en este momento.

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Biodiversidad es un neologismo del lenguaje científico, de procedencia anglosajona (biodiversity), como resultado de la contracción de la expresión diversidad biológica (biological diversity)7. El concepto de biodiversidad fue empleado por primera vez por Lovejoy en 19808 con el sentido amplio que le damos ahora; Norse & McManus (1980) lo emplearon para incluir dos conceptos relacionados: diversidad genética y diversidad ecológica, e igualaron la diversidad ecológica con la riqueza de especies en una comunidad. El término biodiversidad, fue introducido por Walter G. Rosen en 1985, en un documento para la primera conferencia del Foro Nacional de Biodiversidad (Washington, 1986), y Norse et al. (1986) amplía su uso para referirse a la diversidad biológica a tres niveles: genético -dentro de especies-, específico -número de especies- y diversidad ecológica -comunidad-9. El término biodiversidad fue acuñado ese mismo año por el entomólogo Edward O. Wilson10 para referirse a la gran cantidad y variedad de especies biológicas que pueblan la Tierra. El concepto de Diversidad biológica se define en 1992 en la Conferencia de Río de Janeiro como «la variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, incluidos, los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemas acuáticos, y los complejos ecológicos de los que forman parte; comprende la diversidad dentro de cada especie, entre las especies y de los ecosistemas»11.

La

Real

Academia

Española

incorpora

el

término

biodiversidad al Diccionario como «la variedad de especies animales y vegetales en su medio ambiente»12.

2. Conocimiento de la naturaleza 2.1. La Edad Antigua En esta primera parte de la lección se hace un breve recorrido del conocimiento de las especies en las diferentes épocas. El conocimiento de la naturaleza y más concretamente el discernimiento de las diferentes especies vegetales y animales que pueblan la tierra ha despertado el interés del hombre desde tiempo inmemorial. Los filósofos griegos son sin duda los que con influencias de otras culturas anteriores

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Comentario [SI1]: Fig. 1. Láminas 32 y 33 de Pieter Cramer & Caspar Stoll.

realizan una primera ordenación científica de conocimientos, y se plantean interrogantes muy profundos acerca de la naturaleza de las cosas, dando origen a la Filosofía natural. Para Empedocles (495-435 a.C.) la diversidad de los seres naturales se basa en las relaciones entre los cuatro elementos: agua, fuego, aire y tierra, los que funden o disgregan el amor o el odio. Quizá entre estos autores, de los que apenas se conocen ciertos fragmentos, se debe destacar las ideas zoológicas de Demócrito de Abdera (470-370 a.C.) del que se sabe que realizó disecciones y que distinguió animales con y sin sangre, idea que influirá en Aristóteles13. El primero que da una definición en términos abstractos de clasificación como el género y la especie fue Platón (429-347 a.C.) que escribió: «Cada individuo es solo una imperfecta reproducción de una perfecta idea eterna de la especie y el género». Es necesario llegar a Aristóteles (384-322 a.C.) para encontrar una terminología científica y una sistematización de los conocimientos.

Sus

obras

“Historia

animalium”,

“De

generatione

animalium” y “De partibus animalium” son los primeros antecedentes de la actual Zoología. La búsqueda de la esencia de la vida y de captar la idea del alma, que es idéntica con el sentido natural de cada cosa, le llevaron a Aristóteles hacia la comparación y como resultado de este proceso, establece las bases para una clasificación de los animales, los cuales «pueden ser caracterizados de acuerdo con su modo de vida, sus acciones, sus costumbres y las partes de su cuerpo». Realmente, en contra de lo que comúnmente se ha dicho, Aristóteles no realizó ninguna clasificación del reino animal, y la distinción que toma Demócrito entre animales con sangre roja –enaima- y animales sin sangre –anaimaperdurará hasta finales del siglo XVIII. Lamarck introduce el término invertebrados, que sustituyó al termino anaima de Aristóteles14. Es significativo señalar que Aristóteles creó para los crustáceos el término malacostraca, como animales sin sangre que reproduciéndose por huevos perfectos, poseen una cubierta sólida y flexible, pero resistente. A los miriápodos, insectos y arácnidos, junto con los anélidos y ciertos platelmintos los denominó entoma. Distinguió cómo ciertos entomas

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Comentario [SI2]: Fig. 2. La Escuela de Atenas. 15091510. Fresco en el Palacio Apostólico Vaticano.

poseen aparato bucal chupador, mientras que otros lo tienen masticador, y empleó por primera vez al referirse a las alas de los insectos, los nombres de las nerviaciones –costal, cubital, radial, etc.- que se usan hasta la actualidad, tomados por analogía de la anatomía humana. A la mentalidad científica y filosófica de la cultura griega le sucede la mentalidad técnica y práctica del pueblo romano. Los romanos destacan con contribuciones importantes en la esfera jurídica, y en los demás campos se apropian de la cultura griega adaptándola a finalidades más pragmáticas. Una de las ciencias aplicadas que desarrollaron los romanos fue la agricultura, siendo autores de una serie de manuales agrícolas, Cato (235 a.C.), Varro (36 a.C.), Columela (50 d.C.) y Paladios (380 d.C.) en los que tratan de la diversidad de insectos que afectan a la agricultura y a la economía rural. Probablemente lo más destacable de la época romana sea la Historia naturalis de Plinio el Viejo (23-79 d.C.). En su obra enciclopédica de 37 volúmenes resume los conocimientos que se poseían sobre la Naturaleza de su época.

2.2. La Edad Media Los cataclismos que se producen con la caída del Imperio Romano no son circunstancias propicias para el desarrollo de la cultura. Posiblemente los autores más significativos de esta época son Isidoro Hispalensis (565-636) y Rhabanus Maurus (776-856). San Isidoro de Sevilla compuso una obra: Originum Etymologiarum, que representó la enciclopedia científica más importante de la época. Esta obra sirvió de base a todos los autores de siglos posteriores hasta el Renacimiento. En el tomo XII de las Etimologías el capítulo quinto “de vermibus” y el octavo “de minutes volatilibus” están dedicados casi completamente a la diversidad de los artrópodos; en los que se mencionan 27 insectos, que constituyeron casi el único conjunto de conocimientos que sobre ellos se tuvo hasta finales de la Edad Media. Describe ciertas orugas, larvas barrenadores de la madera, la abeja, señalando la existencia de reinas, obreras y zánganos. Describe también

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diversos coleópteros, mariposas, la langosta, el saltamontes, la cigarra, el tábano, el mosquito y la Drosophila, que dice que se desarrolla del vino. En la Baja Edad Media destacan también las obras: Natura rerum de Beda el Venerable (672-735) y Le Universo del obispo de Mainz Rhabanus Maurus que describe la hormiga león, la hormiga y el grillo, la pulga, el chinche y el piojo, la oruga del gusano de seda, larvas de insectos barrenadores de la madera y las polillas. En sus “minuta volatilia” incluye la abeja, con reinas, obreras y zánganos, etc. En los reinos cristianos de la Península Ibérica destaca el esfuerzo de Alfonso X el Sabio (1221-1284) que compila diversas regulaciones sobre caza y pesca en Las Partidas. Entre otros autores que se ocupan del estudio de la biología de las especies en esta época está Federico II de Suavia (1090-1147) que en su tratado “De arte venandi cum avibus” recoge observaciones sobre cetrería y la vida de los animales, y el dominico flamenco Tomas de Candre (12011276) con su obra “De natura rerum” traducida recientemente al castellano por el Departamento de Historia de la Medicina de la Universidad de Granada. Con la aparición de las Universidades en los siglos XII y XIII, se crea un cuerpo doctrinal continuo asentándose las bases del método analítico, se desarrolla un gran interés por la Medicina, contrastando las obras antiguas de Hipócrates, Aristóteles, Galeno y Avicena. En el campo de las Ciencias Naturales destacan las obras “Liber de natura rerum”, “De animalibus” y “Speculum naturale” de los dominicos Thomas Cantipratanus (12011270), Alberto Magno y Vicentius Bellovacensis. San Alberto Magno (11931280) a pesar de su gran admiración por las ideas filosóficas de Aristóteles, dice de él que erró mucho en el campo de las Ciencias Naturales, apuntando que «la Ciencia Natural no tiene por objeto describir lo real, sino mucho más, desentrañar las causas de los fenómenos naturales», con lo que formula la auténtica actitud que debe presidir al científico de la naturaleza. De las 450 especies de animales que describe, 33 son insectos, dedicando especial atención a la abeja15.

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Comentario [SI3]: Fig. 3. San Alberto Magno. 1352. Fresco en la Sala Capitular del convento de San Niccolò, Treviso.

2.3. El Renacimiento El Renacimiento abre el camino para la revisión del saber antiguo científico-natural. Vesalio (1515-1564) es uno de los primeros autores que se aparta de Galeno. En su obra “De humani

corporis fabrica” (1543)

concibe la anatomía no como un conjunto de partes, sino como un todo relacionado intimamente. También Miguel Servet (1511-1583) se separa de Galeno y niega el paso de la sangre a través del tabique interventricular, exponiendo así la circulación doble de la sangre16. Y William Harvey (1578-1657) que en su obra “Ejercicio anatómico concerniente al movimiento del corazón y la sangre en los animales”, se refiere al comportamiento de la circulación en unas cuarenta especies animales17. Gracias a la imprenta los libros se difunden más fácilmente con tiradas más o menos numerosas, además de las técnicas descubiertas en relación con la impresión, se utiliza el grabado en madera y cobre que facilita el uso de la ilustración al servicio de la literatura científica. En el siglo XVI, Conrad Gesner (1516-1565) en su obra “Historia animalium” estableció la primera clasificación de las plantas en función de las flores y los frutos y describió numerosos animales18. Thomas Penny (1532-1589) inicia la publicación de la “Historia insectorum”19, la cual queda interrumpida con su muerte, y es continuada por Thomas Moufet (1553-1604)20, quien tampoco la vería publicada. En 1634 aparece publicada como “Insectorum sive minimorum animalium Theatrum”, considerada la primera historia formal de la diversidad entomológica –El teatro de los insectos-, gracias a la tenacidad de Theodore Mayerne (1573-1655), con dibujos de extremada exactitud. Ulyses Aldrovandi (1522-1605)21 fue uno de los primeros grandes coleccionistas de especímenes y promotor de los jardines botánicos y de expediciones organizadas. Su obra tiene gran importancia en la historia de la entomología, en su Libro VII “De animalibus insecti” describe diferentes especies de insectos, arácnidos, miriápodos, equinodermos y moluscos. La importancia

de

Aldrovandi

radica

11

en

que fue

quien

estableció la

entomología y especialmente la entomología sistemática como una verdadera ciencia.

2.4. La Edad Moderna Durante este periodo la situación y la mentalidad van a cambiar más o menos rápidamente con la creación de las primeras sociedades científicas. La primera que se funda es la de Padua, en el año 1520. La Royal Society de Londres22, con antecedentes en 1645, se funda definitivamente el año 1660, y la Académie Royale des Sciences de Paris23 en 1666. Del contacto académico entre estas sociedades, surge la edición de las primeras revistas científicas en Francia, Inglaterra, Alemania, Italia y Países Bajos. Es también en esta época cuando se inician las primeras colecciones, que han de constituir el fundamento del desarrollo de los primeros inventarios para el conocimiento de la diversidad a través de la sistemática zoológica. El avance de la biología no hubiera sido posible sin la incorporación de los nuevos instrumentos descubiertos por los científicos de la época. Galileo Galilei (1564-1642) utilizó un microscopio para describir el ojo compuesto de

los

insectos24.

“Micrographia”

En

describe

1665, algunas

Hooke

(1635-1703)25

especies

de

en

animales

su y

obra fósiles

microscópicos siendo uno de los primeros impulsores de la teoría de la evolución de las especies. Sin embargo es Marcello Malpighi (1628-1694)26 quien hace del microscopio un auténtico utensilio al servicio de la Ciencia. En su monografía “Dissertatio epistolica de bombyce”, publicada en 1669, hace una auténtica descripción de la morfología y desarrollo del gusano de seda. A Malpighi se deben algunos descubrimientos en zoología como los túbulos excretores de los insectos que llevan su nombre y la multiplicación partenogenética de los pulgones, de importancia decisiva para explicar la diversidad intraespecífica de estas especies. Swammerdam (1637-1680), considerado uno de los fundadores de la anatomía comparada, describió la metamorfosis de los insectos reagrupándolos en cuatro grupos, en su obra “Historia general de los animales que carecen de sangre” (1669)27.

