Amos Delano NSONGO
Tipología de anáfora asociativa
Amos Delano NSONGO
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TIPOLOGÍA DE ANAFÓRA ANAFÓRA ASOCIATIVA
2015 1
Amos Delano NSONGO
Tipología de anáfora asociativa INTRODUCCIÓN
Existen varias clasificaciones de la anáfora (la gramatical, la léxica entre otras). La anáfora léxica incluye a la vez la anáfora resumitiva o conceptual y la anáfora asociativa, objeto del presente trabajo.
La anáfora asociativa es un
procedimiento anaforización indirecta que se establece entre dos unidades léxicas.
En este estudio, queremos presentar
una tipología de la anáfora
asociativa apoyándonos en los trabajos de George Kleiber.
1. Presentación. Presentación.
La anáfora asociativa es un tipo de repetición que se establece entre dos unidades léxicas. Como indica su denominación, la relación que existe entre el antecedente y el anafórico es una relación de asociación. La conexión se hace indirectamente: “l’anaphore associative est comme une procédure anaphorique de référence indirecte” Kleiber y al (1993 :3). Con la anáfora asociativa la repetición entre el antecedente y la marca anafórica no coincide. La expresión que retoma el antecedente no es de naturaleza gramatical. No se trata pues, de una proforma sino, de dos expresiones léxicas que se relacionan por formar parte del mismo dominio nocional. Semánticamente, son expresiones autónomas, esto es, con referencia virtual plena. Por regla general -y esto sigue en discusiónla anáfora asociativa sigue una orientación que va del hipónimo al hiperónimo (postura defendida principalmente por Kleiber). A modo de ilustración, podemos señalar el siguiente ejemplo: (1)
Esta era hija de Fañ Afri, hijo primogénito de Africara, la cual, llena
de curiosidad, se acercó al extraño bicho que parecía muy delicado, y movida por la piedad, cogió un palo y empezó a examinarle cuidadosamente dándose cuenta que el animal tenía la piel fina transparente, sin pelos ni plumas. 2
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Kleiber (1997:2) destacan cinco variantes de la anáfora asociativa: la anáfora asociativa metonímica, la anáfora asociativa actancial, la anáfora asociativa de tipo miembro-colección, la anáfora asociativa locativa, la anáfora asociativa colectiva. 2. Tipos de anáfora asociativa. asociativa. 2.1.
La anáfora asociativa meronímica. meronímica.
La relación semántica que se establece entre la fuente y el anafórico es una relación meronímica. La metonimia como figura de estilo se basa en una relación de contigüidad. Las unidades implicadas en este paragón se organizan en base a la relación de parte-todo. La pieza anafórica es un ingrediente del antecedente. El sustantivo que conforma la marca anafórica, por lo tanto, solo se puede interpretar con relación a un elemento discursivo que marca la marca una totalidad.
Los encadenamientos (2) y (3) suponen una ilustración de este
fenómeno: (2)
Bajo la mirada de los presentes, el abuelo, hombre viejo del pasado, se levanta, machete en mano, y camina hacia la ceiba sagrada. El amo del pueblo, hombre de tradición, camina encorvado hacia donde sabe yacen los ancestros y se guardan los tabús. Las mentes piensan en la mañana gris entre un poco de sol y un poco de sombra.
(3)
Era la risa de Ekomo, efectivamente. El guagua había arrancado nuevamente y su ruido iba perdiéndose de a poco tras las montañas. Detrás de él, como en persecución del motor, quedó volando su risa.
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La anáfora asociativa locativa.
La marca anafórica retoma un elemento que el antecedente desencadena. Contrariamente a las meronímicas, aquí no estamos frente a un caso de relación de tipo parte-todo. La entidad denotada no depende ontológicamente de la del antecedente.[…] la anáfora no se establece, pues, sobre asociativamente sobre una relación de tipo ‘parte-todo’, sino sobre una relación de localización estereotípica. (Kleiber 1997: 48). Los siguientes encadenamientos lo ilustran: (4) Después de reír nuevamente sin ser coreado por nadie, le oí acercarse a la casa. Mi corazón, como ha dicho, latía de modo extraño. Cuando llegó junto a
la puerta, seguí barriendo sin levantar la cabeza y madre
ahogó una
exclamación que fue cortada por estas palabras: - Mira madre lo que traigo de la ciudad y no te acerques a mí – Después de esto, se encerró en su cuarto y, a pesar de las varias veces que llegaron sus hermanos para visitarle, no abrió la puerta a nadie. (5) En la pequeña estancia, cuelga el secadero como una enorme tela de araña sobre las cabezas de los presentes. Desde algún rincón, escondida, sale una voz lloriqueante, música de fondo de escena macabra.
2.3.