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Frente a las concepciones generacionistas de la época, aparece la obra de Francesco Redi (1626-1698) “Experimentos en torno a la generación de los insectos” (1668)28, en la que adoptó por primera vez en la historia una posición contraria a la teoría de la generación espontánea, aceptada desde tiempos de Aristóteles. Destaca también su obra “Observaciones acerca de los animales vivos que se encuentran en los animales vivos” (1684), en la que con gran exactitud de las descripciones de las especies y en la interpretación del parasitismo, señala la presencia de “lombrices” en los animales o en el hombre. Por este último aspecto se considera la obra de Redi como el primer tratado de helmintología y los orígenes de una nueva ciencia que hoy se conoce como parasitología. En el siglo XVIII se incrementa el número de naturalistas que hacen expediciones a regiones exóticas aumentando así el conocimiento de la diversidad biológica en las colecciones de los museos. Aparece la preocupación por agrupar las especies en un sistema que establezca un orden entre ellas, permitiendo una mejor comprensión del mundo vegetal y animal. Se puede considerar a John Ray (1627-1705) como el precursor de la sistemática actual. En su obra Methodus plantarum nova (1682) clasificó las plantas por la morfología general basada en las flores, semillas, frutos y raíces. Ray es el primero en establecer un sistema de clasificación

de

las

plantas

con

flores

en

monocotiledóneas

y

dicotiledóneas e implanta por primera vez el concepto de especie como “conjunto de individuos que se reproducen entre si y tienen descendencia idéntica”. En una de sus últimas publicaciones La sabiduría de Dios manifestada en la obra de la Creación (1691), Ray expuso sus puntos de vista sobre la creación, la organización y el destino final de la Tierra. Y en la publicación póstuma de Sinopsis Methodica avium et piscium (1713)29, publicó trabajos sistemáticos sobre plantas, aves, mamíferos, peces e insectos, y puso orden al caos de nombres en uso por los naturalistas de su tiempo. Destaca también en esta época Martin Lister (1638-1712) con su obra Animalium Angliae tres Tractatus (1681)30 sobre arañas y moluscos

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continentales y marinos. Es considerado como uno de los precursores de la malacología moderna. Sin embargo, la figura principal de esta época es el sueco Karl Linnaeus (1707-1778), catedrático de botánica de la Universidad de Upsala, a quien se debe el actual sistema de clasificación. Cuando en 1735 se publicó la primera edición de su Systema naturae, se abrió una nueva etapa en la historia natural, quedando en desuso el sistema aristotélico con el que se venía funcionando hasta entonces. Linnaeus crea un sistema binario de nomenclatura, que ha sido aceptado y utilizado por su gran simplicidad, desde la publicación de la décima edición de su Systema naturae31 en 1758, en el que consigue la clasificación de la diversidad biológica conocida hasta entonces: unas 8.000 especies animales y unas 6.000 vegetales. Concreta las definiciones de los grupos, establece un sistema basado en caracteres anatómicos observables que describe en un latín conciso, e implanta una jerarquía de los grupos sistemáticos que todavía hoy perdura. Cada reino lo divide en clases, órdenes, géneros y especies, y dentro de estas últimas considera las variedades. En definitiva, establece un auténtico sistema con una nomenclatura coherente. Linneo fue el primer científico que utilizó los símbolos del escudo y la lanza de Marte y el espejo de Venus para indicar, respectivamente, macho y hembra32. La buena acogida en el mundo científico de la época de la obra de Linneo hizo que este sistema dicotómico fuera adoptado posteriormente en las obras de Fabricius, Lamarck y Latreille entre otros. Hacia finales del siglo XVIII destaca la obra del entomólogo francés Étienne Louis Geoffroy (1725-1810) que estudia la metamorfosis de los insectos; el barón Charles de Géer (1720-1788) con una de sus obras más significativas Mémoires pour servir à l'histoire des insectes y J.C. Fabricius (1745-1808), que da un nueva orientación a la clasificación de los animales articulados. En el campo de la botánica destaca la obra del médico español José Celestino Mutis (1732-1808)33 que en 1763 expone a Carlos III su plan para realizar una Historia Natural de América, en 1772 descubrió el árbol de la quina (Cinchona officinalis) en el monte Tena (Cundinamarca), con

14

Comentario [SI4]: Fig. 4. Karl Linnaeus en traje lapón. 1853.

numerosas propiedades como medicamento febrífugo, tónico y antiséptico. En 1783 inició la Real Expedición Botánica del Nuevo Reino de Granada actual Colombia-, que duraría treinta y tres años, continuada tras su muerte por su sobrino Sinforoso Mutis Consuegra. En 1771 el rey Carlos III decretó la constitución del Real Gabinete de Historia Natural de Madrid, en la sede que actualmente es el Museo del Prado para albergar las colecciones de ciencias naturales. Sin embargo, debido a diferentes avatares, la invasión napoleónica y la Guerra de la Independencia, el edificio no abre sus puertas hasta 1819, pero como pinacoteca para albergar las obras de arte de las Colecciones Reales. El Real Gabinete de Historia Natural que pasó a denominarse Real Museo de Ciencias Naturales se instaló en el palacio de Goyeneche, en la calle Alcalá, nº 13, compartiendo sede con la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando34.

2.5. Los siglos XIX y XX Georges Cuvier (1769-1832)35, considerado con Swammerdam uno de los padres de la anatomía comparada, publicó en 1817 Le Règne animal distribué d’après son organisation, en la que organiza la diversidad animal conocida hasta la época en cuatro grandes grupos - Vertebrata, Articulata, Radiata y Mollusca-, lo que significó un notable avance respecto al sistema de clasificación establecido por Linneo. Jean-Baptiste Lamarck (1744-1829)36 fue el primero en utilizar el término biología, en 1778 publicó su libro Flore française

sobre las plantas de

Francia y posteriormente su obra principal Historia natural de los invertebrados en siete volúmenes, estableciendo su teoría de la evolución conocida como “herencia de los caracteres adquiridos”. Pierre André Latreille (1762-1833)37 considera todos los artrópodos bajo el nombre de insectos, define los grupos de los Xifosuros (1802) y los Picnogónidos (1810) y separa por primera vez los miriápodos de los hexápodos. En 1798 organiza la colección entomológica del Museo Nacional de Historia Natural de París.

15

En el ámbito de la diversidad biológica deseo -por mi formación alemana y mi estrecha relación con la Fundación Humboldt-, hacer una referencia especial a Alexander von Humboldt (1769-1859)38. Considerado el padre de la Geografía moderna universal, se especializó en diversas áreas de la ciencia como la etnografía, antropología, física, zoología, ornitología, climatología, oceanografía, astronomía, geografía, geología, mineralogía, botánica y vulcanología. En 1788, conoció al botánico Carl Ludwig Willdenow, quien influyó en su pasión por las ciencias naturales. Con licencia del rey de España Carlos IV parte en 1799 desde el puerto de La Coruña al Nuevo Mundo acompañado por el botánico francés Aimé Bonpland, recorrió casi diez mil kilómetros en tres grandes etapas continentales. Las dos primeras en Sudamérica, desde Caracas hasta las fuentes del Orinoco y desde Bogotá a Quito por la región andina, y la tercera por las colonias españolas en México. Como resultado de estas expediciones científicas publicó en treinta volúmenes una de sus obras maestras Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo Continente, París 1807-182439. Su obra cumbre Cosmos comprende una visión global del universo, publicada en cinco volúmenes entre 1845 y 1859, y disponible en versión on line en Humboldt Digital40. Sus obras tuvieron una importante influencia en Charles Darwin, que conoció al científico alemán. En una disertación como esta sobre biodiversidad no podemos dejar de mencionar a Charles Darwin (1809-1882), que se incorporó como naturalista a la expedición del Beagle (1831-1836) por América del Sur, islas del Pacífico, Australia, Nueva Zelanda y África del Sur. Entre sus múltiples observaciones, tuvieron importancia decisiva los estudios en las islas Galápagos acerca de la gran diversidad de pinzones de aquellas latitudes, todos ellos perfectamente adaptados

a diferentes nichos

ecológicos. El resultado de sus trabajos lo plasmó, esencialmente, en su obra Sobre el origen de las especies, con su concepción básica de la “teoría de la selección natural”. La publicación de esta obra le supuso el desafecto de amplios sectores sociales y suscitó innumerables polémicas acerca de la evolución del mono al hombre, hoy en día completamente

16

Comentario [SI5]: Fig. 5. Humboldt y Bonpland en la selva amazónica. c. 1850.

superadas a la luz de numerosos hallazgos paleontológicos. Darwin, que había reflexionado respecto a la conveniencia o no de publicar sus trabajos, los dio a conocer en colaboración con Alfred Russel Wallace (1823-1913), impulsado por comunicaciones de descubrimientos similares de otros investigadores, no participó directamente en las polémicas y dejó en manos del biólogo Thomas H. Huxley (1825-1895) el encargo de asumir el peso de la defensa de su teoría de la evolución: el darwinismo41.

2.6. Fuentes para el estudio de la biodiversidad en España En España se abre una etapa decisiva para los estudios de fauna y flora con la publicación de revistas especializadas como los Anales de Historia Natural (1799-1804), los Anales de la Sociedad Española de Historia Natural (1872-1901), el Boletín de la Real Sociedad Española de Historia Natural desde 1901, y otras publicaciones periódicas fundamentales para el conocimiento de la flora como Cavanillesia desde 1928, Anales del Jardín Botánico de Madrid desde 1940, y Lagascalia desde 1973. Y para el conocimiento de la fauna, revistas como Eos desde 1925 y Graellsia desde 1943. Los estudios de biodiversidad están ligados a buenos conocimientos biogeográficos, y viceversa. El inventario y descripción de las comunidades vegetales constituye en España una actividad científica de gran magnitud. Existen magníficas monografías para el conocimiento tanto del medio físico como la diversidad biológica y ecológica. Destacan entre otras la Flora Forestal de España (Máximo Laguna, 1883)42, la Geografía de España y Portugal (Manuel de Terán, 1952), Fisiografía del solar hispano (Eduardo Hernández Pacheco, 1956), Die Iberische Halbinsel (Hermann Lautensach, 1964) y el Mapa forestal de España (Luis Ceballos et al., 1966). Pineda (2002)43 sitúa el origen de la Geobotánica española en la obra de Blas Lázaro e Ibiza, Regiones botánicas de la Península Ibérica (1895), seguida de la Geobotánica de Emilio Huguet (1929) y la Geografía botánica de la Península Ibérica de Pío Font-Quer (1953), que se continúa hasta nuestros

17

días con la Fitosociología de ilustres botánicos como Salvador RivasGoday, Salvador Rivas-Martínez y Oriol de Bolós entre otros. En cuanto a la fauna de vertebrados cabe señalar la obra de Ángel Cabrera, Fauna ibérica. Mamíferos (Museo Nacional de Ciencias Naturales, 1914), y las publicaciones de Luis Lozano Rey: Peces (1928), Vertebrados terrestres (1931) y Principales peces marinos y fluviales de España (1936). En el ámbito de la ornitología, Francisco Bernis publicó el Prontuario de la avifauna española (Ardeola 1, 1954), emprende el estudio biogeográfico de la avifauna española44 e inicia la publicación del Atlas de las aves de España a través de la Sociedad Española de Ornitología, cuya primera edición será terminada por Francisco Purroy45 en 1997. Con la creación de los nuevos estudios de Biología desde hace unos cincuenta años en diferentes universidades españolas, se potencian especialmente las prospecciones para la determinación e identificación de la riqueza faunística y florística de las distintas regiones y de los archipiélagos de Baleares y Canarias. Sería prolijo en este momento hacer una enumeración de los centenares de publicaciones y tesis doctorales de multitud de autores y especialistas en estos últimos cincuenta años.

2.7. Fuentes para el conocimiento de la biodiversidad faunística de Navarra «Si bien es cierto que es propio de la Universidad cultivar los variados saberes con amplios y universales horizontes, con superación de miras localistas o de inmediata aplicación, también lo es que no puede desentenderse de las cuestiones propias del entorno que le circunda, a cuyo esclarecimiento y solución debe contribuir»46. La creación de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Navarra en 1958 supone la apertura

de

nuevas

líneas

de

investigación

en

ciencias

naturales

casualmente coincidentes con una de las preocupaciones de las Cortes de Navarra expresadas por los diputados del Reyno en 1829, al terminar las últimas

Cortes

tradicionales

que

se

18

celebrarían

en

España47:

«La

Diputación protegerá el estudio de las Ciencias Naturales, tan útiles en un país de montaña rico en minerales y en plantas». En efecto, «Navarra es una zona geográfica con una amplia diversidad de climas, que junto con su quebrada orogenia, hace que en su suelo aparezcan distintos tipos de vegetación: desde el bosque caducifolio de tipo Atlántico en la zona prepirenaica, a la estepa subdesértica de la Bardena que recibe, a su vez, influjo de la Meseta y del Mediterráneo. La Cuenca de Pamplona y la Navarra Media, zona de contacto entre el área Mediterránea y la Atlántica, es un lugar idóneo para que se encuentre una gran diversidad de especies y subespecies de animales, con la aparición de híbridos»48. Un primer trabajo de Margalef y cols. estudia la fauna y flora de la Sierra de Aralar49. A partir de 1970 se comienzan a publicar los primeros trabajos del Departamento de Zoología relacionados con la Fauna de Navarra.

La fauna de invertebrados. En cuanto a la fauna de invertebrados se han realizado amplios estudios de fauna edáfica; los colémbolos por Jordana y cols.50, cols.56,

51, 52, 53, 54, 55

, los nematodos por Campoy, Hernández y

57, 58, 59, 60

, y los ácaros han sido objeto de numerosos trabajos de

61, 62, 63, 64, 65

Moraza y cols.

. Así mismo se ha realizado un buen número de

publicaciones sobre los moluscos de Navarra por Larraz y cols.66, 70

67, 68, 69,

.

Como consecuencia de los muestreos bastante exhaustivos sobre la entomofauna de Navarra, se han realizado estudios sistemáticos y biogeográficos

de

diferentes

grupos

artrópodos71,

de

crustáceos-isópodos72 y miriápodos-quilópodos73,

74, 75

. Herrera y cols. ha

76, 77, 78, 79, 80

publicado la fauna de ortópteros de Navarra

arácnidos,

que dio lugar a la

81

edición del Catálogo de Ortópteros de España . Publicó también la fauna de

de los coleópteros crisomélidos82, carábidos83 y cerambícidos84,

85

de

Navarra. Así mismo se han realizado numerosas contribuciones para el conocimiento y distribución de las libélulas86, las efímeras87 y moscas de las piedras88, tijeretas89, 90, chinches de campo91, 92 y chinches acuáticos93,

19

Comentario [SI6]: Fig. 6. Ortóptero.

94, 95

, mariposas96,

97, 98

y dípteros quironómidos99,

100

como indicadores de

la calidad de las aguas de los ríos navarros.

La fauna de vertebrados ha sido objeto de numerosos proyectos, tesis y publicaciones

que

permiten

conocer

con

bastante

aproximación

la

biodiversidad de estos grupos en Navarra. Los mamíferos han sido prospectados mediante diferentes técnicas de muestreo por Gállego101, y Escala y cols.102,

103

que han publicado además un libro reciente sobre la

diversidad de los Mamíferos de Pamplona104. Las aves es quizá uno de los grupos de vertebrados mejor conocido mediante el análisis de las nidificantes de los roquedos105, de los bosques106 y humedales107, 110, 111

108, 109,

; otros estudios ornitológicos están centrados en la biología de

determinadas especies como el águila calzada112, el régimen alimenticio113 o la diversidad de aves de los parques y jardines de Pamplona114, etc. El primer trabajo de herpetología se publicó en 1970115, con la cita de diez especies de anfibios y otras tantas especies de reptiles en Navarra116. En 1982, Escala y Jordana publican la fauna de anfibios y reptiles de Navarra117. En el Gran Atlas de Navarra se establecen los mapas de distribución potencial de los anfibios, reptiles, aves y mamíferos118. La colección de Anfibios y reptiles del Museo de Zoología de la Universidad de Navarra ha sido objeto de una monografía específica119. En los últimos años se ha investigado en profundidad la fauna piscícola con aportaciones muy interesantes de Escala, Miranda y cols.120, 121, 122, 123. La relación completa de publicaciones del personal docente e investigador se puede consultar a través de la página web del Departamento124. En definitiva, se han implantado líneas exitosas de investigación sobre Biología y Ecología del suelo, Fitopatología y control biológico de plagas, Hidrobiología y bioindicación125, Teoría ecológica126,

127

y Diversidad

biológica utilizando técnicas bioinformáticas para la gestión masiva de datos a cargo de Ariño y cols.128,

129, 130, 131

, Técnicas moleculares

para

estudios filogenéticos y ecológicos bajo la dirección de Hernández y cols.132,

133, 134, 135, 136

, Reflexiones sobre las relaciones entre el hombre y

20

Comentario [SI7]: Fig. 7. Salamandra. Anfibio.

la tierra, tanto desde la evaluación de impacto ambiental, como desde la educación y las humanidades medioambientales137 a cargo de Puig y cols.138, 139, 140, 141, 142, que en conjunto han dado pie a la realización de 85 proyectos de investigación financiados por diferentes instituciones públicas y privadas, 147 tesis doctorales y tesinas, 488 comunicaciones y 823 Comentario [SI8]: Fig. 8. Producción acumulada de Historia Natural publicaciones- en la Universidad de Navarra entre 1969 y 2013.

publicaciones a 31 de diciembre de 2013143.

3. La pérdida de biodiversidad Los avances de la ciencia y la tecnología han permitido a la humanidad alcanzar metas insospechadas de progreso y bienestar. Sin embargo todos estos cambios han supuesto la modificación continua de la relación del hombre con la naturaleza. La dinámica de estos cambios es cada vez más vertiginosa y repercute directamente en la pérdida de biodiversidad. La biodiversidad ejerce funciones en la regulación de procesos determinantes de las actividades humanas como el ciclo de nutrientes del suelo, el intercambio de oxigeno y dióxido de carbono, la captación de este, la regulación de clima, la polinización de las plantas, el control de los procesos de erosión, el balance de sedimentos, etc. La biodiversidad genera una serie de servicios tangibles e intangibles, directos e indirectos que aunque son complejos de definir desde el punto de vista de la valoración de mercado pueden ser evaluados especialmente en el ámbito social y económico. En efecto, la pérdida de biodiversidad y el deterioro de los ecosistemas tienen implicaciones económicas graves que afectan directamente a la sociedad. La

dimensión

humana,

social

y

económica

de

los

problemas

medioambientales ha convertido ciertas cuestiones como la pérdida de biodiversidad o el cambio climático en prioridades indiscutibles a nivel mundial. Desde una consideración metodológica se impone la introducción de enfoques de gestión integral con implicación de sectores productivos estratégicos y modelos de predicción económica, con mecanismos de coordinación intersectorial y en definitiva de cooperación interterritorial e internacional. «En la actualidad las amenazas que afectan de forma más

21

alarmante a la diversidad biológica, como los cambios en el uso del suelo, el

cambio

climático

y

el

cambio

relativo

del

nivel

del

mar,

la

contaminación, la fragmentación de los ecosistemas, o la introducción en el medio de especies exóticas invasoras, están estrechamente ligadas a los procesos de cambio global y adquiere, en muchos casos, la dimensión de grandes problemas planetarios»144. Nuestro planeta se enfrenta a una acelerada modificación de sus ecosistemas y a la irreversible pérdida de su valiosa biodiversidad. La continua perdida de biodiversidad se traduce en una disminución acelerada de la riqueza natural y una drástica reducción de las prestaciones de los ecosistemas. En esta segunda parte de la lección paso a exponer algunas de las causas de la perdida de biodiversidad.

3.1. Causas de la pérdida de biodiversidad 3.1.1. El cambio climático Con la expresión cambio climático global se hace referencia al conjunto de modificaciones del clima incluidos los cambios de temperatura y la frecuencia e intensidad de las fuertes tormentas, la alteración de los ciclos pluviales, las alteraciones en la circulación atmosférica y oceánica, y la fusión creciente de los hielos del planeta145. El cambio climático global puede ser una de las causas de mayor pérdida de biodiversidad. El cambio climático del período Cuaternario es un hecho constatado; parece que nunca ha existido un ciclo de fríos tan intensos alternando con períodos cálidos como los habidos durante el último millón y medio de años, sobre todo los últimos períodos glaciales. A los procesos naturales se une la acción del hombre, que emite a la atmósfera cantidades enormes de gases (CO2, metano, compuestos clorofluorocarbonados-CFC-,

etc.)

dando

lugar

al

llamado

efecto

invernadero. El proceso de emisión de gases ha crecido rápidamente desde los comienzos de la revolución industrial; los gases CFC utilizados

22

con fines domésticos e industriales escapan a la atmósfera y destruyen la capa de ozono, protectora de los rayos ultravioleta146. Hay acuerdo generalizado en que el incremento de CO2 y metano en la atmósfera provocará un aumento general de la temperatura y un cambio en los patrones de distribución de las precipitaciones. Sin embargo, algunas medidas destinadas a paliar las emisiones de CO2 son muy discutibles,

y el abuso de titulares alarmistas en los medios

de

comunicación indica que no se está informando de manera adecuada de la situación actual del planeta. El debate siempre es bienvenido, pero no debería centrarse en negar las evidencias del cambio climático sino en buscar las medidas necesarias para mitigar y disminuir sus efectosg. Por otra parte, como efecto dependiente del calentamiento global se produce la fusión de enormes masas de hielos polares, que provocan el incremento del nivel del mar que ha aumentado de media siete centímetros en los últimos veinte años; en el Mediterráneo el ritmo es de 2,5 a 10 mm anuales147. Estos incrementos suponen la inundación de vastas llanuras costeras, sobre todo en islas y países tropicales. El incremento del nivel del mar en Estados Unidos en un siglo puede cubrir áreas donde viven 80 especies, en peligro de extinción. «El Grupo de expertos en Cambio Climático concluye, en su resolución de 1995, que la concentración de gases responsable del calentamiento atmosférico es la más alta de los últimos 200.000 años; que en el Hemisferio Norte, el siglo XX ha sido el más cálido del último milenio; y que la década de 1990 ha sido la más cálida del pasado siglo. Es el resultado del llamado efecto invernadero»148. El impacto del cambio climático sobre los ecosistemas y la biodiversidad se traduce en un conjunto de fenómenos que influyen en las poblaciones, induciendo un corrimiento de las franjas de vegetación hacia los polos y

g

En este sentido, el 12 de marzo de 2014, el Parlamento europeo dio luz verde al Programa Copernicus, que sustituye al programa de vigilancia global del medio ambiente y de la seguridad y pretende observar no sólo la tierra, sino también controlar el calentamiento climático y proteger la seguridad pública. Este nuevo programa tendrá un presupuesto entre 2014 y 2020 de 4.291,48 millones de euros (cfr. http://www.europarl.europa.eu/).

23

por lo tanto procesos de desertización concomitantes. Algunas especies persisten bajo nuevas condiciones, otras reaccionan mediante la migración y otras desaparecen149.

3.1.2. La contaminación ambiental Se estima que actualmente en Europa unas tres de cada cuatro personas viven en ciudades, y este porcentaje no deja de aumentar150. A medida que crecen las zonas urbanas e industriales se incrementa de manera significativa la contaminación del aire y del agua por la emisión de toneladas de sustancias tóxicas que respiramos y se depositan en las plantas, en el suelo y en el agua con efectos muy lesivos para las especies y los ecosistemas. Según el criterio del «Programa Nacional de Evaluación de la Precipitación Ácida (National Acid Precipitation Assessment Program, NAPAP) de EE.UU., entre los fotooxidantes más agresivos de los ecosistemas del Hemisferio Norte se encuentran el ozono (O3) y los diversos óxidos de nitrógeno (NOx) [dióxido de nitrógeno (NO2) y óxido nítrico (NO)], el ácido nítrico (HNO3) y el nitrato de peroxiacilo o PAN (CH3COOONO2)»151. La contaminación del aire por estos agentes produce la lluvia ácida que puede suponer una amenaza constatado

que

la

lluvia

las plantas recién nacidas

152

potencial para nuestros bosques. Se ha moderadamente

ácida

(pH 4.6)

daña

. Existen diferentes trabajos y monografías

sobre el papel de la lluvia ácida y el aumento de vulnerabilidad de los árboles ante enfermedades e

insectos,

así

como

la

pérdida

de

diversidad biológica de las comunidades vegetales. En Checoslovaquia y Alemania oriental se ha detectado

-en los últimos 25 años-, cientos de

hectáreas de abetos y piceas afectados por la lluvia ácida153. También en Alemania occidental los bosques de la Selva Negra se encuentran hayedos cuyo crecimiento está alterado por la lluvia ácida. El problema radica en que

los

vientos

transportan

masas

de

aire

con

las

emisiones

contaminantes de unas áreas a otras. Evidentemente, los fenómenos atmosféricos no entienden de fronteras, por lo que un problema de

24

contaminación ambiental local se convierte en una cuestión de ámbito internacional. El carácter transfronterizo de las lluvias ácidas obliga a los países más industrializados a realizar un análisis de sus causas y buscar soluciones conjuntas estableciendo programas de actuación en beneficio recíproco de sus ecosistemas. La contaminación del agua. Como consecuencia de los diversos usos de las aguas continentales -abastecimiento de agua potable, utilización para riego de explotaciones agrícolas y ganaderas, explotaciones industriales, refrigeración de centrales térmicas y nucleares, producción de energía hidroeléctrica, actividades deportivas y recreativas y eliminación de residuos

domésticos

e

industriales-

se

produce

un

deterioro

y

contaminación del medio acuícola que afecta gravemente a la diversidad biológica. La naturaleza de los contaminantes es muy diversa, desde las aguas negras de efluentes vertidos sin depurar, pasando por el uso de fertilizantes en las explotaciones agrícolas que produce la eutrofización de los humedales, la utilización de herbicidas y plaguicidas o los efluentes industriales. Ante el cúmulo de noticias contaminantes, me parece oportuno traer a colación una grata comunicación que he recibido de mi colega José Carlos Vega, del Laboratorio de Limnología del Parque Natural del Lago de Sanabria en la que confirma el buen estado de conservación de este ecosistema singularh.

h

Parque Natural del Lago de Sanabria, 14 de noviembre de 2013.