La anáfora asociativa funcional. La marca anafórica retoma un elemento que posee una determinada
función dentro de una jerarquía institucional que el antecedente presupone. (6) En todo nuestro grupo no había ninguna persona mayor y aquello nos daba mayor realce. Todo lo que ocurrió aquella mañana era para mí motivo de risa […] La maestra instructora al verme reír en un momento tan serio, me miraba desde abajo como si fuera a comerme con los ojos.
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(7) Un grupo de danza llegó a nuestro pueblo cuando contaba yo con trece lluvias.
Los danzarines iban bailando de pueblo en pueblo y, cuando llegaron al nuestro, gustó a todos la danza tanto que decidieron que danzasen con nosotros unos días para que los jóvenes del pueblo pudiésemos aprenderla ya que, por aquel entonces no había ningún grupo en el pueblo con el que animar las noches de luna.
Las expresiones la maestra instructora y los danzarines desempeñan un rol, una determinada función en sus respectivos grupos.
2.4.
La anáfora asociativa actancial. La marca anafórica retoma uno de los actantes dentro de la acción que el
antecedente representa. Es, desde este punto de vista, el sujeto de la acción encajada en el antecedente como muestran los encadenamientos siguientes: (8) En el avaha, los hombres discuten. Todos hablan de Nchama, la pícara zalamera que ayer en el bosque comitió adulterio. […]= - ¡Queda esta sentencia! -grita el viejo- para la adultera, cincuenta palos en el trasero.
(9) Por eso, antes de iniciar la cura, los curanderos llevamos a todos los enfermos al río y preguntamos a las hierbas, que son sabias, si aquél sabe la causa de su enfermedad. Se evidencia aquí que los sintagmas nominales anafóricos: la adultera y los
curanderos se interpretan por asociación con adulterio y la cura que les sirven de antecedentes. Esto casos nos permiten discutir el argumento de Kleiber (1997) según el que, una de las particularidades de las anáforas asociativas actanciales es 5
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tener como antecedente un predicado. Los ejemplos que hemos proporcionado tienen en cada caso un sustantivo como antecedente y no un predicado. Podemos concluir pues, que la naturaleza del antecedente como lo pretende Kleiber no se puede restringir a los predicados sino extenderse también a sustantivos.
2.5.
La anáfora asociativa miembromiembro-colectivo.
La marca anafórica retoma un elemento que forma parte de un conjunto o colectivo del antecedente. Una particularidad de este tipo de anáfora asociativa es que, el antecedente siempre tiene que ser un sustantivo plural. Si no lo es, tiene que ser un sustantivo con semantismo plural como por ejemplo la gente. Entre los elementos implicados existe, discursivamente, una relación de asociación. Sin embargo, notamos que se trata también de una relación de pertenencia. La marca anafórica X pertenece a un conjunto representado por una expresión Y (que es antecedente). Los ejemplos siguientes ilustran lo que es la anáfora asociativa colectiva: (10) Cosa que hizo que la curiosidad de los pasajeros los moviese a investigar el origen del extraño líquido que llenaba al suelo molestando a todos. Ekomo, que estaba en un rincón medio estirado, con los ojos semicerrados, no se movió para nada hasta que una mujer, apartando a su niño de él, exclamó en voz alta… (11) Toda la casa era un gran compartimiento y estaba llena de camas ocupadas por pacientes de muchas clases de enfermedades: embarazadas, raquíticos, locos, los poseídos de malos espíritus, fiebre amarilla, embrujos, vientre hinchado…
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En el encadenamiento (10), una mujer forma parte del conjunto constituido por los pasajeros. Es pues, un ingrediente de este. Similar explicación se puede dar para el ejemplo (11). Tal como hemos apuntado anteriormente, existe una relación de pertenencia entre el anafórico y el antecedente. En nuestro caso, una mujer pertenece al conjunto de los pasajeros.
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Tipología de anáfora asociativa CONCLUSIÓN
La anáfora asociativa es un tipo de anáfora léxica donde los elementos en relación no apuntan al mismo referente. La unidad anafórica se conecta a su antecedente (elemento de anclaje o ancla) por asociación, por una relación de contigüidad, de inclusión. Se ha destacado cinco tipos de anáfora asociativa: la meronímica, la locativa, la actancial, la funcional y la de miembro-colectivo.
BIBLIOGRAFIA
KLEIBER, G. y al. (1993) : “Anaphore associative : dans quel sens « roule » telle ?” en Revue quebéquoise de linguistique, Vol 22, N°2, págs. 139-162. KLEIBER, G (1997): « Le possesif via l’anaphore associative » en María Luz Casal Silva y al. (eds.) La lingüística francesa en España camino del siglo XXI PEÑA MARTÍNEZ, G (2006): La anáfora y su funcionamiento discursivo: una aproximación contrastiva, Tesis doctoral, Valencia: Universidad de valencia
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