Ante la noticia sobre la presunta eutrofización del Lago de Sanabria (Zamora) y debido a las dimensiones que va tomando este bulo en los medios de comunicación, te envío mi diagnóstico sobre el estado trófico del Lago de Sanabria, un lago que vengo monitorizando desde el año 1986, para que, si lo estimas oportuno, lo hagas llegar al resto de los socios de la Asociación Internacional de Limnología. El Lago de Sanabria, en la provincia de Zamora, es un gran lago de origen glaciar de 93 Hm3 de capacidad y una profundidad máxima de 51 m, con aguas muy poco mineralizadas y situado sobre una cubeta formada por rocas plutónicas y metamórficas. Este lago, debido al uso turístico intensivo a que está sometido desde los años 60, viene siendo controlado por la Junta de Castilla y León a través del Laboratorio de Limnología del Parque Natural del Lago de Sanabria que, desde el año 1986, mensualmente y en toda la columna de agua, realiza una toma de muestras en las que se analizan aquellos parámetros que pudieran informar de cualquier desviación de su estado trófico: nutrientes, temperatura, transparencia, conductividad, pH, oxígeno disuelto, sílice y clorofilas. De forma simultánea se analizan estos mismos parámetros en la entrada del río Tera, su principal y, prácticamente único, tributario. Los datos de este laboratorio están avalados por numerosos trabajos de investigación realizados en este lago, de forma paralela, por universidades y organismos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Disponemos, por tanto, de una

25

sólida serie continua de datos, que alcanza los 27 últimos años, y que nos permiten afirmar que: El Lago de Sanabria continúa siendo un lago oligotrófico. Sólo en momentos concretos y en circunstancias excepcionales, como sucedió en el importante incendio del año 2005 que afectó a una gran extensión de la cuenca vertiente del lago, alguno de estos parámetros se ha desviado hacia valores mesotróficos. Analizando toda la serie de datos, no se observa, en ninguno de los parámetros analizados, una tendencia que nos informe de una deriva hacia un empeoramiento del estado trófico del Lago de Sanabria. Todos los parámetros analizados se muestran consistentemente estables, fiel reflejo de la situación de su cuenca vertiente donde, en todo el periodo de este seguimiento, no han cambiando de forma notable ni la ocupación turística, ni el resto de las variables socio-económicas que pudieran afectar a la calidad de sus aguas. Desde el Laboratorio de Limnología del Parque Natural del Lago de Sanabria mostramos nuestro firme compromiso con la conservación de este ecosistema singular y que a nadie le quepa la menor duda que seremos los primeros en informar de cualquier situación que pueda poner en riesgo su integridad. José Carlos Vega Ureta Laboratorio de Limnología

26

En los últimos años preocupa la aparición de nuevos compuestos químicos no regulados que traspasan las depuradoras de aguas residuales y recalan en el medio ambiente y la cadena alimentaria. La Agencia Europea de Medio Ambiente fija actualmente su atención en la aparición de fármacos en el agua y los disruptores endocrinos154 como causantes de alteraciones de la función tiroidea en peces y aves, disminución de la fecundidad en moluscos, peces, aves y mamíferos y feminización de los machos en peces, aves y mamíferos así como la disminución de la eficacia en el proceso de incubación en peces, aves y tortugas y alteraciones del sistema inmune en aves y mamíferos155, que pueden amenazar las poblaciones de las especies. Contaminación del suelo. Los suelos contaminados son una seria amenaza para la biodiversidad. Un ejemplo palmario de degradación de suelos son los vertederos de residuos sólidos urbanos abandonados. En estos vertederos, los residuos están en contacto directo con el suelo de manera que cuando llueve el agua produce lixiviados que se filtran y pasan a formar parte del suelo. Estas sustancias contaminantes finalmente se incorporan a la cadena trófica a través de las herbáceas de pasto que crecen en dichos suelos y que son consumidas por las especies de interés cinegético, el ganado doméstico y la fauna silvestre. Un trabajo de Pastor y Hernández156 llevado a cabo en quince vertederos de la Comunidad de Madrid sellados hace veinte años muestra la presencia de metales pesados como el cinc, cobre, cromo, níquel, plomo y cadmio en estos suelos además de sales como cloruros, sulfatos y nitratos. Se aprecia una diversidad muy baja de plantas y nematodos, probablemente debido a la presencia de estos contaminantes; de hecho, la diversidad es incluso inferior a la registrada en otros ecosistemas degradados de las zonas colindantes.

27

3.1.3. Los cambios de uso del suelo En el apartado anterior hacía una breve reflexión de la adversidad que supone la contaminación de los suelos para la biodiversidad, ahora propongo exponer los efectos de la transformación del uso de suelos verdes y fértiles en suelos sellados urbanos. Hace unos años propuse la siguiente consideración: «La humanidad está sensibilizada respecto al carácter limitado del suelo. Ciertos países se han dado cuenta de que el desarrollo económico consume grandes cantidades de suelo, y que estas tendencias deben ser controladas si queremos evitar el despilfarro y la desaparición definitiva de terrenos de calidad. Se impone la utilización racional del suelo haciendo compatible el desarrollo económico con la protección del medio»157. En este punto parece conveniente traer a colación la Carta Europea del Suelo aprobada por el Consejo de Europa158, i. El suelo juega un papel fundamental en la estructura y funcionamiento de los ecosistemas porque proporciona alojamiento a la fauna edáfica que es responsable en parte de la descomposición de su materia orgánica. En un pequeño

cuenco

de

suelo

se

encuentran

miles

de

individuos

de

microorganismos, bacterias, hongos, colémbolos, ácaros, lombrices, larvas de insectos, etc., que le confieren una extraordinaria biodiversidad. Por i

Carta Europea del Suelo 1. El suelo es uno de los bienes más apreciados de la humanidad. Gracias a él pueden vivir sobre la superficie de la tierra los vegetales, los animales y el hombre. 2. Es un recurso limitado que se destruye fácilmente. 3. La sociedad industrial utiliza los suelos tanto con fines agrícolas como industriales. Toda política de Ordenación del Territorio debe ser concebida no sólo en función de las propiedades de los suelos, sino también de las necesidades de la sociedad de hoy y del mañana. 4. Los agricultores y los gestores deben aplicar métodos que preserven su calidad. 5. Los suelos deben ser protegidos contra la erosión y la contaminación. 6. Toda implicación urbana debe organizarse de tal modo que las repercusiones desfavorables que ello conlleve sean las menores posibles en las zonas colindantes. 7. A la hora de implantar cualquier tipo de construcción civil, y ya antes, es decir, desde el momento en que se lleva a cabo la concepción de los planos de la misma, deben evaluarse tanto las repercusiones que tendrá sobre las tierras adyacentes, como todas aquellas medidas adecuadas que hayan sido previstas. 8. Es indispensable hacer un inventario de los recursos de suelo disponible. 9. Es necesario realizar un mayor esfuerzo, tanto en lo que atañe a la investigación científica, como en la colaboración interdisciplinaria para garantizar, no sólo un aprovechamiento racional, sino también la conservación de los suelos. 10. La conservación de los suelos debe ser además objeto de enseñanza a todos los niveles, y ha de llevarse a cabo una labor más intensa de información pública con respecto a la misma. 11. Los gobiernos y las autoridades administrativas deben planificar y gestionar racionalmente los recursos de suelo disponibles.

28

tanto, la actividad de la fauna del suelo como formadora de humus puede tener importancia en aquellos ambientes en los que las condiciones de humedad y temperatura no son extremas159, por eso el clima condiciona en parte la naturaleza del suelo. De otra parte, la cuantificación de las poblaciones de la fauna edáfica puede servir como índice de la productividad y estabilidad de los suelos160. El suelo además filtra el agua y puede mitigar el riesgo de las sequías e inundaciones. Sin embargo en los países desarrollados la expansión de las ciudades y de las redes viarias destruye los hábitats naturales. Asistimos a una tendencia

progresiva

de

cambio

de

uso

del

suelo

mediante

la

transformación de suelo fértil en urbanizaciones, polígonos industriales o grandes infraestructuras de comunicaciones. Un estudio llevado a cabo en la Unión Europea entre 1990 y 2006 concluye que el consumo de suelo aumentó como mínimo de media 1000 Km2/año161. Europa es sin lugar a dudas unos de los continentes más urbanizados, «en la actualidad, el 75% de la población europea vive en zonas urbanas. Se estima que en 2020 esta proporción será del 80% y en siete Estados miembros, esta cifra podría superar el 90%»162. La creciente demanda de mayor calidad de vida

con

viviendas

más

grandes

y

mejores

equipamientos

de

esparcimiento, deportivos, recreativos y sociales, concita la expansión de las ciudades hacia las afueras con mayor ocupación de suelo y destrucción de biotopos naturales. Parece aconsejable adoptar con cierta urgencia medidas para mitigar los efectos del desarrollo sobre la biodiversidad. Se proponen entre otras reducir el sellado de suelo; reutilizar la capa de tierra fértil para mejorar suelos agrícolas al realizar movimientos de tierra, en lugar de que acaben en los vertederos; promover proyectos de buenas prácticas de reutilización de suelos -previamente desarrollados- como los Parques olímpicos de Barcelona y Londres, o los recintos de la Exposiciones Universales de Sevilla y Lisboa de 1992 y 1998 respectivamente, etc.

29

3.1.4. La fragmentación de los ecosistemas La construcción y utilización de infraestructuras de transporte –de carreteras especialmente- es uno de los principales agentes causantes de la fragmentación de los ecosistemas. La fragmentación del hábitat, es decir, la división de los hábitats y ecosistemas naturales en parcelas más pequeñas y aisladas es también una de las amenazas para conservar la diversidad biológica163. Además, los canales navegables, las vías férreas y las carreteras dificultan la libre circulación de los animales, aislando determinadas poblaciones y en definitiva reduciendo su probabilidad de supervivencia a largo plazo164. Conviene destacar los numerosos casos de animales que son víctimas de atropello por vehículos en carreteras y vías férreas165.

Iuell et al. 2005166 distingue principalmente cinco tipos de

efectos que atañen de forma negativa a la biodiversidad: 1. Pérdida de hábitat. En España, las carreteras y sus márgenes representan una pérdida de hábitat del 1,3% de la superficie total. 2. Efecto barrera. Las infraestructuras causan aislamiento e impiden la capacidad de las especies para desplazarse por un territorio en busca de comida, refugio o para aparearse. Una de las formas de evitar el efecto barrera es procurar

que la infraestructura sea más permeable a los

animales mediante la construcción de pasos de fauna. Iuell et al.2005 propone un elenco de medidas para reducir el efecto barrera y la mortalidad de la fauna:

3. Mortalidad causada por atropello y colisiones con vehículos. La mortalidad por atropello es responsable del 1 al 4% de la mortalidad total de especies comunes como roedores, conejos, liebres, zorros, erizos, ardillas, jabalíes, tejones, etc. Los atropellos constituyen además una de las causas más significativas de mortalidad de una especie emblemática y amenazada como el lince ibérico167. 4. Molestias y contaminación. En el apartado anterior 3.1.2. se ha hecho referencia al efecto de la contaminación ambiental sobre la biodiversidad.

30

Comentario [SI9]: Fig. 9. Medidas para reducir el efecto de barrera. Adaptado de Iuell et al., 2005.

5. Función ecológica de los márgenes. Los márgenes y taludes de las infraestructuras de transporte pueden jugar un papel complementario para enriquecer las zonas donde la vegetación natural se ha reducido considerablemente. Se han anotado ciertos efectos positivos de los márgenes en la medida que facilitan corredores para ciervos, corzos, zorros y jabalíes. Pero también se han constatado efectos negativos en la medida que favorecen la propagación de especies invasoras como el senecio del Cabo (Senecio inaequidens), una planta originaria de Sudáfrica e introducida en España, que se ha propagado aprovechando los márgenes de las carreteras. Además, como un efecto colateral de los márgenes se ha estimado que en España en el año 2000 más del 20% de los incendios forestales168 se iniciaron en los márgenes de las carreteras principalmente debido a las colillas de cigarros arrojadas por los conductores. *** En general, con el fin de mitigar los efectos de los proyectos de infraestructuras sobre la biodiversidad se debe contar con estudios multidisciplinares conjuntos de ingenieros, biólogos y graduados en ciencias ambientales, arquitectos y especialistas en patrimonio cultural que desde diferentes perspectivas analicen las diferentes alternativas de trazado teniendo en cuenta los lugares o enclaves que requieren medidas de protección como: •

Los hábitats de especies incluidas en las listas rojas de la UICN o en el

Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (CNEA). •

Lugares de

Importancia

Comunitaria (LIC), integrados

en la Red

Natura 2000. •

Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) designados en

aplicación de la Directiva 79/409/CEE. •

Zonas que albergan comunidades de plantas y tipos de vegetación que

figuran en el CNEA o designados como prioritarios en aplicación de la Directiva 92/43/CEE y •

Territorios de alto valor ecológico: cursos fluviales y humedales169, etc.

31

3.1.5. Las catástrofes naturales como causa de extinción de especies Ciertas especies no pueden acomodarse a las variaciones permanentes de las condiciones ambientales al mismo tiempo que aparecen otras nuevas. Por lo tanto, existe un ritmo de aparición y desaparición de especies como resultado de diferentes interacciones entre los organismos y el medio en el que se encuentran170. La extinción de especies puede considerarse un fenómeno natural o por el contrario un fenómeno inducido por la actividad humana. La desaparición de especies ha transcurrido como un hecho normal en la historia de la biología171. La intensidad de las extinciones de especies ha variado a lo largo del tiempo, de extinciones relativamente bajas durante largos periodos de tiempo –extinciones de fondo-, a tasas de extinción relativamente altas durante cortos periodos de tiempo –extinciones en masa-172. Las extinciones en masa se producen debido a fenómenos catastróficos como erupciones volcánicas, terremotos, o impacto de meteoritos que modifican de forma brusca las condiciones ambiéntales del medio. En definitiva, se produce una pérdida de la biodiversidad con mortandad de numerosos efectivos debido a que las especies no pueden adaptarse a las nuevas condiciones. La primera gran extinción masiva de especies se produjo al final del periodo Ordovícico, hace 440 millones de años. Al final del Pérmico, hace 248 millones años se estima que desapareció el 80% de los géneros que poblaban la Tierra. Una de las extinciones de especies más significativa fue la que ocurrió hace unos 66 millones de años en el Cretácico en el que se estima que desapareció el 70% de las especies, gran número de moluscos – ammonites, belemnites y rudistas- y todos los grandes dinosaurios. Como causa más aceptada de esta extinción masiva de especies se señala el cambio climático producido por el impacto de un gran meteorito en la superficie terrestre. Conviene señalar que después de una extinción masiva de especies tiene lugar la sustitución de estas por otras nuevas; así, los mamíferos placentarios ocuparon los nichos de los

32

saurios extinguidos, de tal manera que con un cambio notable de ciertas categorías taxonómicas se recuperan los niveles de biodiversidad e incluso pueden verse incrementados173.

3.1.6. La extinción de especies inducida por la actividad humana: la caza furtiva y la sobreexplotación Tasa de extinción. Como decía anteriormente la extinción de especies también puede ser inducida por la actividad humana. En los últimos años asistimos a una auténtica batalla de números sobre las especies que están desapareciendo174. Una de las cuestiones planteadas sobre la pérdida del número de especies estaría ligada a la destrucción del hábitat por incremento de la superficie dedicada a la agricultura y sellado de suelos (cfr. Cambios de uso del suelo). El grupo mejor estudiado acerca de la disminución del número de especies es el de las aves, del que se conoce las diferentes categorías de conservación. En un estudio llevado ha cabo sobre este grupo de vertebrados en 114 países175, se calcula que se extingue una especie cada año, es decir, diez veces superior a la tasa considerada “tasa natural”176. Sin embargo existe controversia en cuanto otros autores consideran una tasa de extinción de unas 10 especies de aves por año, que correspondería a unas 100 veces la tasa natural; parece por tanto un rango muy amplio de variación de esta tasa de extinción entre 10 y 100 veces respecto a la considerada tasa natural. Aunque es difícil dilucidar las causas precisas de la extinción de especies por la actividad humana solo podemos concluir que se produce una cierta tasa de extinción por esta causa superior a la tasa de extinción natural de 0,1 especies de aves por año. La caza. Una primera cuestión a considerar es la caza como un recurso natural renovable que debe ser gestionado de manera sostenible para que satisfaga de manera razonable las necesidades humanas. La caza puede constituir incluso un buen instrumento compatible con la conservación de la biodiversidad. En efecto, las reservas de caza han jugado un papel beneficioso para la protección de la diversidad de la flora endémica quizá

33

por encima del valor que pueda asignarse a los parques nacionales, especialmente en áreas emblemáticas de Sierra Nevada o las Sierras de Cazorla y de Segura177. En el Congreso Mundial de la Naturaleza celebrado en Amman (2000), la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), en su Declaración de la política acerca del uso sostenible

de

los

recursos

vivos

silvestres,

mantiene

que

«el

aprovechamiento ético, racional y sostenible de ciertas formas de vida silvestre puede constituir una alternativa o medio complementario en lo que respecta a la utilización productiva de la tierra, ser compatible con la conservación y promoverla, siempre que dicha utilización sea conforme con las salvaguardias apropiadas»178, así mismo los Principios y directrices de Addis Abeba para la utilización sostenible de la diversidad biológica de la Secretaría del Convenio sobre la Diversidad Biológica179 consideran que estas normas son más eficaces si se adoptan medidas apropiadas conducentes a proteger los recursos biológicos no solo por parte de los gobiernos sino también como principios asumidos por las comunidades locales, los administradores de los recursos, el sector privado y otros interesados como las asociaciones y federaciones de caza y pesca asegurando que los usos consuntivos que hagan de la diversidad biológica no llevarán a su declive a largo plazo sino a una mejor conservación mediante estrategias de gestión, educación e investigación. Finalmente el Comité Permanente del Convenio de Berna en 2007 a través de la Carta europea

sobre

administradores,

caza

y

biodiversidad180

cazadores

y

dirigida

operadores

a

turísticos

los

reguladores,

promueve

los

principios y directrices destinados a garantizar que la caza y el turismo de caza en Europa se practique de una manera sostenible, definiendo la caza como una actividad aceptada social, económica y culturalmente, haciendo compatible la conservación de las especies y de los hábitats con las necesidades de las generaciones presentes y futuras. Caza furtiva. En cambio la caza furtiva tiene un marcado efecto negativo sobre la biodiversidad como es la caza ilegal de animales en peligro de extinción, o en espacios protegidos; la caza en periodos prohibidos como

34

la época de celo, apareamiento y reproducción de los animales, la caza de especies migratorias durante el trayecto de regreso hacia los lugares de cría, o la caza sin control y frecuentemente con medios ilegales como ciertas

trampas,

redes,

lazos,

cepos,

trampas,

venenos,

cebos

envenenados o tranquilizantes, ligas, explosivos, asfixia con gas o humo y ballestas; procedimientos todos ellos prohibidos por la legislación181. La sobrepesca y la sobreexplotación. Hasta mediados del siglo pasado se considera que las pesquerías mundiales estaban más o menos equilibradas. A partir de la década de los ’70 se inicia una explotación intensiva y tecnificada de los principales bancos de peces que marcan un claro declive de las poblaciones. Según la FAO182, solo el 20% de los bancos pesqueros tenían una explotación moderada en 2007. Además, las artes de pesca como las redes de deriva capturan especies raras o amenazadas como delfines o tortugas, y las redes de arrastre dañan los fondos marinos alterando la biodiversidad de las comunidades bentónicas.

3.1.7. La introducción de especies exóticas Una especie exótica es la que el hombre ha introducido fuera de su ámbito de distribución natural, directa o indirectamente y de forma voluntaria o accidental. Se considera que es invasora si afecta a la salud, a la biodiversidad o tiene un efecto socioeconómico negativo. Las especies exóticas invasoras (EEI) constituyen también una de las amenazas a la biodiversidad de los ecosistemas, además de tener efectos perjudiciales para la salud en la medida que actúan como vectores de enfermedadesj. Además, las EEI pueden causar pérdidas económicas importantes derivadas de su impacto directo o de los costes de gestión de las poblaciones.

j En los últimos 20 años se ha confirmado la muerte de unas 200 personas por peste negra causada por la bacteria Yersinia pestis transmitida por la pulga de la rata negra (Rattus rattus). Esta rata está incluida en la lista de las cien EEI más dañinas del mundo. Se produce así un efecto colateral de esta especie invasora de manera que «La peste negra sigue apareciendo en la lista de enfermedades reemergentes de los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades de Estados Unidos». Rizzo, J. 2013. National Geographic Society, 33(6): Diciembre.

35

Comentario [SI10]: Fig. 10. Pescas mundiales de peces marinos entre 1950 y 2012, por continente de declaración.

El trasiego de especies de unas áreas a otras es tan antiguo como la propia humanidad a través de las rutas migratorias183. El ritmo en el transporte e introducción de especies ha ido creciendo con la extensión del comercio y la mayor eficacia de los medios de transporte. Los primeros intercambios de animales y plantas entre España y América se produjeron inmediatamente en los comienzos de la conquista184. Sin embargo en las últimas décadas del siglo XX se alcanza un ritmo de introducción de EEI sin precedentes asociado al fenómeno de la globalización185. Se estima que en Europa se encuentran unas 12.000 especies exóticas de las que entre el 10 y el 15% se consideran EEI. En otros casos la apertura de nuevas vías de comunicación como el Canal de Suez ha supuesto la entrada de más de 310 especies originarias del Mar Rojo al Mediterráneo en solo unas décadas186, o el trasiego de especies entre el Atlántico y el Pacífico a través del Canal de Panamá. Los efectos de las EEI en el medio natural son muy significativos, especialmente en ecosistemas aislados como las islask, 188

fluviales. McArthur y Wilson

187

o los sistemas

desarrollaron una teoría acerca de los

efectos de las EEI sobre los ecosistemas en términos de biogeografía y distribución de especies en las islas según la cual, la introducción de una especie puede desencadenar diferentes situaciones: desaparición de una o varias especies, con o sin efecto en el nicho de especies nativas; desaparición de una o varias especies por alteración del ecosistema o de la cadena trófica y por último, fracaso en el establecimiento de la EEI. En k Una publicación reciente de científicos del CSIC (Nogales et al. 2013) ha constatado que los gatos asilvestrados han contribuido a la extinción, al menos, de 33 especies de vertebrados endémicos en distintas islas del mundo, todas ellas de reducidas dimensiones y escasa población. Los autores han identificado la probabilidad de próximas extinciones a causa de la presencia de gatos invasores y proponen que 13 especies se encuentran en peligro crítico. En concreto, dos reptiles, nueve aves y dos mamíferos, de acuerdo con el catálogo de la UICN. Siete de las doce islas que albergan especies de vertebrados en peligro crítico se encuentran en el océano Pacífico, tres en el Caribe, una en el Índico, y otra en el Mediterráneo. Todas ellas tienen una extensión inferior a los 290 Km2 y su población no supera los 900 habitantes. Para el estudio se tuvieron en cuenta datos de alimentación, impactos sobre conservación de especies amenazadas y la experiencia de las campañas de erradicación ya realizadas. Según este estudio, la introducción de especies invasoras -particularmente mamíferos depredadores- es uno de los principales factores que contribuyen a la extinción de especies en las islas. Desde la domesticación del gato salvaje africano hace unos 9.000 años, el hombre ha dispersado ampliamente el gato doméstico, y se han establecido poblaciones asilvestradas en islas de todo el mundo, incluso en archipiélagos remotos.

36

términos teóricos, la probabilidad de cada una de las especies estaría determinada por la situación del ecosistema. Cuanto mayor es el número de especies de la comunidad, menor será el de nichos disponibles; de tal manera que una comunidad bien estructurada y rica en especies es menos vulnerable a la invasión que un ecosistema con una escasa diversidad. Los sistemas fluviales y embalses de la Península Ibérica están afectados por las EEI. Hasta el año 2000 se habían introducido 21 especies de peces de las cuales 13 se consideran EEI189. Las introducciones se han venido realizando desde la época del Imperio Romano con la carpa (Cyprinus carpio) y el carpín dorado (Carassius auratus)190 hasta hace unos tres lustros con la introducción del esturión siberiano (Acipenser baerii)191. Tabla de especies de peces introducidas en la Península Ibérica (Modif. de Granado Lorencio, 2002) Familia

Nombre común

Nombre científico

Acipenseridae

esturión siberiano

Acipenser baerii

Centrarchidae

pez sol

Lepomis gibbosus

blackbass

Micropterus salmoides

Cichlidae

chanchito

Cichlasoma facetum

Cyprinidae

alburno

Alburnus alburnus

blica

Abramis bjoerkna

carpín dorado

Carassius auratus

carpa

Cyprinus carpio

gobio

Gobio gobio

rutilo

Rutilus rutilus

gardi

Scardinius erythophtalmus

Esocidae

lucio

Esox lucius

Fundulidae

fundulo

Fundulus heteroclitus

Ictaluridae

pez gato

Ameiurus melas

Percidae

perca

Perca fluviatilis

lucioperca

Sander lucioperca

Poecilidae

gambusia

Gambusia holbrookii

Salmonidae

huchón

Hucho hucho

trucha arco-iris

Oncorhynchus mykiss

salvelino

Salvelinus fontinalis

siluro

Silurus glanis

Siluridae

37

Un caso particular es la presencia de cangrejos alóctonos (Procambarus clarkii y Pascifasciatus leniusculus) en la Cuenca del Ebro. Según un trabajo llevado a cabo en el Departamento de Biología ambiental de la Universidad de Navarra por Oscoz y Duran (2005)192, «las poblaciones de cangrejo autóctono (Austropotamobius pallipes) se han visto seriamente reducidas en cuanto a abundancia y distribución, lo que ha llevado a ser incluida en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la IUCN como especie vulnerable (IUCN, 2004),193 así como en los Anexos II y IV de las Directivas Europeas relativas a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres (92/43/CEE194 y 97/62/CE195)». El cangrejo rojo (Procambarus clarkii) es una especie endémica de Norteamérica que fue introducida en las marismas del Guadalquivir en 1973 donde se ha aclimatado perfectamente y se explota con capturas superiores a las 3.000 Tn/año196, sin embargo su expansión por la redes fluviales de otras cuencas como la del Ebro induce un factor de riesgo para la supervivencia y recuperación del cangrejo autóctono197. Otra especie introducida en las cuencas del Duero y el Tajo en 1974 es el cangrejo señal (Pascifasciatus leniusculus)198 que ha incrementado su área de distribución a otras cuencas con efectos similares a los ocasionados por el cangrejo rojo. Además, otro efecto perjudicial de estas especies alóctonas es su papel de portadoras de la afanomicosis – enfermedad producida por el hongo Aphanomyces astaci199,

200

- que infecta las comunidades de cangrejo

autóctono. Se proponen ciertas medidas como evitar la comercialización en vivo de estos cangrejos, minimizar los riesgos de contaminación del hongo mediante medidas de educación e higiene y mejorar la gestión para su control y erradicación201. Ante la imposibilidad de referirme -por razones de espacio- al elevado número de EEI, destaco a continuación algunas de las cien EEI más dañinas del mundo202, señaladas por el Grupo de Especialistas en Especies Invasoras de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, entre otras: el alga marina caulerpa (Caulerpa taxifolia) bien adaptada en el Mediterráneo, la correhuela japonesa (Fallopia japonica) invasora de

38

Comentario [SI11]: Fig. 11. Cangrejo rojo Procambarus clarkii

parques y jardines, el jacinto de agua (Eichornia crassipes), el estornino pinto (Sturnus vulgaris), el mejillón cebra (Dreissena polymorpha) y la gambusia o pez mosquito (Gambusia affinis), que introducido para el control biológico de los mosquitos se ha extendido por los sistemas fluviales de diferentes continentes.

4. Conservación de la biodiversidad En esta tercera parte de la lección pretendo aportar algunas propuestas para conservar la biodiversidad. El concepto de biodiversidad debe estar especialmente claro si lo consideramos desde el punto de vista de la conservación203. Constituiría un término muy pobre de contenido si se considera al margen del sistema ecológico del que las especies forman parte. Las especies constituyen un recurso insustituible que hay que conservar como fruto de largos procesos de especiación y adaptación, a menos que los costes sean tan elevados que resulten insoportables. Conservar la integridad de los ecosistemas y entender el marco en el cual debe moverse la gestión añade una dimensión decisiva al concepto de biodiversidad204. Además, las generaciones futuras no nos perdonarían si por

pasividad

o

indiferencia

no

aplicáramos

los

conocimientos

y

tecnologías de que se dispone para conservar la biodiversidad de los ecosistemas. Pineda et al. 2002205 proponen tres tipos de razones para conservar la biodiversidad: razones científicas, razones utilitarias y razones éticas. Razones científicas. Desde

el punto de vista científico parece obvio la

necesidad de conservar la biodiversidad tanto desde una aproximación a la ecología como a las ciencias ambientales aplicadas. El interés por la biodiversidad

tiene

su

fundamento

no

solo

en

la

prospección,

identificación, inventario y cartografía de las especies sino también en el estudio y conocimiento de las relaciones naturales e interacciones entre las especies de la biocenosis. «Las comunidades adquieren una estructura y unas propiedades que emergen sobre las de las poblaciones aisladas. Normalmente, la diversidad y la biodiversidad se originan y resultan del

39

funcionamiento de las comunidades. Pueden reconocerse sin embargo, comunidades donde la asociación entre especies es el mero resultado de la concurrencia de especímenes donde el ambiente les resulta propicio. En la mayoría de los casos constituyen estructuras funcionales basadas en interacciones

entre

especies.

La

conservación

de

la

biodiversidad

compromete el conocimiento de los procesos que regulan la diversidad biológica, los factores de que dependen éstos, y las características de interacción con el entorno físico»206. Razones utilitarias. El valor económico per se de los recursos naturales de la

biosfera

es

el

argumento

más

contundente

para

conservar

la

biodiversidad. No dejo de reconocer que este argumento implica una concepción antropocéntrica de la biodiversidad, pero hay muchas razones utilitarias para pensar que el uso de nuevas especies, razas y variedades abre nuevos campos insospechados para la alimentación y obtención de productos naturales con efecto medicamentoso a partir de ciertos recursos marinos;

así

transgénicos,

como

las

nuevas

vías

de

investigación

para

crear

o utilizar microorganismos para combatir los efectos

negativos de la contaminación. De aquí la necesidad de conservar los recursos genéticos que comentaré más tarde. Razones éticas. Las razones por las que se debe proteger la biodiversidad y moderar sus daños son especialmente de tipo ético. El hombre es una especie verdaderamente heterotrófica, cazadora-recolectora durante la mayor parte de su existencia207, con su inteligencia ha conseguido la domesticación de plantas y animales escapando así a los procesos naturales a los que están sujetos las demás especies. La hominización dio paso a la antropización del planeta con la creación de la noosfera; la religión cristiana considera al hombre administrador de la biosfera, capaz de aprender y transmitir cada vez con mayor rapidez los conocimientos. Pero nada de esto le da derecho a extinguir ninguna forma de vida sino al revés, si es honesto y coherente, debe aplicar toda la ciencia y el conocimiento

para

proteger

y

conservar

40

toda

forma

de

vida

y

especialmente el don de la vida humana desde el mismo momento de la concepción hasta la muerte natural. Conservar la biodiversidad no es solo cuestión de proteger la vida silvestre en las reservas naturales, sino un deber moral de asegurar el desarrollo armónico y sostenible del hombre en la biosferal.

4.1. Medidas para conservar la biodiversidad Se

proponen

a

continuación

algunas

medidas

para

proteger

la

biodiversidad, unas orientadas al medio físico como el estudio, la definición y declaración de áreas y espacios protegidos, o la restauración de corredores ecológicos para evitar el aislamiento de las poblaciones; y otras orientadas a conservar la biota como los bancos de conservación de la naturaleza, la protección de materiales genéticos mediante bancos de semillas, o sistemas de vigilancia para la protección de especies en peligro de extinción.

l

El Instituto de Recursos Mundiales (World Resources Institute, WRI), la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) han redactado la Estrategia Global para la Biodiversidad basada en los diez principios siguientes: 1. Cada manifestación de vida es singular y la humanidad debe respetarla. 2. La conservación de la biodiversidad es una inversión que produce considerables beneficios locales, nacionales y mundiales. 3. El costo y los beneficios de la conservación de la biodiversidad deben repartirse de forma más equitativa entre las naciones y los habitantes de cada una de ellas. 4. Como parte del esfuerzo a gran escala encaminado a lograr un desarrollo sostenible, la conservación de la biodiversidad requiere una modificación radical de las modalidades y prácticas del desarrollo económico a escala mundial. 5. Por sí solo, un mayor financiamiento de la conservación de la biodiversidad no desacelerará el deterioro de la misma. Es necesario reformar las políticas y las instituciones para crear condiciones que hagan eficaz un mayor financiamiento. 6. El orden de prelación de los objetivos de la conservación de la biodiversidad difieren según se examinen desde una perspectiva local, nacional o mundial; todos esos objetivos son legítimos y deben tenerse en cuenta. Además, todos los países y las comunidades están interesados en conservar su biodiversidad; la atención no debe centrarse exclusivamente en unos pocos ecosistemas o países ricos en especies. 7. Sólo será sostenida la conservación de la biodiversidad si se incrementa considerablemente el interés y la preocupación de la población y si los responsables de elaborar políticas tienen acceso a una información confiable sobre la cual basar sus decisiones al respecto. 8. Las medidas encaminadas a conservar la biodiversidad deben planificarse y ejecutarse a una escala determinada por criterios ecológicos y sociales. La actividad debe centrarse en los lugares en que las personas viven y trabajan, así como en zonas en estado natural protegidas. 9. La diversidad cultural guarda estrecha relación con la biodiversidad. El saber colectivo de la humanidad sobre la biodiversidad y su uso y gestión se basa en la diversidad cultural. A la inversa, conservar la biodiversidad suele ayudar a reforzar la integridad y los valores culturales. 10. Una mayor participación de la población, el respeto de los derechos humanos básicos, un acceso más expedito de la población a la educación y la información, y una mayor responsabilidad de las instituciones son elementos esenciales de la conservación de la biodiversidad.

41

4.1.1. La declaración de áreas y espacios protegidos Un aspecto clave de los programas para conservar la biodiversidad es la declaración de espacios protegidos, especialmente para las especies o hábitats más vulnerables. Sin embargo, los espacios protegidos no bastan por sí solos para asegurar la conservación de la biodiversidad. Para conseguir resultados óptimos es necesario establecer cuidadosamente los criterios para su emplazamiento, asegurándose de que los diferentes tipos de ecosistemas de la zona tengan una adecuada representación. Según la UICN un espacio protegido es «un espacio geográfico claramente definido, reconocido, dedicado y gestionado mediante medios legales u otros tipos de medios eficaces para conseguir la conservación a largo plazo de la naturaleza y de sus servicios ecosistémicos y sus valores culturales asociados»208. La superficie mundial de espacios protegidos ha experimentado un crecimiento extraordinario en los últimos años209. Según datos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), hasta 2010 los espacios protegidos (parques nacionales, naturales, reservas, y humedales de importancia internacional) abarcaban el 12,7% de la superficie de la Tierra, excluida la Antártida. «Las metas de Aichi del Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) prevén que para 2020 al menos el 10% de las zonas marinas y costeras y el 17% de las terrestres se conserven por medio de sistemas de áreas protegidas y administradas de manera eficaz y equitativa»210. En la Unión Europea, la Directiva Hábitat 92/43/CEE211 relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres y la Directiva 97/62/CE212 han llevado consigo el compromiso de los estados miembros de establecer la Red Natura 2000 que se considera la iniciativa más importante para la conservación de la naturaleza en el viejo continente. La Red Natura 2000 comprende Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPAs) señaladas en la Directiva Aves213 y Zonas de 42

Comentario [SI12]: Fig. 12. La Red Natura 2000 en 2013.

Especial Conservación (ZECs) con el fin de conservar las especies de interés comunitario. La directiva define la ZEC como «un lugar de importancia comunitaria designado por los Estados miembros mediante un acto reglamentario, administrativo y/o contractual, en el cual se apliquen las medidas de conservación necesarias para el mantenimiento o el restablecimiento, en un estado de conservación favorable, de los hábitats naturales y/o de las poblaciones de las especies para las cuales se haya designado el lugar»214. En España WWF/ADENA ha realizado una propuesta significativa de Lugares de Importancia Comunitaria (LICs)215 que contribuyen a conservar o restablecer ciertas especies que se señalan en la tabla adjunta mamíferos

semiacuáticos,

peces

continentales,

especies

marinas

y

grandes carnívoros-, o proteger la diversidad biológica de determinados hábitats (forestales y riparios, humedales, saladares y turberas, hábitats marinos y costeros) en alguna de las regiones biogeográficas europeas (mediterránea, atlántica, continental, alpina, boreal y macaronésica). Estos

LICs,

una vez identificados,

propuestos

y

aprobados

deben

convertirse en ZECs. Es decir, la declaración de un LIC es un acto formal previo y el de ZEC requiere el desarrollo de una legislación específica por parte de las comunidades autónomas o los Estados. Relación de especies de animales a conservar según la propuesta de Lugares de Importancia Comunitaria (LICs) de WWF España/ADENA 2000216

Mamíferos semiacuáticos

Peces continentales

m

Nombre común

Nombre científicom

Nutria

Lutra lutra

Visón europeo

Mustela lutreola

Desmán de los Pirineos

Galemys pyrenaicus

Lamprea marina

Petromyzon marinus

Lamprea de arroyo

Lampetra planeri

Esturión

Acipenser sturio

Sábalo

Alosa alosa

Saboga

Alosa fallax

El nombre científico utilizado es el del Anexo de la Directiva Hábitats.

43

Especies marinas

Grandes carnívoros

Salmón

Salmo salar

Boga de río

Chondrostoma polylepis

Madrilla

Chondrostoma toxostoma

Bermejuela

Rutilus arcasii

Rutilo

Rutilus alburnoides

Pardilla

Rutilus lemmingii

Bogardilla

Iberocypris palaciosii

Jarabugo

Anaecypris hispanica

Barbo de montaña

Barbus meridionalis

Barbo comiza

Barbus comiza

Locha

Cobitis taenia

Fartet

Aphanius iberus

Samarugo

Valencia hispanica

Cavilat o gobio

Cottus gobio

Tortuga boba

Caretta caretta

Delfín mular

Tursiops truncatus

Marsopa

Phocoena phocoena

Foca monje

Monachus monachus

Lince ibérico

Lynx pardinus

Oso pardo

Ursus arctos

En España, según el anuario 2011 de Europarc, la red de espacios protegidos por la legislación nacional y autonómica comprende el 12,8% de la superficie terrestre del país, representada por más de 1.700 lugares, entre los cuales hay quince parques nacionales, 162 parques naturales, 277 reservas, 319 monumentos, 56 paisajes protegidos y más de 800 espacios con otras figuras de protección217, que nos permite vislumbrar un buen estado de conservación de la biodiversidad en nuestro medio natural.

Esquema de las figuras legales aplicadas a las áreas protegidas de España Fuente: EUROPARC-España 2012. ZEPIM Zonas Especialmente Protegidas de Importancia para el Mediterráneo, OSPAR, Convención para la Protección del Medio Marino del Atlántico del Nordeste. * Figuras desarrolladas por las Comunidades Autónomas.

Quizá ningún otro espacio como Doñana nos puede servir de ejemplo para mostrar esta superposición de figuras, ya que es espacio natural y parque nacional (Gobierno de España)218, humedal de importancia internacional 44

Comentario [SI13]: Fig. 13. Esquema de las figuras legales aplicadas a las áreas protegidas de España

(Convenio Ramsar)219, patrimonio de la humanidad (UNESCO)220, reserva de la biosfera (programa MaB, El Hombre y la Biosfera de las Naciones Unidas)221 y ZEPA (Unión Europea)222. Ante la imposibilidad de referirme a tantos parajes y espacios protegidos de gran belleza de la Creación permítanme que haga una reseña del Parque Nacional de Garajonay de mi querida Isla de La Gomeran que comprende una extraordinaria diversidad biológica, con 4.182 especies descritas, de las que 1.063 (el 25,41%) son endemismos canarios y 268 son exclusivas de La Gomera, concentradas principalmente en el monteverde y la laurisilva de la zona central de la isla. De las especies citadas, 2.000 son invertebrados, de los que 577 son endemismos canarios y 227 son exclusivas de La Gomera. El lagarto gigante de La Gomera (Gallotia bravoana), considerado extinguido, ha sido redescubierto muy recientemente y es objeto de un programa de recuperación223.

n La Gomera (Canarias) fue declarada Reserva de la Biosfera durante la 24ª sesión del Consejo Internacional de Coordinación del Programa El Hombre y la Biosfera –MaB- de la UNESCO, celebrada en París los días 9-13 de julio de 2012. Transcribo una descripción resumida de esta Reserva de la Biosfera, «La gran altitud media de la Isla se cuenta entre los valores más elevados del mundo y se manifiesta en un relieve excepcionalmente abrupto, organizado en barrancos radiales y profundos. Su fisiografía es resultado de un antiguo edificio volcánico que no ha registrado ninguna erupción desde 3.000.000 de años atrás y que ha sufrido una intensa erosión (hídrica y marina), responsable del desmantelamiento de la periferia y la incisión remontante hacia el centro. El proceso de modelado del paisaje ha mantenido una característica meseta central a unos 1.000 m de altitud media y sus prolongaciones a lo largo de las divisorias entre barrancos. En la plataforma superior o «meseta» se estanca el manto de estratocúmulos del alisio o “mar de nubes”, que da lugar a la lluvia horizontal. La elevada humedad que se produce ha favorecido la existencia de la más importante formación de monteverde del Archipiélago: el Parque Nacional de Garajonay, que incluye la superficie continua de laurisilva más extensa de Canarias y con mejor estado de conservación. Los profundos barrancos, flanqueados por altos lomos y lomadas, han funcionado como áreas-islas para la evolución de plantas y animales, que han incrementado su diversidad a lo largo del tiempo. El medio marino, con una importe plataforma continental es igualmente rico en fauna, en la que destacan los cetáceos. Es de resaltar la impronta humana en algunos paisajes característicos marcados por la presencia de paredones, que hacen posible los cultivos en laderas de gran pendiente, o por la presencia de palmeras, unidas al desarrollo económico y cultural de la población a lo largo de los siglos. Un importante patrimonio cultural inmaterial forma parte del acerbo patrimonial actual, del cual el silbo gomero ha sido declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Según datos de 2010, la población de la Isla asciende a 22.776 habitantes, siendo la segunda isla menos poblada del archipiélago canario. La densidad media de población es de 61 habitantes por km2 desigualmente distribuida, con una densidad relativa muy alta en el municipio de Valle Gran Rey y muy baja en Vallehermoso. En los últimos años, la evolución demográfica muestra una tendencia a la pérdida de población, especialmente en los efectivos de entre 30 y 40 años, provocada por la emigración. Este hecho es uno de los retos de gestión que afronta la nueva reserva de la biosfera hacia un futuro inmediato, donde la conservación del patrimonio natural y cultural y el desarrollo de la población local se plantean como elementos integrados en el plan de gestión».

45

4.1.2. Restauración de corredores ecológicos Un corredor ecológico es un hábitat adecuado que conecta dos o más áreas protegidas o no, que permiten el intercambio de especies, migraciones, intercambio de genes, etc. A la hora de establecer y planificar espacios protegidos s e d e b e hacer hincapié en la importancia de conectar estas áreas mediante corredores y zonas de apoyo o tampón que eviten el aislamiento de las poblaciones. En general, la presión de los enclaves de población, la lucha por la propiedad de las tierras, y la complejidad

de

gobernanza

de

las

diferentes

administraciones

conducen a que muchas áreas protegidas permanezcan como “islas” completamente aisladas y dificultan especialmente la biología de las especies amenazadas de las que hablaré más tarde. Otras zonas tampón y corredores biológicos no son áreas protegidas sino zonas donde una combinación de acuerdos voluntarios e indemnizaciones ayudan a proteger la integridad del área protegida con enfoques de gestión del paisaje y facilitar su conectividad224. La Comisión Mundial de Áreas Protegidas de la UICN propone que «cada vez será más importante conectar las áreas protegidas mediante corredores y redes para facilitar el desplazamiento de las especies e incrementar los probables traslados naturales hacia lugares donde las condiciones sean más aptas para la supervivencia»225.

4.1.3. Bancos de conservación de la naturaleza Un banco de conservación de la naturaleza o banco de hábitat consiste en la implantación de un proyecto de creación, mejora, restauración o conservación ambiental. El proyecto genera un incremento del valor ambiental del terreno,

que se comercializa en forma de créditos

ambientales. Estos créditos ambientaleso son comprados por operadores o promotores para restaurar daños ambientales que generan o pueden generar en un futuro, para su uso como posible establecimiento de o

Los créditos ambientales son unidades de valor ambiental comercializable. Se consideran de distinta forma según el tipo de mercado ambiental: para un banco de hábitat, el crédito ambiental es la hectárea de biodiversidad; para un banco de especies, se considera el crédito la pareja de la especie que se quiere conservar; en el mercado de CO2 el crédito ambiental es la tonelada de CO2 equivalente, etc.

46

garantías, como inversión ética o como compra voluntaria. El objetivo de los bancos de hábitat no es solo conservar la biodiversidad sino incluso conseguir una ganancia de la biodiversidad de los ecosistemas. Sin duda, una buena noticia para conservar la biodiversidad en España es la

novedad de la reciente ley de Evaluación ambiental226 de la

Administración del Estado de establecer bancos de conservación de la naturaleza como un mecanismo voluntario que permite compensar, reparar o restaurar las pérdidas netas de valores naturales, semejante a las compensaciones voluntarias que se realizan en otros países de la Unión Europea como Alemania, Francia o Reino Unido. El mercado de créditos ambientales está especialmente desarrollado en Estados Unidos no solo en el ámbito de los bancos de hábitats, sino también en el ámbito de otros factores ambientales como el agua, el CO2 o la energía. Los últimos datos del informe elaborado por Ecosystem Market Place sobre mercados ambientales a nivel mundial en 2011 arroja la cifra de 798 bancos de humedales y 90 bancos de conservación activos con una superficie protegida de 182.000 Ha y 30.300 Ha, respectivamente. En total, los mercados norteamericanos de biodiversidad suponen un mercado anual de unos 2.000 millones de dólares227.

4.1.4. Bancos de semillas y jardines botánicos La España peninsular con los archipiélagos de Baleares y Canarias es con mucha diferencia el país europeo con mayor fitodiversidad. España con 1.200 especies endémicas duplica a Grecia que ocupa el segundo lugar en Europa y centuplica en endemismos al Reino Unido228, lo que supone un gran patrimonio a conservar. Al botánico Salvador Rivas-Goday le cabe el mérito de haber realizado la primera lista de un puñado de especies y subespecies a proteger en España229. La confección de estas listas cobró un interés inusitado desde entonces ante la necesidad de conocer las especies a recolectar cuando se inician los trabajos sobre bancos de semillas230,

231, 232, 233

. Las listas de

234

plantas raras, amenazadas y endémicas de la UICN

47

, y de la Directiva

Hábitat235 han sido actualizadas por el World Conservation Monitoring Center236. Antes de analizar los bancos de semillas y los jardines botánicos como sistemas de conservación de los recursos vegetales, parece conveniente señalar algunas anotaciones sobre los libros rojos de especies amenazadas y en peligro de extinción, y en que consisten los sistemas de conservación in situ y conservación ex situ para conservar estas especies y sus variedades vegetales. Los libros rojos de especies amenazadas. Una primera cuestión a considerar es que el concepto de endemismo y de especie amenazada no son

equivalentes.

Aunque

el

sentido

común

aconseja

tomar

los

endemismos como una primera aproximación porque entre ellos se incluyen un buen número de especies amenazadas, se encuentran muchos endemismos que no están precisamente amenazados y en cambio pueden existir especies no endémicas que pudieran encontrarse amenazadas. Es conocido que la UICN utiliza hasta nueve categorías para definir el estado de conservación de las especiesp. En la medida que mejoran los estudios corológicos más precisos de las especies puede variar su clasificación

entre

categorías,

de

manera

que

especies

que

se

consideraban en peligro pasan a ser vulnerables y al revés, etc. La Lista Roja Europea comprende 1.826 especies de plantas vasculares, de las cuales 467 especies están amenazadas en peligro de extinción237. Categorías de la Lista Roja según la UICN 2012238.

Conservación “in situ” versus conservación “ex situ”. En el apartado anterior sobre bancos de hábitats se ha considerado la conservación del medio natural en el que interactúan los factores bióticos y abióticos, es lo que se conoce como conservación in situ. En cambio si la conservación se

p

La versión 3.1 de los criterios y categorías de la Lista Roja (UICN, 2012), considera nueve criterios estructurados de mayor a menor riesgo: extinta, extinta en estado silvestre, en peligro crítico, en peligro, vulnerable, casi amenazada, preocupación menor, datos insuficientes, no evaluada para ninguna de las otras categorías (Cfr. UICN 2012. Categorías y criterios de la Lista Roja de la UICN. Versión 3.1. Segunda edición. vi + 34 pp. Gland, Suiza).

48

Comentario [SI14]: Fig. 14. Categorías de la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza

lleva a cabo fuera del medio natural en jardines botánicos, campos de cultivo o bancos de semillas se denomina conservación ex situ. En cierto modo la conservación in situ previene la pérdida de diversidad mediante la reserva de espacios protegidos, en cambio la conservación ex situ se puede considerar como la última oportunidad para atajar la pérdida de especies amenazadas o variedades vegetales de interés económico. Bancos de semillas. Las semillas pueden conservar su poder germinativo durante siglos si se conservan en condiciones óptimas de baja humedad y temperatura. Es un método muy sencillo que se viene utilizando con éxito desde hace unos cincuenta años para conservar material genético vegetal. En España se vienen utilizando estas técnicas con notable éxito desde 1966 con una colección de semillas de la familia de las crucíferas, algunas de ellas amenazadas239. Al banco de germoplasma del Real Jardín Botánico de Madrid y de la Universidad Politécnica de Madrid le siguieron el del Jardín Botánico de Córdoba para la conservación de la flora andaluza, el de Las Palmas para conservar los endemismos de Canarias y otros como los de las Universidades de Granada y Santiago de Compostela, Blanes y Sóller (Mallorca) destinados a conservar las floras locales240. El Centro Nacional de Recursos Fitogenéticos241 bajo el patrocinio del Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias (INIA) lleva a cabo una gran labor como banco de germoplasma a través de sus grupos de investigación en prospección y recolección de recursos fitogenéticos y conservación de colecciones activas de semillas de cereales y leguminosas242. Se han instalado un millar y medio de bancos de semillas en EEUU, China, Rusia, Japón, Alemania, Canadá y la India entre otros países, sin embargo el proyecto de mayor envergadura a nivel internacional es el Banco Mundial de Semillas de Svalbard (Svalbard Global Seed Vault), también denominado “Bóveda Global de Semillas” o “Bóveda del Fin del Mundo”, construido en 2008 en el archipiélago noruego de Svalbard para salvaguardar la biodiversidad de las especies y variedades vegetales de cultivos que servirían de alimento en caso de una catástrofe mundial. Alberga un silo de 820.000 muestras de semillas de unas 4.000 especies y

49

variedades, algunas de ellas de primera importancia para la alimentación mundial como el maíz, arroz, trigo, cebada y sorgo, aportadas hasta la fecha por 231 países243. Otra forma de conservar germoplasma ex situ es la conservación in vitro mediante el cultivo de tejidos, el almacenamiento de polen o los bancos de ADN. Las técnicas de cultivo in vitro parecen especialmente útiles para especies de difícil conservación como es el caso de la patata que debe replantarse cada año y medio o dos años244. Los jardines botánicos se han mostrado como instrumentos idóneos para asegurar la conservación ex situ de especies amenazadas o en peligro de extinción. En efecto, una de las acciones de la Estrategia global para la biodiversidad245 propone convertir los jardines botánicos del mundo en una red de conservación de los recursos de plantas silvestres. «En los jardines botánicos se cultivan plantas correspondientes a más de 80.000 especies [a nivel mundial], alrededor de la cuarta parte del total. Esta colección reúne sin duda la máxima diversidad fuera de la naturaleza»246. Valga como ejemplo el caso del Jardín Botánico de Córdoba en el que se lleva a cabo un programa de recuperación de la manzanilla de Sierra Nevada (Artemisia granatensis) en peligro crítico (CR) para su posterior reintroducción en el medio natural.

4.1.5. Protección de especies animales en peligro de extinción De la misma manera que en el último apartado se anotan algunas propuestas para la protección de plantas amenazadas y en peligro de extinción, en las últimas décadas asistimos a un interés creciente por la conservación y protección de especies de animales vulnerables, mediante programas de conservación in situ como el Programa LIFE de la Unión Europea, o la conservación ex situ en acuarios o parques zoológicos. La Lista Roja Europea. La mayor parte de la biodiversidad a nivel mundial y europeo se compone de insectos y de otros grupos de invertebrados, de tal manera que ante la gran magnitud del trabajo para alcanzar un diagnóstico de las especies amenazadas, la Comisión Europea

50

Comentario [SI15]: Fig. 15. Missouri Botanical Garden, St. Louis, Missouri, USA.

y la UICN con las directrices regionales de la Lista Roja han acotado una lista de unas 6.000 especies (mamíferos247, reptiles248, anfibios249, peces de agua dulce250, mariposas251, libélulas252, cierto grupo de escarabajos253 y moluscos254) que están amenazadas de extinción a nivel europeo a fin de que puedan tomarse las medidas apropiadas de conservación conforme a los tratados internacionales como la Directiva Hábitats, el Convenio de Berna y el Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). Además, en el ámbito del 7º Programa Marco de Investigación y Desarrollo Tecnológico de la Comisión Europea se está llevando a cabo un proyecto sobre el Estado y las tendencias de los polinizadores europeos (Status and Trends of European Pollinators, STEP) con el fin de determinar la lista roja de polinizadores y en particular las amenazas sobre las poblaciones de abejas255. Programa LIFE. En la Unión Europea, el Programa LIFE es el instrumento financiero de apoyo a proyectos medioambientales y de conservación de la naturaleza en toda la UE y otros países pendientes de adhesión. En particular LIFE-Naturaleza cofinancia proyectos que buscan restaurar y conservar hábitats naturales y proteger especies amenazadas. En España la Fundación Biodiversidad adscrita al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente secunda los proyectos del Programa LIFE+ mediante estrategias de conservación de especies amenazadas como el oso pardo cantábrico, el lince ibérico256, el urogallo cantábrico, el desmán ibérico o el quebrantahuesos. Resulta sorprendente que según el informe Biodiversidad en España257, de 101 planes de actuación destinados a proteger especies del Catálogo Español de Especies Amenazadas, la mitad de los planes se refieren a aves (53,5%), casi una cuarta parte a mamíferos (23,8%) y el resto (22,7%) a seis especies de peces, cuatro anfibios, tres reptiles y solo seis especies de invertebrados –siendo éste el grupo de mayor diversidad-, de lo que se infiere que tenemos una inmensa tarea a desarrollar en aras de conservar la biodiversidad.

51

Comentario [SI16]: Fig. 16. Oso pardo sirio (Ursus arctos syriacus).

Finalmente, un dilema que tendremos que dilucidar en los próximos años es si en los parques zoológicos se ha de mantener los animales que los visitantes desean ver o salvar a aquellos que quizá más pronto que tarde podríamos dejar de ver. En este sentido, los acuarios y parques zoológicos se muestran en la actualidad como instalaciones muy adecuadas para la conservación ex situ de especies en peligro de extinción que puedan luego ser reintroducidas en el medio natural. Los zoológicos modernos se transforman así en una especie de “arcas de Noé”, como último refugio para especies amenazadas. La Asociación Mundial de Zoos y Acuarios (World Association of Zoos and Aquariums, WAZA)

es una de las redes de conservación más grande a

nivel global estableciendo estrategias de conservación de la biodiversidad a través de un centro de consultas. En la actualidad WAZA mantiene unos 127 studbooks o libros de registros genealógicos de unas 161 especies, y administra los programas reproductivos de conservación de más de 1.000 especies y subespecies258. Basta citar como ejemplos el Smithsonian National Zoological Park de Washington que ha reproducido con éxito seis camadas de guepardos, una especie en vías de extinción desde 2004, y el Zoológico del Bronx en New York que ha instaurado un programa de cría en cautividad del bisonte americano259.

5. Reflexiones finales •

Se ha de tender hacia prácticas agrícolas más ecológicas mediante la gestión integrada de plagas para reducir el uso de plaguicidas y aminorar sus efectos contaminantes sobre la biodiversidad, el agua y la salud. La descontaminación de los suelos, del agua y de los alimentos de pesticidas y plaguicidas tiene un coste económico mucho más elevado que el uso de la gestión integrada de las plagas.



La Comisión Europea se propone como objetivo detener la pérdida de la biodiversidad de los ecosistemas para 2020 y restaurar en la medida de lo posible aquéllos afectados por la actividad económica. Se está estudiando el importante papel que los bancos de

52

conservación de la naturaleza o bancos de hábitats pueden jugar en la consecución de estos objetivos. •

La Europa que inventó la revolución industrial ahora tiene la responsabilidad

de encabezar

una

nueva

revolución industrial

mediante las Ciencias ambientales aplicadas para sanear el medio ambiente y proteger la biodiversidad, lo que se ha venido a llamar “ecologizar la economía”. •

Termino con unas palabras pronunciadas en esta misma Aula Magna en 1972 por San Josemaría Escrivá de Balaguer, Fundador de esta Universidad: «La Universidad no vive de espaldas a ninguna incertidumbre, a ninguna inquietud, a ninguna necesidad de los hombres. No es misión suya ofrecer soluciones inmediatas. Pero, al estudiar con profundidad científica los problemas, remueve también los corazones, espolea la pasividad, despierta fuerzas que dormitan, y forma ciudadanos dispuestos a construir una sociedad más justa. Contribuye así con su labor universal a quitar barreras que dificultan el entendimiento mutuo de los hombres, a aligerar el miedo ante un futuro incierto, a promover —con el amor a la verdad, a la justicia y a la libertad— la paz verdadera y la concordia de los espíritus y de las naciones»260. El nuevo grado en Ciencias ambientales de la mano del grado en Biología viene en cierto modo a atender esta nueva necesidad siguiendo el proverbio: «Al final, conservaremos lo que amamos. Amaremos lo que entendamos. Entenderemos lo que nos enseñen». He dicho. Muchas gracias

Agradecimientos Deseo agradecer especialmente a los profesores Arturo Ariño y Enrique Baquero la selección de imágenes que acompañan al texto y a los profesores María Lourdes Moraza y Rafael Miranda las sugerencias y corrección del texto.

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6. Referencias 1

Pontificio Consejo «Justicia y Paz» 2004. Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia. Vaticano. Margalef, R. 2002. Diversidad y biodiversidad en Pineda, F.D. et al. (Eds.), La diversidad biológica de España. Pearson Educación, S.A. Madrid, 412 pp. 3 Margalef, R. 1983. Limnología. Ed. Omega, Barcelona, 1010 pp. 4 Eloranta, P. 1976. Species diversity in the phytoplankton of some Finnish lakes. Ann. Bot. Fennici, 13: 42-48. 5 Granberg, K. 1973. The eutrophication and pollution of lake Päijänne, Central Finnland. Ann. Bot. Fennici, 10: 267-308. 6 Margalef, R. 1983, op. cit., p. 301. 7 http://www.mcgraw-hill.es/med/recursos/capitulos/8448606094.pdf 8 http://en.wikipedia.org/wiki/Thomas_Lovejoy 9 Norse, E. A., K L. Rosenbaum, D. S. Wilcove, et al. 1986. Conserving biological diversity in our national forests. The Wilderness Society, Washington, D.C. 10 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/w/wilson_edward.htm 11 Convenio sobre la diversidad biológica. Naciones Unidas. Conferencia de Río de Janeiro 1992. http://www.cbd.int/doc/legal/cbd-es.pdf 12 Diccionario de la lengua española (DRAE). Edición 22ª, publicada en 2001. Madrid. 13 Herrera Mesa, L. 1977. Memoria sobre concepto, método, fuentes y programa de la asignatura de Zoología de Artrópodos, Pamplona, 182 pp. 14 Herrera Mesa, L. 1977, op. cit., p. 8. 15 Ibíd, p. 12. 16 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/servet.htm 17 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/harvey.htm 18 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/g/gesner.htm 19 http://en.wikipedia.org/wiki/Thomas_Penny 20 http://www.sea-entomologia.org/aracnet/3/insectorum/belles.htm 21 http://www.macroevolution.net/ulisse-aldrovandi.html#.Uo-gAXBFXyA 22 http://www.ecured.cu/index.php/Royal_Society 23 http://eulerarchive.maa.org/historica/places/paris.html 24 Herrera Mesa, L. 1977, op. cit., p. 15. 25 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/hooke.htm 26 http://es.wikipedia.org/wiki/Marcello_Malpighi 27 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/swammerdam.htm 28 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/r/redi.htm 29 http://www.ucmp.berkeley.edu/history/ray.html 30 http://www.sea-entomologia.org/PDF/BOLETIN_32/B32-074-284.pdf 31 Systema naturae per regna tria naturae, secundum classes, ordines, genera, species, cum characteribus, differentiis, synonymis, locis, traducido como: Sistema natural, en tres reinos de la naturaleza, según clases, órdenes, géneros y especies, con características, diferencias, sinónimos, lugares. http://es.wikipedia.org/wiki/Carlos_Linneo#Gribbin 32 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/l/linne.htm 33 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/mutis.htm 34 http://www.mncn.csic.es/Menu/Elmuseo/Presentacinehistoria_Fundacion_y_primera_epoca/seccio n=1177&idioma=es_ES&id=2010062816230001&activo=11.do 35 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/c/cuvier.htm 36 http://www.ucmp.berkeley.edu/history/lamarck.html 37 http://gap.entclub.org/taxonomists/Latreille/index.html 38 Herrera Mesa, L. 2010. Presentación. Documentos Humboldt 10: El Espacio Europeo de Investigación: Nuevos desafíos y oportunidades. Instituto de Dirección y Organización de Empresa, Universidad de Alcalá de Henares, 150 pp. 39 Herrera Mesa, L. 2010, op. cit., p. 4. 40 http://www.avhumboldt.de/?page_id=469l 41 http://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/darwin.htm 42 http://eprints.ucm.es/14224/ 43 Pineda, F.D., De Miguel, J.M., Casado, M.A. & Montalvo, J. (Eds.) 2002. La diversidad biológica de España. Pearson Educación, S.A. Madrid, 412 pp. 44 Bernis, F. 1954. An ecological view of Spanish Avifauna with reference to the Nordic and Alpine Birds. Actas del XI Congreso Internacional Ornitológico de Basel. 45 Purroy, F.J. 1997. Atlas de las Aves de España. SEO/Bird Life. Lynx Ediciones, 583 pp., 285 mapas, 262 ilust. 2

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